Más de 500 asistentes tuvo el martes pasado la jornada de software libre, organizada por el Proyecto Ututo, la cátedra de Desarrollo de Software Libre y Adiunsa. En este marco, el doctor Richard Stallman ofreció la conferencia “El software libre y tu libertad”.
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Más de 500 asistentes tuvo el martes pasado la jornada de software libre, organizada por el Proyecto Ututo, la cátedra de Desarrollo de Software Libre y Adiunsa. En este marco, el doctor Richard Stallman ofreció la conferencia “El software libre y tu libertad”.
Stallman inició el movimiento software libre en 1983 y el desarrollo del sistema operativo GNU en 1984. GNU es software libre, es decir, que quien lo desee puede copiarlo y distribuirlo, así como también efectuarle modificaciones de mayor o menor proporción.
Actualmente el sistema operativo GNU con Linux agregado es utilizado en decenas de millones de computadoras. Stallman ha recibido los premios Software, Sistemas y “Grace Hopper” de la Asociación para la Maquinaria Computacional (ACM Grace Hopper Award), el Pionero de la Fundación Frontera Electrónica y el Takeda por Mejora Social/Económica. También una beca de la Fundación MacArthur y varios doctorados honoraris causa (en 2004 recibió esa distinción de la UNSa). Además, ha ingresado en el Salón de la Fama de Internet.
Antes de repasar ante la audiencia los planteos del movimiento del software libre respecto de los derechos de los que deberían gozar tanto usuarios como desarrolladores, Stallman dio amablemente instrucciones a los presentes para ser fotografiado.
“Facebook no es tu amigo, tiene tentáculos en Instagram y WhatsApp, no tiene usuarios sino ‘usados’, usa a la gente para extraer datos personales, de amigos, familiares y colegas. Facebook sabe reconocer a las gentes por sus caras o el revés de la cabeza. Si ponés en Facebook una foto en la que aparece alguien ayudás a la empresa para seguirlo y husmearlo. Sería maltrato a tus amigos y maltrato hacia mí, por favor, no me lo hagas a mí”, solicitó. “Si quieres sacarme una foto con tu móvil, antes de hacerlo tienes que desactivar la funcionalidad de la geolocalización en las fotos. Si distribuyes la foto de alguien con geolocalización, ayudas al seguimiento de esa persona. Ahora sabes cómo sacar fotos de mí, entonces puedes”, agregó.
Los principios
Stallman instruyó que para que un programa sea software libre, los usuarios deben tener las cuatro libertades esenciales en sus tareas informáticas: ejecutar el programa, (0) estudiar y modificar el código fuente del programa (1) redistribuir copias exactas (2) y distribuir versiones modificadas (3).
Estas posibilidades son las que vuelven al software tan útil y se basan en que también los usuarios de un programa deben ser libres de aprovecharlas, no solo quien lo desarrolló. “Un programa es software libre si otorga a los usuarios todas estas libertades de manera adecuada. De lo contrario no es libre. Existen diversos esquemas de distribución que no son libres, y si bien podemos distinguirlos en base a cuánto les falta para llegar a ser libres, nosotros los consideramos contrarios a la ética a todos por igual”, detalló Stallman. Luego se refirió a algunos equívocos que circulan por los medios de comunicación, que en ocasiones lo calificaron como “el padre del código abierto”. “La decisión fundamental del globomovimiento de código abierto fue no ser un movimiento, no luchar, sino sugerir. Entonces tenemos que hacer este esfuerzo y lo hago yo siempre que aparezco. Por ejemplo, he visto artículos en los que me llamaron ’el padre del código abierto’ entonces si eso soy este fue concebido por inseminación artificial con o semen robado. Este no solo es un asunto de comprensión de valores, sino de libertad”, declaró haciendo gala de su excelente humor.
