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Un barrio lleva dos años sin servicios

La comuna detectó falencias como una red de agua y otra de cloacas superpuestas en una misma zanja.
Domingo, 26 de marzo de 2017 00:00

Sergio Tapia [email protected]

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Unas 120 familias del barrio Nueva Esperanza de General Güemes, que fueron adjudicadas por Tierra y Hábitat con terrenos de las 500 hectáreas expropiadas al ingenio San Isidro en 2011, expresaron su preocupación por la falta de los servicios básicos que padecen desde hace más de dos años cuando comenzaron a habitarlos.
“Tenemos la red eléctrica, la red de agua y la red de cloacas; sin embargo, no podemos hacer uso de ninguna de ellas porque no están habilitadas. Ya pasó mucho tiempo de vivir sin nada, solo contamos con canillas comunitarias y estamos colgados de la red de luz. Por eso estamos pidiendo repuestas positivas a nuestros reclamos”, expresó Marta Braga, vecina del barrio güemense. 
Sobre esta situación, la intendenta Alejandra Fernández junto a algunos de sus funcionarios explicaron los inconvenientes que hay con los terrenos y las gestiones que se están realizando para solucionarlos.
“La expropiación de los terrenos, al igual que las obras realizadas en la gestión anterior están cargadas de errores, a tal punto que aún nos estamos reuniendo con representantes del ingenio San Isidro para cerrar todo lo relacionado con la expropiación. En cuanto a los servicios básicos, también debemos solucionar un montón de cosas mal hechas”, expresó la intendenta.

Falencias increíbles

Con la ayuda de personal de Obras Públicas de la comuna y de Tierra y Hábitat de la Provincia, se detectaron una serie de falencias increíbles. El colmo parece ser el hecho de que tendieron una red de agua y otra de cloacas una encima de la otra, ambas colocadas en una sola zanja.
Otro desastre de la infraestructura del novel barrio es que las cloacas nunca fueron conectadas a la red troncal que conduce los líquidos a la planta depuradora.
Además, la red eléctrica nunca fue terminada por falta de pago, en la gestión anterior, a la empresa contratada para el tendido del cableado.
Finalmente, pero no menos crítico y peligroso, personal de la Municipalidad detectó que al menos 9 de los terrenos se encuentran debajo de la red de alta tensión. 
Esto claramente obligará a la reubicación de los vecinos o a estudiar alguna alternativa para ese cableado.
“Estamos trabajando con Provincia y personal de Aguas del Norte para solucionar estos problemas. También mantenemos reuniones en forma permanente con la empresa que instaló la red eléctrica para que la termine”, dijo la intendente.
Y agregó Fernández: “Han invertido un valioso tiempo solucionando todas las cosas que están mal hechas. Por eso les pedimos un poco más de paciencia a los vecinos, porque estamos trabajando intensamente para darles soluciones definitivas”.

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