La primera sesión de clasificación de las 24 Horas de Le Mans 2017 devolvió a Toyota a lo más alto de la tabla de tiempos después de que Porsche mostrara sus cartas en la sesión libre inicial.
El 3.18,793 conseguido por el Toyota TS050 Hybrid 7 de Conway-Kobayashi-Sarrazin quedó con el tiempo de pole position provisional. Ya por encima de 3.19 terminó el segundo Toyota, el 8 de Davidson, Buemi y Nakajima, que precedió al primer Porsche (el 2 de Bernhard, Bamber y Hartley) y al Toyota de los “rookies”, el argentino José María “Pechito” López y Yuri Kunimoto junto al francés Nico Lapierre, los tres únicos coches que bajaron de 3:20.
El Porsche número 1 terminó muy lejos de la cabeza, en quinta posición. Los minutos iniciales de la sesión fueron en los que se marcaron los mejores cronos de la noche. Después de ese tramo, varios incidentes en pista y las pruebas con reglajes de carrera no permitieron rebajar los cronos. Fue en esos minutos cuando Porsche bajó a 3.19 con cierta facilidad mientras Toyota terminaba la primera hora con un coche incluso por debajo de 3.18, acercándose ya al crono que marcó en el test del día 4 de julio con una simulación de clasificación.
La sesión de ayer, además de para marcar tiempos, fue utilizada para los equipos para dar a sus pilotos la primera oportunidad de rodar en la noche y probar los neumáticos en condiciones tan exigentes como las de ayer, con más calor incluso de lo esperado. Entre los GTE Pro, Aston Martin y Ferrari dominaron la sesión. Los coches ingleses parece que se adaptaron bien al calor con sus neumáticos Dunlop (el único GTE Pro calzado con esta marca), mientras que los italianos, con el 71 en el que figura el español Miguel Molina de nuevo como el más rápido de entre los del cavallino. El Corvette 63 de Antonio García se quedó a tres segundos de la cabeza. El más rápido en LMP2 (los coches más rápidos en velocidad punta en esta edición) fue el Oreca-Gibson de TDS Racing (Vaxiviere-Perrodo-Collard).
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La primera sesión de clasificación de las 24 Horas de Le Mans 2017 devolvió a Toyota a lo más alto de la tabla de tiempos después de que Porsche mostrara sus cartas en la sesión libre inicial.
El 3.18,793 conseguido por el Toyota TS050 Hybrid 7 de Conway-Kobayashi-Sarrazin quedó con el tiempo de pole position provisional. Ya por encima de 3.19 terminó el segundo Toyota, el 8 de Davidson, Buemi y Nakajima, que precedió al primer Porsche (el 2 de Bernhard, Bamber y Hartley) y al Toyota de los “rookies”, el argentino José María “Pechito” López y Yuri Kunimoto junto al francés Nico Lapierre, los tres únicos coches que bajaron de 3:20.
El Porsche número 1 terminó muy lejos de la cabeza, en quinta posición. Los minutos iniciales de la sesión fueron en los que se marcaron los mejores cronos de la noche. Después de ese tramo, varios incidentes en pista y las pruebas con reglajes de carrera no permitieron rebajar los cronos. Fue en esos minutos cuando Porsche bajó a 3.19 con cierta facilidad mientras Toyota terminaba la primera hora con un coche incluso por debajo de 3.18, acercándose ya al crono que marcó en el test del día 4 de julio con una simulación de clasificación.
La sesión de ayer, además de para marcar tiempos, fue utilizada para los equipos para dar a sus pilotos la primera oportunidad de rodar en la noche y probar los neumáticos en condiciones tan exigentes como las de ayer, con más calor incluso de lo esperado. Entre los GTE Pro, Aston Martin y Ferrari dominaron la sesión. Los coches ingleses parece que se adaptaron bien al calor con sus neumáticos Dunlop (el único GTE Pro calzado con esta marca), mientras que los italianos, con el 71 en el que figura el español Miguel Molina de nuevo como el más rápido de entre los del cavallino. El Corvette 63 de Antonio García se quedó a tres segundos de la cabeza. El más rápido en LMP2 (los coches más rápidos en velocidad punta en esta edición) fue el Oreca-Gibson de TDS Racing (Vaxiviere-Perrodo-Collard).