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Buscó 15 años a su hija y estaba enterrada como NN a pocas cuadras de su casa

Mariela Tasat, una chica de 14 años que estaba desaparecida desde el año 2002 en el partido bonaerense de Lanús, fue encontrada enterrada como NN en un cementerio local y ahora la Justicia investiga cómo ocurrió el accidente ferroviario que terminó con su vida.
Viernes, 13 de octubre de 2017 18:25

Una chica de 14 años que estaba desaparecida desde el año 2002 en el partido bonaerense de Lanús fue encontrada enterrada como NN en un cementerio local y ahora la Justicia investiga cómo ocurrió el accidente ferroviario que terminó con su vida.
Según informaron fuentes judiciales a NA, se trata de Mariela Tasat quien el 7 de septiembre de 2002 tuvo un accidente en las vías del Ferrocarril Roca, en Lanús, y después de pasar por dos hospitales, falleció.
Pero la madre de la adolescente, Luisa Olivera, no se enteró de lo que había pasado con su hija hasta este miércoles cuando la Justicia de Lomas de Zamora le confirmó que el cuerpo que estaba enterrado como NN en el cementerio de Lanús, a pocas cuadras de su casa, era el de su hija.
Olivera había denunciando la desaparición de la adolescente ese mismo 7 de septiembre, cuando le contó a la Policía que su hija estaba en la puerta de su casa junto a su otro hijo tomando mates y que en un momento el chico se levantó para atender el teléfono y que cuando volvió, Mariela ya no estaba.
En ese momento comenzó una búsqueda que duró 15 años y llevó a Olivera a ir a varios prostíbulos, a diferentes barrios, y hasta recurrió a la Asociación Civil Missing Children, en donde Mariela se convirtió en uno de los casos más viejos de chicos desaparecidos.
Es mas, una de las encargadas de impulsar la búsqueda de Mariela fue la luego asesinada María Marta García Belsunce.
Hace dos meses, Olivera se presentó ante la fiscal de Lomas de Zamora, Viviana Giorgi, a cargo de la causa por la búsqueda de la joven, y ésta le contó que se encontraba realizando averiguaciones sobre un expediente caratulado "averiguaciones de causales de muerte".
En esa causa había un cuerpo sin identificar que estaba enterrado como NN en el cementerio de Lanús y una carpeta con huellas dactilares que habían sido registradas por la Policía en el momento del deceso de la chica y tenían que ser cotejadas con las de Mariela, para saber si se trataba de la adolescente.
Así fue como la madre de la chica le acercó a la fiscal un documento de identidad con una huella de su hija. Según las fuentes consultadas, tras el cotejo realizado, los peritos determinaron que las huellas que estaban en las fichas de la Policía y las del DNI, se correspondían.
Tras conocerse el resultado de la pericia, la madre de la joven se enteró que su hija falleció luego de un accidente en las vías del Ferrocarril Roca el mismo 7 de septiembre.
"A mi hija me la entregaron muerta. Hace 15 años que la vengo buscando y no la podían encontrar. No la puedo velar porque ni siquiera tengo los huesitos", dijo Olivera en declaraciones a medios televisivos.
La mujer sospecha que a su hija la raptaron y que en el intento de escaparse de sus secuestradores la atropelló el tren: "Capaz quiso escaparse y la chocó el tren. Calculamos que eso pasó, que alguien la llevó, quiso escapar y la pisó el tren".
Con respecto al accionar de la Justicia, Olivera remarcó: "Nunca me llamaron, nunca conocí a un fiscal ni a ningún juez, siempre me decían que no había nada".
Sin embargo, la fuente judicial consultada, indicó que "no es que no se hizo nada durante estos 15 años. La causa fue avanzando muy lento, pero cada tanto se hacían algunas averiguaciones. Hay que tener en cuenta que las posibilidades tecnológicas que había en 2002 no son las mismas que hay ahora para buscar a una persona. Los trenes no tenían cámaras, las calles tampoco".
"Además la causa se investigaba en dos organismos, en un Juzgado de Menores y en la Fiscalía, y eso también hizo que todo se demorara. Ahora hay que determinar cómo ocurrió el accidente ferroviario en el que murió Mariela para poder darle una respuesta a la madre", concluyó.

