Un joven fue brutalmente atacado con arma blanca en plena vía pública, en una de las avenidas más concurridas de esta capital, pero su caso quedó sin testigos al comprobarse que el domo o cámara de seguridad instalada a pocos metros del suceso estaba fuera de servicio desde hace un largo tiempo.
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Un joven fue brutalmente atacado con arma blanca en plena vía pública, en una de las avenidas más concurridas de esta capital, pero su caso quedó sin testigos al comprobarse que el domo o cámara de seguridad instalada a pocos metros del suceso estaba fuera de servicio desde hace un largo tiempo.
Fuentes de la zona sudeste, de los barrios que componen el complejo Solidaridad, aseguraron que la inseguridad sobre las avenidas de estos barrios es alarmante y que a pesar de que los policías, al menos los suboficiales, trabajan a destajo, la delincuencia tiene la zona prácticamente liberada.
El impresionante suceso, por lo brutal y sangriento, se produjo ayer en horas de la mañana, cuando Diego Ortiz (29) transitaba la avenida Felipe Varela, a esa hora ya poblada de gente y feriantes de todo tipo cuando en ocasión de robo o asalto dos o más sujetos apretaron en la vía pública a Ortiz.
El joven se resistió a entregar su dinero y sus bienes y acorralado contra la pared de un domicilio recibió como respuesta un certero puntazo en el hemitórax izquierdo que lo derrumbó sobre el piso.
Los delincuentes al ver que habían herido casi de muerte al asaltado decidieron huir del lugar.
El joven malherido y sangrante ante la indiferencia de los transeúntes y el no metás barrial se fue agarrando de las paredes hasta la casa de un conocido suyo.
Este hombre lo vio malherido e inmediatamente en su auto particular lo trasladó a una dependencia primaria de la salud.
Desde allí se comunicó con la policía para poner en conocimiento el accionar de los delincuentes sobre avenida Felipe Varela.
Una ambulancia del Samec llegó hasta la sala de primeros auxilios y desde allí trasladó al herido hacia el hospital San Bernardo, donde ingresó con el diagnóstico de herida cortopunzante en hemitórax izquierdo.
Tras los hechos el herido había dado ya su versión del suceso y la descripción de los forajidos.
Teniendo la hora del suceso y las coordenadas donde se produjo el mismo personal de la Brigada de Investigaciones sector 4 solicitaron al centro provincial de monitoreo las imágenes captadas desde los distintos domos de la avenida Felipe Varela.
Dos horas más tarde, luego que el personal de la Brigada de Investigaciones tomara declaraciones informativas a vecinos de la zona y posibles testigos, fue informado que las cámaras ubicadas en la avenida están fuera de servicio desde hace algún tiempo
Es decir que las cosas volvieron de inmediato a foja cero
De esta manera otro acto de violencia quedará sin resolver”. .