Por Verónica Casasola - [email protected]
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Las diferencias en torno a un subsidio enfrentó en las últimas horas a integrantes de la Asociación de Ciegos Adultos Habib Yazlle y la Municipalidad de Salta. Con un trámite iniciado en octubre del año pasado, la institución hizo público el reclamo por una ayuda económica de 50 mil pesos mensuales. Según lo expresado por algunos de sus integrantes, hasta el momento no existió una respuesta concreta por parte de las autoridades y aducen una situación vivida también en febrero del 2016.
“El año pasado nos pasó exactamente lo mismo para conseguir el subsidio. Pedimos y no nos escucharon. Al final nos prometieron que se harían cargo de las obras de refacción y remodelación del edificio donde funciona nuestra asociación y nunca se inició ninguna obra”, dijo a El Tribuno la presidenta de la entidad, Nieves Torres.
“Es muy feo para nosotros que somos no videntes enfrentar situaciones tan desagradables que rozan el abandono de persona y el abuso de confianza”, agregó la mujer.
El pedido de ayuda económica ingresó el 25 de octubre último a la Secretaría de Gobierno municipal bajo expediente N§ 64.998. En este se solicita una suma de dinero mensual con alrededor del 60% de aumento con relación al monto otorgado desde marzo del 2016 (30 mil pesos).
“La resolución ya está aprobada y se le autorizó 30 mil pesos por mes. Desde Gobierno tenemos para distribuir 160 mil pesos mensuales en subsidios entre las distintas asociaciones que funcionan en la ciudad. A la Asociación Yazlle se le autorizó el 25% del presupuesto destinado para ese fin”, respondió a El Tribuno el secretario de Gobierno Luis García Salado.
Las discrepancias se presentan además por ciertas irregularidades en la periodicidad de la cifra que se habría autorizado para 2017. Lo concreto es que desde la Municipalidad se envió a la Asociación Habib Yazlle una cédula de notificación con fecha 24 de enero para solicitar la rendición de fondos otorgados el año pasado (360 mil pesos).
Maltratos y discriminación fueron algunos de los conceptos utilizados desde la entidad para calificar momentos vividos durante los últimos días en el interior del Centro Cívico Municipal.
“Nos maltratan y nos discriminan. Nunca en todo este tiempo fuimos recibidos por ningún funcionario. Directamente nos dicen que están en reuniones y tenemos que deambular todos los días por las oficinas del CCM”, destacaron Agustina Calizaya, Matías Amaya y Cristina Duarte, miembros de la entidad.
Dentro de los servicios que actualmente se brindarían en la asociación figura el alojamiento y comida de algunas personas ciegas provenientes de otras localidades y que no cuentan con familia que los ayude.
Resolución incompleta
Entre las irregularidades denunciadas por Nieves Torres en el trámite para acceder al subsidio figuraría una resolución incompleta.
“Simplemente por una cuestión presupuestaria, interna y administrativa se envió una resolución que estipula el dinero por un mes. Pero está prevista otra resolución para el pago de los meses restantes”, expresó al respecto García Salado.