El miércoles, personal policial de la Unidad de Delitos contra la Integridad Sexual detuvo a un hombre de 39 años, quien gozaba de libertad condicional tras ser condenado a 13 años de prisión en 2005 por haber matado a su mujer. Fue detenido e imputado por "abuso sexual" y "amenazas" en contra de su exmujer. La trágica historia de Andrea Neri y el doble femicida Gabriel "Chirete" Herrera, se hizo eco en este último caso. Pero a diferencia del atroz femicidio de Neri -una joven madre de 19 años-, la nueva víctima reaccionó a tiempo y pudo salvar su vida.
inicia sesión o regístrate.
El miércoles, personal policial de la Unidad de Delitos contra la Integridad Sexual detuvo a un hombre de 39 años, quien gozaba de libertad condicional tras ser condenado a 13 años de prisión en 2005 por haber matado a su mujer. Fue detenido e imputado por "abuso sexual" y "amenazas" en contra de su exmujer. La trágica historia de Andrea Neri y el doble femicida Gabriel "Chirete" Herrera, se hizo eco en este último caso. Pero a diferencia del atroz femicidio de Neri -una joven madre de 19 años-, la nueva víctima reaccionó a tiempo y pudo salvar su vida.
Mientras purgaba una pena por haber matado a su mujer en Rosario de la Frontera, el sujeto recibió el beneficio de la libertad condicional. Al salir de la cárcel volvió a incurrir en la violencia de género. La fiscal Penal 3, Cecilia Flores Toranzos, intervino en la causa a raíz de una denuncia efectuada por una mujer víctima de abuso y amenazas de muerte por parte del convicto.
La víctima reside en un barrio de la zona oeste de esta ciudad, y en sus declaraciones expuso una situación de extrema violencia.
"Te va a pasar lo mismo que a la otra", parafraseó la mujer en alusión a una de las amenazas que le hizo el convicto. Frente a esos modos de dominación ella decidió superar el temor que la mantenía sumida en el silencio y denunció a su ex.
Impregnado de violencia, temor e incertidumbre, el relato de la mujer fue el disparador para que los encargados de investigar se dieran cuenta de la gravedad de los hechos y los antecedentes de un femicida suelto en la ciudad. La fiscal Flores Toranzos solicitó al Juzgado de Garantías 8, a cargo de Claudia Puertas, la detención del penado, que fue arrestado el miércoles por la tarde y ayer fue imputado por los delitos de "abuso sexual con acceso carnal" y "tentativa de abuso sexual con acceso carnal y amenazas".
Amor entre rejas
La historia de la nueva víctima de violencia de género, de quien se preserva su identidad para cuidar los derechos de sus tres hijos, tiene un paralelo con lo sucedido con el femicidio de Andrea Neri, el 5 de enero de este año en el interior del penal de Villa Las Rosas. Al igual que Andrea Neri, la nueva víctima conoció al sujeto adentro de la cárcel, mientras él purgaba una pena de 13 años por haber matado a su primera mujer.
En el interior del penal la mujer se enamoró del hombre, de 39 años. Con el tiempo tuvieron tres hijos. En su relato la víctima hace hincapié en una relación signada por la violencia física, psicológica y sexual. Nunca se animó a denunciarlo y terminar con el calvario por el temor que él se había encargado de infundirle. Sostuvo que la amenaza más frecuente era: "Te pasará lo mismo que a la otra".
La decisión y el valor de denunciar a su ex hicieron que hoy esta madre de tres hijos, pudiera comenzar de nuevo. Situación que Andrea Neri no pudo lograr, dado que el mismo día que había decidido terminar con la relación amorosa, Chirete Herrera la mató durante una visita íntima. Herrera se convirtió en doble femicida femicida, ya que una década antes había matado a su primera mujer, Verónica Castro, en el penal de Metán, también durante una visita íntima.