Meses atrás, la fotografía de una empanada servida dentro de un frasco armó un amplio revuelo en redes sociales, con “tradicionalistas” del plato autóctono de nuestro país y que tiene como mejores exponentes en Salta y Tucumán, quienes saltaron indignados la presentación.
Y ahora, una nueva aparición volvió a hacer florecer la polémica: las empanadas con masa de colores, cuyas fotografías desfilaron acompañadas por los más variados comentarios.
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Meses atrás, la fotografía de una empanada servida dentro de un frasco armó un amplio revuelo en redes sociales, con “tradicionalistas” del plato autóctono de nuestro país y que tiene como mejores exponentes en Salta y Tucumán, quienes saltaron indignados la presentación.
Y ahora, una nueva aparición volvió a hacer florecer la polémica: las empanadas con masa de colores, cuyas fotografías desfilaron acompañadas por los más variados comentarios.
El autor de la idea es Dante Vita, dueño de la fábrica de pastas Al Dante de Chivilcoy. El chef ya había probado teñir de colores la masa de ravioles y panzottis, y decidió trasladar el mecanismo a las empanadas.
Arco iris de sabores
“Fue una experimentación, no necesariamente pensaba ponerlas a la venta”, declaró Vita a la página BigBang. Las variedades son de color bordó, verde, negro y con diseño “animal print” -coloreadas con ingredientes naturales- y cada una tiene un relleno específico.
Así, las empanadas bordó están teñidas con remolacha y vino malbec, con relleno de cordero braseado y zapallo. Las verdes, mientras tanto, son de pollo, queso parmesano y ají picante en masa de espinaca, y las negras -coloreadas con tinta de calamar- están rellenas de langostinos y salmón. Finalmente, la masa al estilo “piel de leopardo” está también punteada con tinta y es de carne de jabalí.
“Como todo lo nuevo cuesta la aceptación”, contó Vita. “Pero he tenido muchísima venta. Subí las fotos a un grupo de Facebook sobre gastronomía y en un ratito ya tenía como 100 me gusta”, relató. Dante además recibió comentarios positivos de colegas prestigiosos y se siente animado a ir más allá. “Esto es un empujón, la aceptación te da ganas de hacer más. Ya hice arepas y pizzas de colores, y un postre con masa marrón de chocolate y relleno de mousse de frambuesa”, revela.