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Quita de subsidio al GNC dejaría en jaque a 40 mil conductores

Si se equipara el precio con el de la nafta, se pondrían en riesgo unos 500 empleos directos.Según propietarios de estaciones de servicio, la proyección anual de ventas va en caída.
Viernes, 12 de mayo de 2017 00:00

Si se consuma la intención reconocida por el Gobierno nacional de equiparar los precios de la nafta y el gas natural comprimido (GNC), los 39.096 vehículos que circulan con oblea en Salta dejarán de tener esa alternativa económica.

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Si se consuma la intención reconocida por el Gobierno nacional de equiparar los precios de la nafta y el gas natural comprimido (GNC), los 39.096 vehículos que circulan con oblea en Salta dejarán de tener esa alternativa económica.

La suba, por la quita de subsidios, tendría que ser mayor al 50%, ya que actualmente -en promedio- el metro cúbico de GNC cuesta 11 pesos y el litro de nafta $18.

El impacto en Salta no será menor, con un parque automotriz que usa GNC cercano a los 40 mil vehículos, es la segunda provincia del noroeste (NOA) en número de usuarios, solo detrás de Tucumán, con índices de población mayores. En la vecina provincia, de acuerdo a los datos de abril del Enargas, fueron 65.586 los rodados con obleas habilitadas para usar el combustible de bajo precio.

La comparación con el resto de las provincias del NOA resalta la preeminencia de Salta en cuanto al uso del GNC como variante combustible. En Jujuy la cantidad de vehículos habilitados en abril de este año ascendió a 24.047, en Santiago del Estero fueron 19.046. Muy por detrás queda Catamarca que cuenta con un parque de rodados con GNC calculado en 8.264.

Hay otro dato que grafica la realidad que atraviesa el sector: en lo que va del año, todos los meses decayó la cantidad de vehículos convertidos al combustible no convencional. En enero eran 40.192, en febrero totalizaron 39.828, y en marzo el descenso situó el parque automotor en 39.710.

Siguiendo los datos del Enargas, el escenario nacional presenta igual tendencia a la baja: mientras que enero sumaban 1.768.808 los rodados con GNC, en abril fueron 1.718.782, unos quinientos mil coches menos. En las provincias vecinas también hubo una tendencia a la baja, que además se remonta a los últimos meses del año pasado.

Por estos días, la instalación de un equipo de GNC en un rodado tiene un costo de, al menos, 8 mil pesos. No obstante, en el caso de los equipos de quinta generación (los de punta) la inversión no implica menos de 14 mil pesos para los tubos de menor tamaño, aquellos con capacidad de almacenamiento para ocho metros cúbicos. Los valores se elevan cuando se trata de equipos con mayor potencialidad de carga, los más comunes son los de diez metros cúbicos. Para automóviles, los más grandes alcanzan los dieciséis metros cúbicos de capacidad.

Situación crítica

Los empresarios del sector de estaciones de servicio son algunos de los principales actores en la actividad, en la que conviven también otros rubros particulares como las comercializadoras (Gas Meridional y Gas Market) y las distribuidoras (Gasnor). Las perspectivas manifestadas con respecto al escenario actual y proyectado no son las mejores.

Siguiendo con la línea prospectiva de dar por hecha la intención manifestada por el Gobierno nacional de igualar nafta y GNC, se complica la pervivencia de muchos emprendimientos, impactando de ese modo en la masa laboral empleada por las expendedoras. En la provincia, son aproximadamente 50 las estaciones de servicio que ofrecen GNC, la mayoría duales, es decir que también cuentan con combustibles líquidos.

Pese a la doble prestación (de GNC y combustibles líquidos), solo para ofrecer la alternativa económica se estima que cada expendedora debe emplear unos diez trabajadores. Entonces, unas 500 familias hacen descansar sus sustentos de manera directa en la actividad de las estaciones de servicio. Además, hay que sumar a todos aquellos que cumplen funciones en empresas que convierten vehículos al GNC, y quienes estén empleados en las comercializadoras y distribuidoras.

Conforme a los comportamientos comerciales de los primeros tres meses del año, la estimación para lo que resta de 2017 -aún sin que hubiese aumentos del GNC ni de combustibles líquidos- es preocupante: una caída de 8,9% en las ventas con relación al año pasado, un derrumbe significativo. Los datos fueron aportados a este medio por fuentes privadas del sector de dispensadores que prefirieron mantener reserva.

 

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