La gran novedad del clásico de esta tarde entre Juventud Antoniana y Gimnasia y Tiro será el regreso de las banderas (los “trapos”) para reactivar el color de las hinchadas en un partido especial. La presencia de las banderas en las tribunas le dará sin duda un toque de color al esperado encuentro, más aún luego de tanta discusión sobre las polémicas medidas impuestas por las fuerzas de seguridad en clásicos anteriores. Sin embargo, desde la Policía de la Provincia aclararon que solo estarán permitidas las banderas de no más de un metro y que no se permitirán palos flameadores.
Pero por algo se empieza, en el afán de volver a la normalidad y recuperar los condimentos del fútbol que últimamente se fueron perdiendo. El operativo de seguridad estará a cargo del comisario principal Walter Torres y arrancará a las 15 en las inmediaciones del estadio y en distintos puntos de la ciudad, custodiando a las hinchadas en sus recorridos e implementando otras medidas innovadoras, como ser un operativo paralelo para evitar incidentes en el transporte público de pasajeros, por pedido expreso de la UTA, el gremio de los choferes de colectivos. Torres le adelantó a El Tribuno que la disposición de permitir el ingreso de banderas será un banco de prueba para que en un futuro se permita “la portación de otros elementos”, aunque todo estará supeditado al comportamiento del público.
Habrá rigurosos cacheos con varios filtros y seguirá utilizándose el sistema biométrico para impedir la filtración de hinchas con antecedentes.
La hinchada de Juventud ingresará por calle Tavella y ocupará la popular sur (allí se ubicará la Número 1), la preferencial (La Leal) y dos tercios de plateas. Los seguidores de Gimnasia accederán por avenida Paraguay y se ubicarán en la cabecera norte y platea norte.
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La gran novedad del clásico de esta tarde entre Juventud Antoniana y Gimnasia y Tiro será el regreso de las banderas (los “trapos”) para reactivar el color de las hinchadas en un partido especial. La presencia de las banderas en las tribunas le dará sin duda un toque de color al esperado encuentro, más aún luego de tanta discusión sobre las polémicas medidas impuestas por las fuerzas de seguridad en clásicos anteriores. Sin embargo, desde la Policía de la Provincia aclararon que solo estarán permitidas las banderas de no más de un metro y que no se permitirán palos flameadores.
Pero por algo se empieza, en el afán de volver a la normalidad y recuperar los condimentos del fútbol que últimamente se fueron perdiendo. El operativo de seguridad estará a cargo del comisario principal Walter Torres y arrancará a las 15 en las inmediaciones del estadio y en distintos puntos de la ciudad, custodiando a las hinchadas en sus recorridos e implementando otras medidas innovadoras, como ser un operativo paralelo para evitar incidentes en el transporte público de pasajeros, por pedido expreso de la UTA, el gremio de los choferes de colectivos. Torres le adelantó a El Tribuno que la disposición de permitir el ingreso de banderas será un banco de prueba para que en un futuro se permita “la portación de otros elementos”, aunque todo estará supeditado al comportamiento del público.
Habrá rigurosos cacheos con varios filtros y seguirá utilizándose el sistema biométrico para impedir la filtración de hinchas con antecedentes.
La hinchada de Juventud ingresará por calle Tavella y ocupará la popular sur (allí se ubicará la Número 1), la preferencial (La Leal) y dos tercios de plateas. Los seguidores de Gimnasia accederán por avenida Paraguay y se ubicarán en la cabecera norte y platea norte.
Las entradas: a comprar temprano
Se aconseja comprar las entradas con anticipación para que el ingreso en el estadio sea más prolijo. Lugares de venta: hoy, en Lerma y La Rioja (Juventud) y en Vicente López y Leguizamón (Gimnasia), de 9 a 15. Luego podrán adquirirse en el Martearena. Los precios: populares $120, damas y jubilados $70; preferencial $200, damas y jubilados $150; plateas $250, damas y jubilados $200, menores $60 (en cualquier sector).