El actor, director y productor argentino Modesto López le ha dedicado la vida a dos tareas que se fueron entrecruzando una y otra vez a lo largo del camino: contar historias y difundir la música y la poesía de América latina. A las historias las cuenta en lenguaje cinematográfico y con la mirada de quien -justamente- ha sido atravesado en muchos sentidos por la poesía. El cineasta está hoy de paso por Salta, adonde llegó para presentar tres de sus documentales: “El caído del cielo”, basado en la vida de un hachero tucumano convertido en santo popular; “Solentiname”, que aborda la vida y la obra del artista nicaragüense Ernesto Cardenal, y “Todavía cantamos”, que relata la historia del coro “Quiero Retruco”, integrado por expresos políticos.
Modesto López está radicado en México desde hace 39 años. El cineasta, que entre 1972 y 1973 fue actor en “Operación Masacre”, de Jorge Cedrón, y “Los traidores”, de Raymundo Gleyzer, cuenta que empezó a hacer documentales por una necesidad de “contar lo vivido”. “A principios de los 70 salí a caminar por América Latina con cien dólares y una cámara fotográfica. Mi meta era encontrarme conmigo mismo. En ese periplo conocí a muchos personajes que me fueron nutriendo y contribuyeron a que hoy yo pueda hacer lo que hago”, contó el realizador en diálogo con El Tribuno.
Lo que hace Modesto López es - entre otras cosas- contar historias de héroes anónimos como Tomás Francisco Toconás, el protagonista sin rostro de “El caído del cielo”: “Era un tucumano que en los 70 trabajaba como hachero en La Mesada, una zona cercana a Santa Lucía. Vivía allí humildemente, con su mujer y sus seis hijos. Nunca había participado en política pero cuando los militares mataron a su mejor amigo, Toconás decidió sumarse a las filas del Ejército Revolucionario del Pueblo (ERP), como una manera de reaccionar ante la muerte de su amigo. En pleno Operativo Independencia, en julio de 1975, el hachero fue capturado, torturado y posteriormente arrojado al vacío desde un helicóptero. Su cuerpo cayó en Pozo Hondo, Santiago del Estero. Le quemaron el rancho y su mujer y sus hijos quedaron en la calle”.
Desde el momento en que el cuerpo de Toconás “cayó del cielo”, la gente le empezó a pedir favores. Algunos se cumplieron y pronto comenzó a hablarse de milagros y lo transformaron en santo. Sus restos, enterrados como NN, fueron identificados recién en 2010 por el Equipo Argentino de Antropología Forense. “Sus hijos jamás habían denunciado su desaparición por miedo, como les ocurrió a tantas otras familias de la zona que al día de hoy jamás se atrevieron a denunciar la desaparición de sus familiares o amigos”, comentó el director del documental. “Yo traté de recuperar al ser humano cotidiano, al que nunca se le da importancia. Toconás era ya un NN antes de desaparecer”, precisó. Modesto es también fundador del sello discográfico mexicano Ediciones Pentagrama, que cumplirá 36 años difundiendo los más diversos géneros musicales.
“Solentiname” es otro de los documentales que López presentará en Salta: “En aquel viaje que hice en los 70 pasé por Nicaragua con el objetivo de llegar a Solentiname, porque se hablaba mucho de esa comunidad. Pero el país estaba bajo la dictadura de Somoza así que tuve que esperar a que llegara la Revolución Nicaragüense. Fue entonces que conocí a Ernesto Cardenal, el escritor, escultor y sacerdote. En Solentiname fui testigo aquella particular comunidad de campesinos convertidos por Cardenal en poetas, músicos, pintores y revolucionarios. Y encontrarlos a ellos fue una manera de encontrarme a mí mismo”, relató López.
Por último, “Todavía cantamos” cuenta la historia del coro Quiero Retruco, integrado por expresos políticos y familiares de desaparecidos.
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El actor, director y productor argentino Modesto López le ha dedicado la vida a dos tareas que se fueron entrecruzando una y otra vez a lo largo del camino: contar historias y difundir la música y la poesía de América latina. A las historias las cuenta en lenguaje cinematográfico y con la mirada de quien -justamente- ha sido atravesado en muchos sentidos por la poesía. El cineasta está hoy de paso por Salta, adonde llegó para presentar tres de sus documentales: “El caído del cielo”, basado en la vida de un hachero tucumano convertido en santo popular; “Solentiname”, que aborda la vida y la obra del artista nicaragüense Ernesto Cardenal, y “Todavía cantamos”, que relata la historia del coro “Quiero Retruco”, integrado por expresos políticos.
