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18 de Mayo,  Salta, Centro, Argentina
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Salta ganadera, un proyecto frenado por fundamentalismos

Más allá de la caída circunstancial del consumo interno, la carne se proyecta como demanda valiosa a nivel mundial.
Jueves, 02 de marzo de 2017 00:00

La moda de los veganos es otra forma de fundamentalismo importado -en este caso, desde la India- que evolucionó de dieta para burgueses con buenos ingresos hacia el terrorismo alimentario. Reemplazar la leche vacuna por la leche de almendras es una sofisticación que contrasta con los gustos de la gente y las necesidades de la provincia.

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La moda de los veganos es otra forma de fundamentalismo importado -en este caso, desde la India- que evolucionó de dieta para burgueses con buenos ingresos hacia el terrorismo alimentario. Reemplazar la leche vacuna por la leche de almendras es una sofisticación que contrasta con los gustos de la gente y las necesidades de la provincia.

Salta es una potencia ganadera que no se desarrolla por culpa de los otros fundamentalistas que quieren convertir al Chaco salteño en un jardín botánico sin guardaparques.

Rivadavia, con 25.951 km2 y una población de 30.300 habitantes (2010), es el departamento con mayor índice de Necesidades Básicas Insatisfechas en Salta y el segundo más pobre a nivel nacional, detrás de Ramón Lista de Formosa.

Para los veganos no es problema. Para los salteños, sí.

El 60% de la superficie de Rivadavia está en condiciones de ser desarrollada. Son 1.400.000 ha actualmente explotadas y pastoreadas en forma irracional, y degradadas. La producción con tecnología tiene una carga de una cabeza cada 1,60 ha y de 18 a 20 ha en las condiciones actuales. Incorporando desarrollo tecnológico en esta superficie subocupada, Rivadavia podría llegar a las 850.000 cabezas de vacunos y el de ganado menor a 350.000 cabezas. Seis veces más que ahora.

La FAO pronosticó que en 2050 la carne vacuna será un producto de lujo en todo el mundo y propone mejorar la producción ganadera en todas las regiones aptas para su desarrollo. Se espera en la próxima década un incremento del 22% en el consumo de carnes a nivel global.

Mal que les pese a los veganos, comer carne no es una costumbre, sino que forma parte de un sistema de alimentación mucho más antiguo que la mística oriental -o pitagórica- que ellos invocan.

Recientemente el Instituto de Promoción de la Carne Vacuna (IPCVA) realizó un estudio, apelando al sistema de focus group, donde se verificó que la carne vacuna está asociada a significaciones positivas: "comida rica/sabrosa" (47 %), "asado/tradición" (26%) y "valores nutricionales" (18%). Para la mayoría, las carnes rojas presentan ventajas en sabor, color y olor, y se destacan con respecto a otras carnes por su facilidad de preparación, su adaptabilidad al paladar familiar y su condición de alimento rendidor. Volviendo a Rivadavia, un propietario con 2.000 hectáreas para incorporar tecnología debería poner en desarrollo 1.200, dejando 800 hectáreas, el 40% restante, como reserva.

Provisto de infraestructura, riego y transporte, el departamento despegaría.

Si se lograra garantizar seguridad jurídica y financiamiento, la industria agroalimentaria lo transformaría en polo de desarrollo.

 

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