Las ilusiones de que un boxeador salteño logre el título del mundo quedaron nuevamente en la lona con la derrota que sufrió ayer el tartagalense Ricardo Santillán frente al japonés Sinshuke Yamanaka, el campeón mundial de la categoría gallo del Consejo Mundial de Boxeo. El salteño cayó en el sexto asalto, se levantó y siguió peleando, pero en el séptimo fue nuevamente al piso y de allí no pudo levantarse.
Yamanaka ganó por nocaut en la séptima vuelta, fue superior en gran parte de la contienda y terminó con éxito en Osaka su octava defensa del campeonato del mundo de los gallos.
La pelea se desarrolló en el estadio Prefectural Gymnasium de la ciudad de Osaka. El local sacó ventaja desde entrada y tras los dos primeros rounds ganaba con dos puntos de diferencia en las tarjetas. Santillán mostró reacción en el tercer episodio, pero no fue suficiente para achicar la diferencia, ni en las tarjetas ni en el ring.
Un corte en la ceja hizo que el trabajo del tartagalense fuese más cuesta arriba. La zurda de Yamanaka hizo mucho daño en el rostro de Ricky y fue la que dio el golpe de gracia en el séptimo round.
Ricky Santillán (23-1-0/ 15 KO), de 27 años, llegó a esta oportunidad mundialista como campeón argentino y sudamericano de los gallos, y además resignó su invicto.
Por su parte, el japonés Yamanaka (32) retuvo el cinturón gallo del CMB, que ostenta desde 2011, cuando derrotó por nocaut técnico al mexicano Christian Esquivel, y esta fue la octava defensa exitosa de su corona y elevó su palmarés a 25 peleas ganadas y dos empates, con 17 nocauts.
Yamanaka celebró junto a los miles de espectadores que lo acompañaron en Osaka. Santillán permanecerá unos días en Europa antes de su regreso a Salta; volverá a casa con hambre de revancha y en busca de reconstruir los pasos perdidos tras su primera derrota en el campo rentado.
Ricardo Núñez, Rubén Condorí, Pastor Maurín, Víctor Hugo Paz y Sergio Medina fueron los otros salteños que combatieron por títulos del mundo y ninguno pudo alcanzar la gloria del triunfo.
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Las ilusiones de que un boxeador salteño logre el título del mundo quedaron nuevamente en la lona con la derrota que sufrió ayer el tartagalense Ricardo Santillán frente al japonés Sinshuke Yamanaka, el campeón mundial de la categoría gallo del Consejo Mundial de Boxeo. El salteño cayó en el sexto asalto, se levantó y siguió peleando, pero en el séptimo fue nuevamente al piso y de allí no pudo levantarse.
Yamanaka ganó por nocaut en la séptima vuelta, fue superior en gran parte de la contienda y terminó con éxito en Osaka su octava defensa del campeonato del mundo de los gallos.
La pelea se desarrolló en el estadio Prefectural Gymnasium de la ciudad de Osaka. El local sacó ventaja desde entrada y tras los dos primeros rounds ganaba con dos puntos de diferencia en las tarjetas. Santillán mostró reacción en el tercer episodio, pero no fue suficiente para achicar la diferencia, ni en las tarjetas ni en el ring.
Un corte en la ceja hizo que el trabajo del tartagalense fuese más cuesta arriba. La zurda de Yamanaka hizo mucho daño en el rostro de Ricky y fue la que dio el golpe de gracia en el séptimo round.
Ricky Santillán (23-1-0/ 15 KO), de 27 años, llegó a esta oportunidad mundialista como campeón argentino y sudamericano de los gallos, y además resignó su invicto.
Por su parte, el japonés Yamanaka (32) retuvo el cinturón gallo del CMB, que ostenta desde 2011, cuando derrotó por nocaut técnico al mexicano Christian Esquivel, y esta fue la octava defensa exitosa de su corona y elevó su palmarés a 25 peleas ganadas y dos empates, con 17 nocauts.
Yamanaka celebró junto a los miles de espectadores que lo acompañaron en Osaka. Santillán permanecerá unos días en Europa antes de su regreso a Salta; volverá a casa con hambre de revancha y en busca de reconstruir los pasos perdidos tras su primera derrota en el campo rentado.
Ricardo Núñez, Rubén Condorí, Pastor Maurín, Víctor Hugo Paz y Sergio Medina fueron los otros salteños que combatieron por títulos del mundo y ninguno pudo alcanzar la gloria del triunfo.