La Justicia de Santiago del Estero condenó a un hombre a un año y medio de prisión, tras ser hallado responsable de agredir brutalmente a su esposa en numerosas ocasiones, llegando al punto de abrirle la boca con un cuchillo para introducirle un celular a la boca.
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La Justicia de Santiago del Estero condenó a un hombre a un año y medio de prisión, tras ser hallado responsable de agredir brutalmente a su esposa en numerosas ocasiones, llegando al punto de abrirle la boca con un cuchillo para introducirle un celular a la boca.
La jueza de Género, Norma Elizabeth Morán, dictó ayer el fallo en contra de Cristian Ramón Ríos, por atacar a Adriana Tévez. En el veredicto se lo acusa por "lesiones, amenazas calificadas y desobediencia judicial".
Ríos ya fue juzgado por varios incidentes, instruidos por la fiscal Mariana Baena. En uno de ellos, arribó furioso a la casa, golpeó a Tévez, tomó un cuchillo y lo usó de palanca para abrirle la boca a la indefensa víctima.
Con la joven desesperada, Ríos le arrebató el celular y se lo introdujo en la boca, ordenándole que se lo tragara. Como pudo, la víctima escapó y se refugió en la casa de su padre.
Lejos de sosegarse, Ríos volvió a la carga dos meses después. Se presentó en la casa del suegro y le ordenó a Tévez reiniciar el vínculo.
Ante el "no" de la mujer, volvió a recurrir a la violencia y a las amenazas. "Te voy a c... matando donde te vea; más te vale que te cuides", amenazó.
Por este episodio estuvo preso por 15 días. Al quedar libre se le impusieron una serie restricciones y reglas de conducta, que no cumplió. Por este motivo, a las pocas semanas retornó a la cárcel. Ahora, la Justicia lo sometió a un juicio abreviado que terminó con una condena en suspenso.
Pese a volver libre a la calle, si vulnera lo ordenado, la excarcelación le será revocada y purgará en la cárcel los 18 meses impuestos. Lo más importante: es que no puede acercarse, ni comunicarse con su exmujer.