Modesto López está radicado en México desde hace 39 años. El cineasta, que entre 1972 y 1973 fue actor en “Operación Masacre”, de Jorge Cedrón, y “Los traidores”, de Raymundo Gleyzer, cuenta que empezó a hacer documentales por una necesidad de “contar lo vivido”. “A principios de los 70 salí a caminar por América Latina con cien dólares y una cámara fotográfica. Mi meta era encontrarme conmigo mismo. En ese periplo conocí a muchos personajes que me fueron nutriendo y contribuyeron a que hoy yo pueda hacer lo que hago”, contó el realizador en diálogo con El Tribuno.
Lo que hace Modesto López es - entre otras cosas- contar historias de héroes anónimos como Tomás Francisco Toconás, el protagonista sin rostro de “El caído del cielo”: “Era un tucumano que en los 70 trabajaba como hachero en La Mesada, una zona cercana a Santa Lucía. Vivía allí humildemente, con su mujer y sus seis hijos. Nunca había participado en política pero cuando los militares mataron a su mejor amigo, Toconás decidió sumarse a las filas del Ejército Revolucionario del Pueblo (ERP), como una manera de reaccionar ante la muerte de su amigo. En pleno Operativo Independencia, en julio de 1975, el hachero fue capturado, torturado y posteriormente arrojado al vacío desde un helicóptero. Su cuerpo cayó en Pozo Hondo, Santiago del Estero. Le quemaron el rancho y su mujer y sus hijos quedaron en la calle”.
Desde el momento en que el cuerpo de Toconás “cayó del cielo”, la gente le empezó a pedir favores. Algunos se cumplieron y pronto comenzó a hablarse de milagros y lo transformaron en santo. Sus restos, enterrados como NN, fueron identificados recién en 2010 por el Equipo Argentino de Antropología Forense. “Sus hijos jamás habían denunciado su desaparición por miedo, como les ocurrió a tantas otras familias de la zona que al día de hoy jamás se atrevieron a denunciar la desaparición de sus familiares o amigos”, comentó el director del documental. “Yo traté de recuperar al ser humano cotidiano, al que nunca se le da importancia. Toconás era ya un NN antes de desaparecer”, precisó. Modesto es también fundador del sello discográfico mexicano Ediciones Pentagrama, que cumplirá 36 años difundiendo los más diversos géneros musicales.
“Solentiname” es otro de los documentales que López presentará en Salta: “En aquel viaje que hice en los 70 pasé por Nicaragua con el objetivo de llegar a Solentiname, porque se hablaba mucho de esa comunidad. Pero el país estaba bajo la dictadura de Somoza así que tuve que esperar a que llegara la Revolución Nicaragüense. Fue entonces que conocí a Ernesto Cardenal, el escritor, escultor y sacerdote. En Solentiname fui testigo aquella particular comunidad de campesinos convertidos por Cardenal en poetas, músicos, pintores y revolucionarios. Y encontrarlos a ellos fue una manera de encontrarme a mí mismo”, relató López.
Por último, “Todavía cantamos” cuenta la historia del coro Quiero Retruco, integrado por expresos políticos y familiares de desaparecidos.
El programa en Salta
Jueves 8, a las 19, documental "El caído del cielo" en el Intituto de Enseñanza Superior (IES) 6053 "Abuelas de Plaza de Mayo" (Dean Funes 1151). Con debate posterior coordinado por profesor Germán Baneck.
Viernes 9 a las 21, documental "Solentiname" en la Sala Walter Adet de la Biblioteca Provincial de Salta Dr. Victorino de la Plaza. (Av. Belgrano 1002). Con debate posterior coordinado por el cineasta Alejandro Arroz.
Sábado 10 a las 20, documental "Todavía cantamos" dentro del Ciclo "El cine de aquí" de Campo Quijano (Gral. Güemes 174). Con debate coordinado por la escritora María Neder.