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Quieren un centro de rehabilitación para adultos con discapacidad visual

La Fundación Salteña de Ciegos presentó el proyecto en la Cámara de Diputados. En la ciudad hay 1465 personas ciegas.
Domingo, 11 de junio de 2017 00:00

Cuando una persona adulta queda ciega, no tiene adónde ir para volver a ser autónoma y diseñar un nuevo proyecto de vida. La Fundación Salteña de Ciegos (Fusac) es la única institución que ofrece este servicio en la provincia, donde hay 1465 personas adultas ciegas, según un informe de la Subsecretaría de Discapacidad.

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Cuando una persona adulta queda ciega, no tiene adónde ir para volver a ser autónoma y diseñar un nuevo proyecto de vida. La Fundación Salteña de Ciegos (Fusac) es la única institución que ofrece este servicio en la provincia, donde hay 1465 personas adultas ciegas, según un informe de la Subsecretaría de Discapacidad.

Para obligar al Estado a hacerse cargo de esta tarea, la entidad presentó días atrás un proyecto de ley al presidente de la Cámara de Diputados, Santiago "Indio" Godoy. Desde la Secretaría Legislativa confirmaron que se está trabajando con un anteproyecto para la creación de un centro de rehabilitación y capacitación. La semana próxima se espera una reunión con Fusac para definir ciertas cuestiones. Luego se le daría ingreso formal.

En el marco de la campaña "Concretando la verdadera inclusión", que se realiza desde el 5 de abril al 5 de julio, Fusac realizó el 30 de mayo último una jornada de promoción del trato adecuado a las personas con discapacidad visual, de 11 a 14, en la Plazoleta IV Siglos de Salta capital. En esa oportunidad se juntó 61 firmas de adhesión al pedido de creación de un centro oficial de rehabilitación para personas con discapacidad visual adquirida.

Durante la jornada, los interesados vivenciaron la experiencia de andar con los ojos tapados y con un bastón como recurso orientador. Los beneficiarios de Fusac distribuyeron folletería informativa sobre los servicios de la institución y recomendaciones sobre el modo adecuado de convivir con personas portadoras de limitaciones visuales. "Si se convive con una persona ciega, hay que ser ordenado. Si se cambia objetos de lugar, hay que avisarle. Cuando uno se retira de un lugar, debe dejar la silla debajo de la mesa. Cuando se guía a alguien para que se siente, hay que poner la mano en el respaldar", explicaron los voluntarios y dejaron claro que lo importante es no poner obstáculos.

Tomar conciencia

La presidenta de Fusac, María Elena Pastrana, pidió a las autoridades que reconocieran la omisión de los artículos 1, 3, 4 y 5 de la Convención sobre los Derechos de las Personas con Discapacidad y la ley nacional 26.378, que la aprueba en la Argentina. "El Estado está obligado a brindar las herramientas de equiparación de oportunidades", señaló la mujer que hace 18 años lucha de manera personal y hace 13 años con la fundación.

"Ha evolucionado mucho socialmente el concepto de la persona con discapacidad. En el imaginario social hay mayor aceptación y apertura pero aún seguimos con muchos límites", expresó. Contó que en 2014 una asistente social realizó 225 visitas domiciliarias y que de todas ellas una sola fue "rescatada", es decir que la persona ciega recuperó su derecho al proyecto de vida.

"La mayoría tiene miedo de quedarse ciego grande, perder sus afectos y enfrentarse a la familia para rehabilitarse o para que lo apoyen en rehabilitación. La mayoría de las familias no reconoce que la persona necesita ayuda -"está cuidado, asistido, limpito, comido"- y se olvida del derecho al proyecto de vida. Así tengas 78 años, tenés derecho a proyectarte nuevamente. Lo que no podés hacer nunca es dejar de soñar", aseguró Pastrana.

Fusac es el único centro de rehabilitación para ciegos adultos en Salta. "Contamos con muy pocos ingresos: 8.294 pesos por mes, de los cuales recién cobramos la segunda cuota. En el Ministerio de Justicia y Derechos Humanos hemos peticionado un incremento del subsidio. El expediente está abierto y todavía no tenemos una respuesta directa", dijo.

En mayo María Elena pudo reunirse por primera vez con el gobernador, Juan Manuel Urtubey, que dijo que no sabía de la existencia de Fusac: "Hace 18 años anhelo que un gobernador me atienda. Le dije que sus funcionarios no me dejan llegar hasta él y le comunicamos que hemos presentado el proyecto para que se cree por ley un centro de rehabilitación oficial. Le dijimos que en Salta se discrimina a personas con discapacidad".

 

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