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Una chica de 14 años que estaba desaparecida desde el año 2002 en el partido bonaerense de Lanús fue encontrada enterrada como NN en un cementerio local y ahora la Justicia investiga cómo ocurrió el accidente ferroviario que terminó con su vida.
Según informaron fuentes judiciales a NA, se trata de Mariela Tasat quien el 7 de septiembre de 2002 tuvo un accidente en las vías del Ferrocarril Roca, en Lanús, y después de pasar por dos hospitales, falleció.
Pero la madre de la adolescente, Luisa Olivera, no se enteró de lo que había pasado con su hija hasta este miércoles cuando la Justicia de Lomas de Zamora le confirmó que el cuerpo que estaba enterrado como NN en el cementerio de Lanús, a pocas cuadras de su casa, era el de su hija.
Olivera había denunciando la desaparición de la adolescente ese mismo 7 de septiembre, cuando le contó a la Policía que su hija estaba en la puerta de su casa junto a su otro hijo tomando mates y que en un momento el chico se levantó para atender el teléfono y que cuando volvió, Mariela ya no estaba.
En ese momento comenzó una búsqueda que duró 15 años y llevó a Olivera a ir a varios prostíbulos, a diferentes barrios, y hasta recurrió a la Asociación Civil Missing Children, en donde Mariela se convirtió en uno de los casos más viejos de chicos desaparecidos.
Es mas, una de las encargadas de impulsar la búsqueda de Mariela fue la luego asesinada María Marta García Belsunce.
Hace dos meses, Olivera se presentó ante la fiscal de Lomas de Zamora, Viviana Giorgi, a cargo de la causa por la búsqueda de la joven, y ésta le contó que se encontraba realizando averiguaciones sobre un expediente caratulado "averiguaciones de causales de muerte".
En esa causa había un cuerpo sin identificar que estaba enterrado como NN en el cementerio de Lanús y una carpeta con huellas dactilares que habían sido registradas por la Policía en el momento del deceso de la chica y tenían que ser cotejadas con las de Mariela, para saber si se trataba de la adolescente.
Así fue como la madre de la chica le acercó a la fiscal un documento de identidad con una huella de su hija. Según las fuentes consultadas, tras el cotejo realizado, los peritos determinaron que las huellas que estaban en las fichas de la Policía y las del DNI, se correspondían.
Tras conocerse el resultado de la pericia, la madre de la joven se enteró que su hija falleció luego de un accidente en las vías del Ferrocarril Roca el mismo 7 de septiembre.
"A mi hija me la entregaron muerta. Hace 15 años que la vengo buscando y no la podían encontrar. No la puedo velar porque ni siquiera tengo los huesitos", dijo Olivera en declaraciones a medios televisivos.
La mujer sospecha que a su hija la raptaron y que en el intento de escaparse de sus secuestradores la atropelló el tren: "Capaz quiso escaparse y la chocó el tren. Calculamos que eso pasó, que alguien la llevó, quiso escapar y la pisó el tren".
Con respecto al accionar de la Justicia, Olivera remarcó: "Nunca me llamaron, nunca conocí a un fiscal ni a ningún juez, siempre me decían que no había nada".
Sin embargo, la fuente judicial consultada, indicó que "no es que no se hizo nada durante estos 15 años. La causa fue avanzando muy lento, pero cada tanto se hacían algunas averiguaciones. Hay que tener en cuenta que las posibilidades tecnológicas que había en 2002 no son las mismas que hay ahora para buscar a una persona. Los trenes no tenían cámaras, las calles tampoco".
"Además la causa se investigaba en dos organismos, en un Juzgado de Menores y en la Fiscalía, y eso también hizo que todo se demorara. Ahora hay que determinar cómo ocurrió el accidente ferroviario en el que murió Mariela para poder darle una respuesta a la madre", concluyó.

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