Tras la polémica que se desató por un proyecto municipal que apuntaba a sacar a los colectivos de Saeta del centro, ayer hubo un principio de acuerdo entre la Provincia y la Municipalidad para mantener en esa zona la circulación del transporte de pasajeros.
El secretario de Servicios Públicos de la Provincia, Carmelo Russo, confirmó a El Tribuno que ayer hubo una reunión en la que se decidió conformar una mesa de trabajo entre la Autoridad Metropolitana de Transporte (AMT), Saeta y la Municipalidad para definir el ordenamiento de los ómnibus urbanos y metropolitanos.
La semana pasada, la Municipalidad comenzó la primera etapa de las obras de refuncionalización del área céntrica. Los trabajos del denominado Corredor de la Fe incluyen, entre otras modificaciones, el ensanche de veredas y la reducción de calzadas para la circulación vehicular.
El primer frente de obra se abrió en la zona de Juramento y Zorrilla.
Con el plan, Tránsito había propuesto sacar a los colectivos de Saeta y modificar el actual sistema. Querían instalar un esquema de transversales y troncales con transbordos para evitar que todas las líneas barriales llegaran al área céntrica. Se trataba de un sistema mixto, con líneas periféricas, para reducir el caos vehicular en el corazón de la ciudad.
La Provincia se opuso a ese proyecto ya que consideró que la prioridad la debe tener el transporte público.
Como argumento, funcionarios remarcaron que el 70 por ciento de los salteños utiliza el colectivo para movilizarse.
Russo informó ayer que mantuvo una reunión con el secretario de Gobierno de la Municipalidad, José María Salado. La próxima semana, equipos técnicos analizarán cómo se implementará el ordenamiento y la ubicación de las paradas.
“Se logró un consenso y un entendimiento. Tenemos que trabajar para todos los usuarios que necesitan trasladarse y tratar de minimizar el tiempo del servicio, pero siempre con la intención de que el colectivo siga en el centro”, acotó ayer Russo tras salir del encuentro.
El funcionario provincial agregó: “Coincidimos en que el usuario necesita estar conectado y que utiliza el sistema de transporte en sentido norte a sur y de este a oeste. Todo se hará sin afectar el objetivo del servicio público y tratando de generar vías rápidas, que es el más importante”.
Días atrás, medios de Buenos Aires informaron que el Gobierno nacional aumentaría los subsidios al transporte para evitar subas del boleto hasta fin de año. En Salta, el 19 de junio se realizó una audiencia pública tras un pedido de Saeta de incrementar el valor del pasaje en las horas picos y en las valles.
El titular de la AMT, Federico Hanne, aseguró días atrás a El Tribuno que no hubo comunicación formal del Gobierno nacional sobre un posible aumento de las partidas que se transfieren para el transporte público de pasajeros.
Por su parte, el secretario de Servicios Públicos, Carmelo Russo, indicó que en el último año hubo una actualización del 37 por ciento, pero los salarios del sector subieron un 39 por ciento y el gasoil subsidiado, un 78 por ciento.
“Los subsidios no mantienen la ecuación financiera. El servicio se mantiene con un fuerte esfuerzo del Gobierno de la Provincia. Tenemos una flota de transporte de 618 unidades, con la incorporación de los diez colectivos fuelles, pero solo están cubiertas con subvenciones unas 530. Es decir que tenemos 84 unidades sin ninguna transferencia nacional”, agregó el funcionario.
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Tras la polémica que se desató por un proyecto municipal que apuntaba a sacar a los colectivos de Saeta del centro, ayer hubo un principio de acuerdo entre la Provincia y la Municipalidad para mantener en esa zona la circulación del transporte de pasajeros.
El secretario de Servicios Públicos de la Provincia, Carmelo Russo, confirmó a El Tribuno que ayer hubo una reunión en la que se decidió conformar una mesa de trabajo entre la Autoridad Metropolitana de Transporte (AMT), Saeta y la Municipalidad para definir el ordenamiento de los ómnibus urbanos y metropolitanos.
La semana pasada, la Municipalidad comenzó la primera etapa de las obras de refuncionalización del área céntrica. Los trabajos del denominado Corredor de la Fe incluyen, entre otras modificaciones, el ensanche de veredas y la reducción de calzadas para la circulación vehicular.
El primer frente de obra se abrió en la zona de Juramento y Zorrilla.
Con el plan, Tránsito había propuesto sacar a los colectivos de Saeta y modificar el actual sistema. Querían instalar un esquema de transversales y troncales con transbordos para evitar que todas las líneas barriales llegaran al área céntrica. Se trataba de un sistema mixto, con líneas periféricas, para reducir el caos vehicular en el corazón de la ciudad.
La Provincia se opuso a ese proyecto ya que consideró que la prioridad la debe tener el transporte público.
Como argumento, funcionarios remarcaron que el 70 por ciento de los salteños utiliza el colectivo para movilizarse.
Russo informó ayer que mantuvo una reunión con el secretario de Gobierno de la Municipalidad, José María Salado. La próxima semana, equipos técnicos analizarán cómo se implementará el ordenamiento y la ubicación de las paradas.
“Se logró un consenso y un entendimiento. Tenemos que trabajar para todos los usuarios que necesitan trasladarse y tratar de minimizar el tiempo del servicio, pero siempre con la intención de que el colectivo siga en el centro”, acotó ayer Russo tras salir del encuentro.
El funcionario provincial agregó: “Coincidimos en que el usuario necesita estar conectado y que utiliza el sistema de transporte en sentido norte a sur y de este a oeste. Todo se hará sin afectar el objetivo del servicio público y tratando de generar vías rápidas, que es el más importante”.
Días atrás, medios de Buenos Aires informaron que el Gobierno nacional aumentaría los subsidios al transporte para evitar subas del boleto hasta fin de año. En Salta, el 19 de junio se realizó una audiencia pública tras un pedido de Saeta de incrementar el valor del pasaje en las horas picos y en las valles.
El titular de la AMT, Federico Hanne, aseguró días atrás a El Tribuno que no hubo comunicación formal del Gobierno nacional sobre un posible aumento de las partidas que se transfieren para el transporte público de pasajeros.
Por su parte, el secretario de Servicios Públicos, Carmelo Russo, indicó que en el último año hubo una actualización del 37 por ciento, pero los salarios del sector subieron un 39 por ciento y el gasoil subsidiado, un 78 por ciento.
“Los subsidios no mantienen la ecuación financiera. El servicio se mantiene con un fuerte esfuerzo del Gobierno de la Provincia. Tenemos una flota de transporte de 618 unidades, con la incorporación de los diez colectivos fuelles, pero solo están cubiertas con subvenciones unas 530. Es decir que tenemos 84 unidades sin ninguna transferencia nacional”, agregó el funcionario.