Luego advirtió acerca de un peligro para los usuarios: la distribución y uso obligatorio de programas como las apps para Iphone. “Cuando fabrican productos físicos cuyo modo de empleo es secreto, no podemos usarlos porque funcionan con programas privativos. Resulta que es gratuito, pero el fabricante dice: ‘Usa este programa’. No podemos, no se debe”, advirtió. Para que la distribución y el uso de software libre se extienda se hace necesario recurrir a las bases: la universidad, que forma a los futuros programadores; la escuela, que imparte conocimientos sobre informática en su generalidad con programas privativos; y el ámbito laboral, dado que empresas e instituciones privilegian el uso de estos últimos atendiendo los conocimientos de sus empleados.
“Deberían enseñarse retroingeniería, no solo porque es necesario avanzar en algunos frentes, sino también porque es una carrera profesional lucrativa. Y los futuros programadores solo programar software libre”, señaló.
En relación con el sistema educativo, apuntó que en todos los niveles debe enseñarse solo software libre. “La escuela tiene la misión social de crear ciudadanos fuertes, independientes, soberanos y libres. Cada programa incorpora conocimientos, y si es privativo esconde esos conocimientos de los estudiantes. Eso no debería ser tolerado en las escuelas. Es el enemigo del espíritu de la educación. Un programa libre, que ofrece sus conocimientos a los estudiantes, apoya el espíritu de la educación”, definió.
La iglesia de Emacs, el momento más distendido de la conferencia
Emacs es un editor de texto con una gran cantidad de funciones, muy popular entre programadores y usuarios técnicos. Gnu Emacs toma parte del proyecto GNU. El Emacs original significa, Editor MACroS para el TECO. Fue escrito en 1975 por Richard Stallman junto con Guy Steele. Fue inspirado por las ideas de Tecmac y TMACS, un par de editores TECO-macro escritos por Guy Steele, Dave Moon, Richard Greenblatt, Charles Frankston, y otros. Se han lanzado muchas versiones de Emacs hasta el momento, pero actualmente hay dos que son usadas comúnmente: GNU Emacs, iniciado por Richard Stallman en 1984, y XEmacs, una fork de GNU Emacs, que fue iniciado en 1991. Ambos usan una extensión de lenguaje muy poderosa, Emacs Lisp, que permite manejar tareas distintas, desde escribir y compilar programas hasta navegar en internet. GNU Emacs es mantenido por el Proyecto GNU Emacs, entre cuyos miembros está Richard Stallman. Si bien la conferencia en todo momento fue distendida, la sorpresa se apoderó de los presentes cuando Stallman se calzó un hábito que emulaba el atavío de un pastor protestante y una aureola.
“Saludos desde la iglesia de Emacs, bendigo sus computadoras. En la iglesia de Emacs tenemos una disputa teológica acerca de qué iglesia es la más santa. Hay también un cisma grande entre varias personas de Emacs, tenemos a santos, pero no dioses. Para hacerte miembro debes creer que no hay otro sistema que GNU y Linux es uno de sus componentes. Nuestro texto sagrado es el código fuente del sistema. También tenemos una virgen y se refiere a aquellos a quienes no hayan usado nunca Emacs, queremos que vengan a perder su virginidad informática con nosotros”, bromeó. Añadió que su iglesia “tiene ventajas por sobre otras iglesias que no voy a mencionar. Por ejemplo, para ser santo no se exige celibato, pero sí una vida pura y ética. Tienes que exorcizar todos los sistemas privativos y diabólicos que hayan poseído computadoras bajo su control. Luego usar e instalar solo software libre. Si haces este voto también serás santo y digno de llevar una aureola, si encuentras una laptop que no las fabrican más.
A veces me preguntan si mi aureola es de verdad un disco duro de computadora. No lo es, es mi aureola, pero lo fue en una existencia anterior”, concluyó ante la explosión de algarabía de los presentes. Después dio paso a las preguntas del público, entre las que se encontraba una llamativa. “Me preguntan si estoy casado y no, porque no quiero tener hijos, tengo cosas más importantes que hacer. Hay demasiados hijos en el mundo. La población humana sigue aumentando y es un gran problema para la sobrevivencia de la civilización, a cada empeora el peligro del calentamiento global, que podría matar a miles de millones y será el genocidio más grande habido y por haber creo yo”, manifestó. Por último señaló que el software libre es parte del derecho a la libertad y los DDHH dependen unos de los otros, si perdemos uno es más difícil defender los otros”.