Cristian Rafael Argañaraz, papá de los tres hermanitos fallecidos el miércoles a la noche en un principio de incendio, fue liberado por disposición de la Justicia en Orán.
No obstante, la causa por supuesto abandono de persona sigue en pie, por lo que Argañaraz deberá presentarse mañana para declarar en los tribunales oranenses.
El miércoles, poco antes de la medianoche, Argañaraz y su esposa salieron de la casa y dejaron a sus tres niños de 9, 5 y 3 años durmiendo. En la habitación que alquilaban había quedado encendida una vela sobre el televisor. El padre había salido acompañando a su esposa que iba a un hotel donde trabaja.
Con el paso de los minutos, la vela se derritió y quemó el televisor. El pesado y tóxico humo asfixió a los niños. Cuando Argañaraz regresó, encontró a sus hijos desvanecidos. Dos vecinos lo ayudaron a sacar a los niños de la casa y otro los llevó en su auto, pero cuando llegaron al hospital, los médicos confirmaron que los pequeños habían fallecido.
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Cristian Rafael Argañaraz, papá de los tres hermanitos fallecidos el miércoles a la noche en un principio de incendio, fue liberado por disposición de la Justicia en Orán.
No obstante, la causa por supuesto abandono de persona sigue en pie, por lo que Argañaraz deberá presentarse mañana para declarar en los tribunales oranenses.
El miércoles, poco antes de la medianoche, Argañaraz y su esposa salieron de la casa y dejaron a sus tres niños de 9, 5 y 3 años durmiendo. En la habitación que alquilaban había quedado encendida una vela sobre el televisor. El padre había salido acompañando a su esposa que iba a un hotel donde trabaja.
Con el paso de los minutos, la vela se derritió y quemó el televisor. El pesado y tóxico humo asfixió a los niños. Cuando Argañaraz regresó, encontró a sus hijos desvanecidos. Dos vecinos lo ayudaron a sacar a los niños de la casa y otro los llevó en su auto, pero cuando llegaron al hospital, los médicos confirmaron que los pequeños habían fallecido.