Por Bernardita Ponce Mora
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Por Bernardita Ponce Mora
Hace un año Federico Reigert y su amiga Josefa comenzaron a delinear un viaje con mochila. Querían llevar las tablas de surf y los equipos de kitesurf para practicar en las olas de Latinoamérica. Como transportarlas encima no era cómodo, Juan -hermano de Fede- aportó una gran solución: había que conseguir un vehículo. A este sueño se sumaron Maximiliano Di Pietro y Fabián, un amigo dibujante.
Tras buscar un poco, encontraron a Bambi, como bautizaron a la Volkswagen Kombi de 1986, que compraron y adaptaron para sus necesidades de vida nómade: un futón, una despensa y un buen equipo de audio.
El 28 de diciembre del año pasado partieron los cinco rumbo a las playas de Brasil. Querían aprovechar las fiestas de fin de año para vender fernet a los turistas. Conocieron lugares con playas increíbles y ahorraron bastante para continuar su aventura. En un momento Fabián y Josefa tomaron su propio rumbo y el grupo quedó compuesto por tres.
La alegría del principio duró poco porque sufrieron un robo en el que les quitaron casi todo lo que venían juntando. Sin ánimos de darse por vencidos, encontraron que ellos mismos podían generar una fuente de sustento: hicieron música, trabajaron en bares y restaurantes y dieron clases de surf y kitesurf.
Antes de que se terminara su visa de turistas -de tres meses- en Brasil, emprendieron el regreso a la Argentina por las rutas del norte: pasaron por Misiones, Corrientes, Chaco y Salta. En tierras de Gemes encontraron a su cuarta acompañante: Pampa, una perra que los adoptó durante una parada que hicieron en el sur salteño.
Sus próximos destinos son Jujuy, Bolivia y Perú, si no llegan a tentarse con la Cuesta del Viento en San Juan, un lugar ideal para practicar estos deportes de agua.
Escuela de surf
El proyecto que tienen es hacer una escuela de surf y kitesurf en las playas que los reciban. Quieren darse a conocer para que alguna empresa los patrocine, ya sea con dinero o a través de canjes, con elementos para trabajar. Se puede contactar con ellos a través de Instagram "a80.kitesurfing" o de Facebook "A80 Kitesurfing".
Mientras Fede y Juan son los apasionados de surfear las olas, Maxi es el encargado de congelar todas las vivencias con una cámara. Con todo el material audiovisual que tienen quieren armar un videoclip y, por qué no, una película.
Viaje de ida
El objetivo de los viajeros es dar la vuelta a Sudamérica, aunque también les gustaría llegar a Centroamérica. Lo único que pone un límite a su viaje es el vencimiento de sus licencias de conducir, que expiran en los primeros meses de 2018.
Para cumplir sus sueños, dejaron sus trabajos en la Ciudad de Buenos Aires y vendieron sus motos. Juan incluso dejó la carrera en la universidad. Los tres están convencidos de que hicieron lo correcto.
El anuncio del viaje fue un golpe duro para sus familias aunque les avisaron con seis meses de anticipación. "Dos meses antes empezaron a aflojar, nos dieron lugar para tirar la Kombi y nos ayudaron a prepararla", contó Juan.
Federico sabe bastante de mecánica porque trabajó en un taller y en internet encontró un manual que tiene todos los trucos para cuando la Kombi se empaca. Aseguró que se trata de un muy buen auto para viajar: aunque consume bastante combustible, los repuestos son accesibles y baratos.
El secreto: animarse
Muchos se sorprenden cuando ellos cuentan que dejaron todo por seguir su sueño. "Mucha gente está presionada para hacer ciertas cosas en su vida. Llega a los 80 años y se pregunta si hizo lo que quería", planteó Juan. "Lo mejor es probarse a uno todo el tiempo", retrucó Federico.
Quieren contagiar a los demás para que se animen a perseguir sus sueños. "Que la gente haga lo que realmente quiere hacer, que no se vea atrapada por sus miedos", graficaron.
Muchos los ayudan en su camino y otros les ponen obstáculos. Ellos responden a todos con una sonrisa e invitan a los que quieran a sumarse al viaje.