La menopausia comienza a partir de los 45 y puede extenderse hasta los 55 años y se caracteriza principalmente por la cesación de los ciclos menstruales. Durante este lapso de tiempo los ovarios dejan de producir estrógeno y progesterona y entre el 60 y el 80% de las mujeres sufren una sensación de calor abrupto e intenso, uno de los síntomas más comunes junto con la sudoración nocturna. Además, la menopausia impacta en el cuerpo de la mujer con algunos de los siguientes síntomas:
Huesos: conocido como osteoporosis, la masa ósea comienza a disminuir en esta etapa, los huesos se vuelven más frágiles y propensos a fracturarse.
Corazón: el riesgo a desarrollar problemas cardiovasculares aumenta.
Peso: se producen cambios en la distribución de grasa corporal ya que comienza a acumularse alrededor del abdomen.
Piel: hay una disminución en los niveles de colágeno y en consecuencia una aceleración del envejecimiento de la piel.
Recientemente, Vichy Argentina difundió un estudio que demuestra que este período tiene diferentes concepciones y visiones según a quien se consulta.
El estudio llevado adelante por Kantar TNS, para Vichy Argentina, demuestra que las mujeres adultas, mayores de 45 años, asocian esa etapa con situaciones más positivas que las mujeres más jóvenes. Entre las mujeres de 18 a 44 años, el 21% relaciona la menopausia con la plenitud y el disfrute; este mismo indicador aumenta 32 puntos (53%) entre las mujeres mayores de 45 años. A la inversa, la vinculación con la vejez y la angustia se reduce significativamente entre las mujeres más adultas (15%) y sube en las más jóvenes (43%).
Entendiendo que durante esta etapa las mujeres adultas transitan cambios estéticos y corporales importantes, los efectos que más sufren en su cuerpo, según la encuesta, son la sequedad de la piel (75%), seguido por el aumento de arrugas (39%), la pérdida de densidad ósea (27%) y el cambio de tonalidad de la piel (17%).
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La menopausia comienza a partir de los 45 y puede extenderse hasta los 55 años y se caracteriza principalmente por la cesación de los ciclos menstruales. Durante este lapso de tiempo los ovarios dejan de producir estrógeno y progesterona y entre el 60 y el 80% de las mujeres sufren una sensación de calor abrupto e intenso, uno de los síntomas más comunes junto con la sudoración nocturna. Además, la menopausia impacta en el cuerpo de la mujer con algunos de los siguientes síntomas:
Huesos: conocido como osteoporosis, la masa ósea comienza a disminuir en esta etapa, los huesos se vuelven más frágiles y propensos a fracturarse.
Corazón: el riesgo a desarrollar problemas cardiovasculares aumenta.
Peso: se producen cambios en la distribución de grasa corporal ya que comienza a acumularse alrededor del abdomen.
Piel: hay una disminución en los niveles de colágeno y en consecuencia una aceleración del envejecimiento de la piel.
Recientemente, Vichy Argentina difundió un estudio que demuestra que este período tiene diferentes concepciones y visiones según a quien se consulta.
El estudio llevado adelante por Kantar TNS, para Vichy Argentina, demuestra que las mujeres adultas, mayores de 45 años, asocian esa etapa con situaciones más positivas que las mujeres más jóvenes. Entre las mujeres de 18 a 44 años, el 21% relaciona la menopausia con la plenitud y el disfrute; este mismo indicador aumenta 32 puntos (53%) entre las mujeres mayores de 45 años. A la inversa, la vinculación con la vejez y la angustia se reduce significativamente entre las mujeres más adultas (15%) y sube en las más jóvenes (43%).
Entendiendo que durante esta etapa las mujeres adultas transitan cambios estéticos y corporales importantes, los efectos que más sufren en su cuerpo, según la encuesta, son la sequedad de la piel (75%), seguido por el aumento de arrugas (39%), la pérdida de densidad ósea (27%) y el cambio de tonalidad de la piel (17%).
Se tuvieron en cuenta 623 casos para el estudio difundido y participaron de la muestra mujeres de 18 años en adelante, residentes en todo el país y pertenecientes a todos los niveles socioeconómicos
“La piel es el órgano no reproductivo más extenso en el que actúan los estrógenos. La disminución de los niveles de estos últimos impacta en la estructura y función de la piel mediante un proceso denominado ‘envejecimiento hormonal’. Los cambios ocurren en todas las capas de la piel”, aseguró la Dra. Cappetta, médica dermatóloga del CEMIC, del Instituto Buenos Aires Skin, de la Sociedad Argentina de Dermatología y asesora de Vichy Argentina (MN 108151).
“La menopausia es una de las etapas de la vida de la mujer, por lo tanto es un proceso fisiológico que está preprogramado. En la mayoría de los casos ocurre a una edad promedio de 50 años; considerando la expectativa de vida actual, una mujer vivirá casi un tercio de su vida luego de menopausia”, agregó la Dra. Cappetta.
Otros de los aspectos destacados por el estudio es la frecuencia con la que se habla de menopausia entre amigas.
El 43% de las mujeres de 18 a 44 años habla al respecto con alguna frecuencia, el 2% siempre, el 13% a veces y el 28% pocas veces. Mientras que el 80% de las mujeres mayores a 44 años habla del tema con alguna frecuencia: el 10% siempre, el 42% a veces y el 28% pocas veces. Esto demuestra que a medida que la mujer se va volviendo más adulta va teniendo una percepción más positiva de la menopausia, lo que hace que deje de ser un tema tabú y se hable seguido con amigas.
También es interesante la frecuencia con la que se habla de la menopausia entre familiares y parientes cercanos:
El 64% de las mujeres adultas (45+) habla del tema con alguna frecuencia, el 6% siempre, el 28% a veces y el 30% pocas veces. Además, el 49% de las mujeres de 18 a 44 años habla de la menopausia con alguna frecuencia, 1% lo hace siempre, 14% a veces y 34% pocas veces.
Así, el estudio confirmó que la menopausia es un momento más de la vida, con situaciones buenas e incómodas al mismo tiempo, pero que es importante no perderla de vista para poder transitarla plenamente. Actividad física, alimentación sana, expresar y compartir los sentimientos generados por los cambios físicos y hacer tratamientos correctos para la piel son factores clave para mantener la armonía durante la menopausia.