El tránsito en Salta es caótico por naturaleza, sus calles son angostas para una ciudad que mezcla lo colonial con el modernismo. Tiene pocas avenidas y su circulación se hace mucho más densa. Ahora si a esto le agregamos que los camiones se movilizan por donde desean, esto se vuelve el doble de riesgoso, no sólo para el que conduce por sus calles, sino también que el asfalto sufre un desgaste más que importante.
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El tránsito en Salta es caótico por naturaleza, sus calles son angostas para una ciudad que mezcla lo colonial con el modernismo. Tiene pocas avenidas y su circulación se hace mucho más densa. Ahora si a esto le agregamos que los camiones se movilizan por donde desean, esto se vuelve el doble de riesgoso, no sólo para el que conduce por sus calles, sino también que el asfalto sufre un desgaste más que importante.
En la avenida Belgrano, un lector de El Tribuno a través de WhatsApp, hizo llegar sus quejas por un camión de “gigante” que transitó durante varias cuadras por la avenida Belgrano. “Hace poco mejoraron el pavimento de esta avenida, pero si siguen transitando nuestra ciudad este tipo de vehículos pesados, el nuevo asfalto durará poco o nada. Creo que se debería prohibir el ingreso de este tipo de camiones en la ciudad”, le escribió el lector a este matutino. Con lógica señaló: “Un transporte tan grande hunde la calle, quiebra el asfalto y deteriora”.