El Concejo Municipal es la caja de resonancia política donde se legisla sobre temas que afectan de lleno la vida de los rosarinos. Muchas veces, esa función de representación semidirecta que asume el Deliberativo pasa desapercibida, eclipsada por los liderazgos del Poder Ejecutivo. Pero el debate y la construcción de consensos es una función esencial y necesaria que debe asumir el Legislativo local.
Por estos días los ediles analizan un proyecto de Ordenanza presentado por el concejal radical Sebastián Iglesias y que tiene que ver con la necesidad de controlar el excesivo consumo de alcohol, una de las principales causas de accidentes de tránsito en el municipio de Rosario de la Frontera.
El abuso en el consumo de bebidas alcohólicas en menores de edad y jóvenes se convirtió en una señal de alarma. El exceso de alcohol es una "muerte a fuego lento" para los adolescentes, alertan los especialistas. A la mayoría de los padres les preocupa el abuso en el consumo de alcohol de los chicos, pero muy pocos hablan con sus hijos sobre el tema.
Desinhibirse, alcanzar un estado de euforia y llamar la atención del sexo opuesto son los principales factores que motivan a los jóvenes a beber cada vez más alcohol, en una franja que abarca desde los 10 a los 30 años.
Los expertos advierten que el alcohol perjudica, entre otros, al hígado, el aparato circulatorio y el cerebro. Interfiere en el desarrollo y reduce la tasa de crecimiento entre los preadolescentes ya que la toxicidad directa limita el desarrollo de las neuronas. También influye en la coordinación psicomotriz (en la participación de deportes en forma grupal) y afecta a la integración normal de los grupos sociales.
"El proyecto de Ordenanza tiene por objetivo legislar sobre el tema de alcoholemia, si bien existe la Ordenanza Nº 645/88 y su modificatoria la Nº 3.251/09, solamente la norma se refiere a las multas que se debe aplicar a un infractor, pero no esta reglamentado", expresó a El Tribuno el concejal Sebastian Iglesias.
Asimismo dijo que "nuestro proyecto es mucho mas abarcativo, puesto que es necesario establecer medidas estrictas para el control y sanción a infractores de tránsito por causa de ingesta de bebidas alcoholicas".
En ese aspecto la norma autoriza al DEM (Departamento Ejecutivo Municipal) a la compra de dos alcoholímetros homologados para efectuar el control de alcoholemia. Asimismo se prohíbe conducir cualquier vehículo con una alcoholemia mayor a los 0,5 gramos de alcohol por litro de sangre; y 0,2 gramos para quienes conduzcan motocicletas o ciclomotores.
Autoridad de competencia
En cuanto a la autoridad de competencia para hacer cumplir la ordenanza, el concejal Iglesias manifestó que deberá ser la Dirección de Tránsito. "El control pasa a la Dirección de Transito con el apoyo de la policial de la provincia, y la contravención es independiente a la multa que fija la Ley Contravenciónal; por ejemplo, la ordenadaza pena con una multa 600 litros de nafta la primera vez, y se es reincidente la multase triplica y además se le quita la licencia de conducir de un mes a seis meses", explicó el edil rosarino.
El Proyecto de Ordenanza está siendo analizado y estudiado en las Comisiones de Tránsito y Transporte y en la Comisión de Legislación, "esperemos que a la brevedad puedan expedirse ambas comisiones puesto que es un tema que nos preocupa a todos los rosarinos", dijo Sebastian Iglesias.
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El Concejo Municipal es la caja de resonancia política donde se legisla sobre temas que afectan de lleno la vida de los rosarinos. Muchas veces, esa función de representación semidirecta que asume el Deliberativo pasa desapercibida, eclipsada por los liderazgos del Poder Ejecutivo. Pero el debate y la construcción de consensos es una función esencial y necesaria que debe asumir el Legislativo local.
Por estos días los ediles analizan un proyecto de Ordenanza presentado por el concejal radical Sebastián Iglesias y que tiene que ver con la necesidad de controlar el excesivo consumo de alcohol, una de las principales causas de accidentes de tránsito en el municipio de Rosario de la Frontera.
El abuso en el consumo de bebidas alcohólicas en menores de edad y jóvenes se convirtió en una señal de alarma. El exceso de alcohol es una "muerte a fuego lento" para los adolescentes, alertan los especialistas. A la mayoría de los padres les preocupa el abuso en el consumo de alcohol de los chicos, pero muy pocos hablan con sus hijos sobre el tema.
Desinhibirse, alcanzar un estado de euforia y llamar la atención del sexo opuesto son los principales factores que motivan a los jóvenes a beber cada vez más alcohol, en una franja que abarca desde los 10 a los 30 años.
Los expertos advierten que el alcohol perjudica, entre otros, al hígado, el aparato circulatorio y el cerebro. Interfiere en el desarrollo y reduce la tasa de crecimiento entre los preadolescentes ya que la toxicidad directa limita el desarrollo de las neuronas. También influye en la coordinación psicomotriz (en la participación de deportes en forma grupal) y afecta a la integración normal de los grupos sociales.
"El proyecto de Ordenanza tiene por objetivo legislar sobre el tema de alcoholemia, si bien existe la Ordenanza Nº 645/88 y su modificatoria la Nº 3.251/09, solamente la norma se refiere a las multas que se debe aplicar a un infractor, pero no esta reglamentado", expresó a El Tribuno el concejal Sebastian Iglesias.
Asimismo dijo que "nuestro proyecto es mucho mas abarcativo, puesto que es necesario establecer medidas estrictas para el control y sanción a infractores de tránsito por causa de ingesta de bebidas alcoholicas".
En ese aspecto la norma autoriza al DEM (Departamento Ejecutivo Municipal) a la compra de dos alcoholímetros homologados para efectuar el control de alcoholemia. Asimismo se prohíbe conducir cualquier vehículo con una alcoholemia mayor a los 0,5 gramos de alcohol por litro de sangre; y 0,2 gramos para quienes conduzcan motocicletas o ciclomotores.
Autoridad de competencia
En cuanto a la autoridad de competencia para hacer cumplir la ordenanza, el concejal Iglesias manifestó que deberá ser la Dirección de Tránsito. "El control pasa a la Dirección de Transito con el apoyo de la policial de la provincia, y la contravención es independiente a la multa que fija la Ley Contravenciónal; por ejemplo, la ordenadaza pena con una multa 600 litros de nafta la primera vez, y se es reincidente la multase triplica y además se le quita la licencia de conducir de un mes a seis meses", explicó el edil rosarino.
El Proyecto de Ordenanza está siendo analizado y estudiado en las Comisiones de Tránsito y Transporte y en la Comisión de Legislación, "esperemos que a la brevedad puedan expedirse ambas comisiones puesto que es un tema que nos preocupa a todos los rosarinos", dijo Sebastian Iglesias.