En un macrooperativo antinarcóticos Gendarmería Nacional dio con una cueva de droga en montes del Chaco salteño, a menos de un kilómetro del límite tripartito entre las naciones de Paraguay, Bolivia y Argentina.
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En un macrooperativo antinarcóticos Gendarmería Nacional dio con una cueva de droga en montes del Chaco salteño, a menos de un kilómetro del límite tripartito entre las naciones de Paraguay, Bolivia y Argentina.
La cueva de marihuana estaba camuflada en el follaje del monte salteño y custodiada por dos motociclistas, quienes esperaban órdenes para atravesar los caminos vecinales hacia el sur del Chaco salteño y así llegar hasta Fortín Belgrano, cruzar el Bermejo y llegar a las rutas nacionales en los límites con la provincia de Santiago del Estero.
Tal cual lo informara El Tribuno en un extenso informe sobre Rivadavia Banda Sur, los caminos vecinales y las rutas provinciales sin control son la tierra del narcotráfico que tiene en la extensa frontera seca una puerta abierta al inmenso negocio del narcotráfico.
El informe
La fuerza nacional hizo público un extenso informe sobre el exitoso secuestro de marihuana en una zona montuosa del Chaco salteño.
Fueron las tareas de patrullaje por zonas sin señales telefónicas y de difícil acceso las que permitieron secuestrar los 22 bultos ingresados por la frontera del río Pilcomayo, a través de chalanas.
Gendarmería Nacional, en el marco de la lucha contra el narcotráfico llevado adelante por el Ministerio de Seguridad de la Nación, secuestró 503 kilos de marihuana ocultos en una zona de bosque próxima al río Pilcomayo, límite fronterizo con la República del Paraguay.
El procedimiento se realizó el domingo cuando efectivos del Escuadrón 20 "Orán", en un operativo conjunto con el Escuadrón 54 "Aguaray", donde participaron personal de las fuerzas especiales "Alacrán" junto a unidades de monte y de reconocimientos, efectuaron tareas de patrullaje en la zona denominada Chaco salteño, cerca del paraje Puerto La Paz.
Treinta uniformados desplegados en 7 vehículos realizaron un operativo cerrojo en la zona de difícil acceso. Al aproximarse notaron que, ocultas entre las malezas, dos personas que oficiaban de cuidadores del cargamento comenzaron a huir en poderosas motocicletas, pasando la frontera, dejando abandonados 22 bolsas y 2 motos.
Inmediatamente los gendarmes aseguraron la zona y procedieron a inspeccionar los bultos hallados, detectando en su interior 598 paquetes que arrojaron un total de 503 kilos de marihuana.
Intervino la Fiscalía Federal de Orán y el Juzgado Federal de Orán, ordenando el secuestro del estupefaciente.
De Paraguay a Rivadavia, en moto
Hace apenas un mes El Tribuno publicó una extensa nota sobre las condiciones en las que se controla la actividad delictiva más lucrativa de toda la frontera y quizá un puntal dentro de la mano de obra desocupada del Chaco tripartito.
En el informe publicado el 26 de marzo policías de la provincia desnudaron la soledad y el mal estado de los caminos del Chaco salteño pero además denunciaron que apenas son 15 efectivos para una jurisdicción igual o mayor que la provincia de Tucumán.
En aquel informe quedó reflejado incluso en tomas fotográficas hechas por nuestro medio los cargamentos de mercancías de contrabando, incluida marihuana, que las motocicletas enduro transportaban a gran velocidad desde Fortín Belgrano hacia el sur de la provincia, sobre todo a la localidad de Apolinario Saravia y Las Lajitas.
Una fuente de Rivadavia Banda Sur aseguró: “Nada, aquí no hay nada, las motos y las camionetas cargadas pasan día y noche, y cuando llueve mucho más. Ellos son los dueños de los caminos”, así graficó la situación un habitante de la línea Barilari, el límite entre las provincias de Salta y Chaco, en el departamento Rivadavia, hace apenas poco más de un mes.
Fuentes informadas de ese departamento de la provincia de Salta aseguraron a El Tribuno que desde hace un año el tráfico de drogas y mercancías sostiene la economía de muchos habitantes de la zona, y de a poco se está convirtiendo en una actividad normal entre los jóvenes. La falta de seguridad y fuentes laborales quedaron otra vez al desnudo.
Esta vez la droga no llegó a los caminos de Salta, un paso importante dio Gendarmería en esas soledades.