Pasó el cuarto juego de la final de la NBA y dejó el vital triunfo de Cleveland Cavaliers por 137 a 116 sobre Golden State Warriors que le permite ilusionarse con una remontada histórica. Kirie Irving fue la figura del ganador con 40 puntos.
Cleveland no tenía otra opción que vencer a los Warriors en el cuarto juego y salió decidido a eso. Sin LeBron James como factor fundamental, los Cavaliers apoyaron su juego en el tiro perimetral donde brillaron Irving y Kevin Love.
Con esos tiros de larga distancia comenzaron a construir una diferencia importante en el marcador, pero la necesidad de no relajarse estaba presente debido a que del otro lado Kevin Durant y Steph Curry aprovechaban para sumar en cada oportunidad que se presentaba.
La primera mitad se fue con ventaja de los locales por 86 a 68. En el inicio del tercer cuarto Golden State intentó acortar la brecha, sin embargo Cleveland mantuvo la efectividad.
El partido fue áspero en varios pasajes, las faltas técnicas abundaron (siete en total) e incluso la policía local debió ingresar al campo de juego para retirar a un fanático de los Cavaliers.
Con este triunfo, la serie continuará el próximo lunes en cancha de los Warriors desde las 22. Allí intentarán cerrar el duelo y adueñarse de su segundo campeonato en tres temporadas.
inicia sesión o regístrate.
Pasó el cuarto juego de la final de la NBA y dejó el vital triunfo de Cleveland Cavaliers por 137 a 116 sobre Golden State Warriors que le permite ilusionarse con una remontada histórica. Kirie Irving fue la figura del ganador con 40 puntos.
Cleveland no tenía otra opción que vencer a los Warriors en el cuarto juego y salió decidido a eso. Sin LeBron James como factor fundamental, los Cavaliers apoyaron su juego en el tiro perimetral donde brillaron Irving y Kevin Love.
Con esos tiros de larga distancia comenzaron a construir una diferencia importante en el marcador, pero la necesidad de no relajarse estaba presente debido a que del otro lado Kevin Durant y Steph Curry aprovechaban para sumar en cada oportunidad que se presentaba.
La primera mitad se fue con ventaja de los locales por 86 a 68. En el inicio del tercer cuarto Golden State intentó acortar la brecha, sin embargo Cleveland mantuvo la efectividad.
El partido fue áspero en varios pasajes, las faltas técnicas abundaron (siete en total) e incluso la policía local debió ingresar al campo de juego para retirar a un fanático de los Cavaliers.
Con este triunfo, la serie continuará el próximo lunes en cancha de los Warriors desde las 22. Allí intentarán cerrar el duelo y adueñarse de su segundo campeonato en tres temporadas.