Iban solo ocho minutos de la final de la Copa del Rey entre Barcelona y Alavés, cuando Javier Mascherano protagonizó una acción que preocupó a todo el estadio Vicente Calderón de Madrid.
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Iban solo ocho minutos de la final de la Copa del Rey entre Barcelona y Alavés, cuando Javier Mascherano protagonizó una acción que preocupó a todo el estadio Vicente Calderón de Madrid.
El argentino, que hoy se presentó sobre el lateral derecho de la defensa del Barcelona, fue a pelear una pelota en el aire con Marcos Llorente y chocó su cabeza con la del futbolista del Alavés. El del Barcelona fue el que se llevó la peor parte: quedó tendido inmóvil en el suelo y con sangre en la frente.
Los médicos del conjunto catalán ingresaron rápidamente al campo de juego y lo atendieron, pero Mascherano no pudo continuar el partido. La conmoción que sufrió fue de consideración y debió dejar su lugar en la cancha para el ingreso del portugués André Gomes.
Se espera un parte médico oficial por parte del Barcelona para determinar la gravedad del golpe sufrido por Mascherano.