El derecho al autocultivo es el reclamo eje de los autoconvocados que ayer desde las 17.30 se concentraron en la plaza Gemes, sobre Mitre al 500, en el centro de la ciudad de Salta. Los manifestantes, que pasadas las 19 caminaron hacia la plaza 9 de Julio para luego desconcentrarse, se sumaron a las marchas mundiales en favor del consumo de cannabis que se hicieron ayer.
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El derecho al autocultivo es el reclamo eje de los autoconvocados que ayer desde las 17.30 se concentraron en la plaza Gemes, sobre Mitre al 500, en el centro de la ciudad de Salta. Los manifestantes, que pasadas las 19 caminaron hacia la plaza 9 de Julio para luego desconcentrarse, se sumaron a las marchas mundiales en favor del consumo de cannabis que se hicieron ayer.
A nivel nacional, se reclama la urgente reglamentación y la incorporación del cultivo solidario y colectivo, que está legislado desde el 29 de marzo último.
El artículo 13 de la ley establece que "la autoridad de aplicación debe reglamentar la norma dentro de un plazo no mayor a 60 días desde su publicación Boletín Oficial", que fue el 19 de abril.
Durante la concentración en Salta, El Tribuno dialogó con algunos de los manifestantes. Uno de ellos fue Fernando Ruarte, abogado. "La gente pelea por el autocultivo ya sea por salud o en forma recreativa. La planta está demonizada y hoy se está revirtiendo todo esto", destacó Ruarte.
Durante la manifestación, el letrado cuestionó la reciente normativa aprobada por el Congreso de la Nación que permitió el uso medicinal del cannabis pero no el autocultivo. "Hay un vacío legal importante, porque te obligan a importar algo que es carísimo. Hasta que el Estado no se haga cargo, es pura habladuría. El autocultivo es lo único que puede salvar a las familias", detalló el profesional.
En la marcha de ayer también participaron representantes de las familias de pacientes que necesitan el aceite de cannabis, pero en un menor número que el año pasado. Al respecto, Ruarte destacó que, por los autocultivadores, las familias tienen el aceite. "Así que esperamos su apoyo ahora", afirmó.
Adrián tiene 40 años y también se sumó a la manifestación. "Tengo amigos que están con problemas y usan el cannabis en forma medicinal, vamos a ver qué pasa con esta ley. Es la primera vez que vengo a la marcha", afirmó.
Mario es militante del Partido Obrero y durante la manifestación entregó algunos folletos informativos. "Me sumo a esta movilización mundial en contra de la prohibición de la marihuana. En Brasil y Buenos Aires la movida fue muy grande. Todos estamos en contra del narcotráfico. Hoy los únicos que están presos por este tema son los perejiles mientras que los que están el poder siguen libres", analizó.
Constanza es una joven cordobesa que apoya la marcha por el uso del aceite de cannabis en forma medicinal y por el autocultivo. Ella padece angiodematosis y desde hace meses está en tratamiento en su ciudad natal. "La idea con el aceite es que la enfermedad empiece a disminuir y poder operarme. Tengo 29 años y hace tres semanas que visito Salta. En Córdoba esto está legalizado, y la idea es apoyar el pedido también acá", resumió la joven.
Si bien la jornada transcurrió en paz, cinco efectivos policiales se hicieron presentes en la concentración, previa a la marcha, por pedido de los feriantes que trabajan sobre las veredas de la plaza Gemes todos los sábados.
Convocatoria mundial
La marcha mundial de la marihuana se hace cada año desde 1999 el primer sábado de mayo para "terminar con la criminalización y persecución a los usuarios y cultivadores, por el reconocimiento de los usos medicinales e industriales del cannabis y a favor de la regulación del acceso".
Con las mismas consignas, hubo convocatorias en diferentes ciudades del país, tales como La Plata, Mar del Plata, Bahía Blanca, Olavarría, Rosario, Paraná, Resistencia, Córdoba, San Luis, Catamarca, San Juan, Mendoza, Bariloche, Neuquén, Bariloche y Viedma.
En Uruguay, más de 300 personas se manifestaron en el centro de Montevideo para reclamar la aplicación efectiva de una ley de regulación vigente.