En dos ciudades del norte provincial menores de edad estuvieron involucrados en hechos delictivos, tenían en su poder armas blancas. Ocurrió en Orán y Tartagal.
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En dos ciudades del norte provincial menores de edad estuvieron involucrados en hechos delictivos, tenían en su poder armas blancas. Ocurrió en Orán y Tartagal.
El martes por la noche un hombre a bordo de un Volkswagen Vento regresaba a su hogar, mientras circulaba por la calle Alvear, llegando a Pringles dos chicos le hicieron señas para que detuviera el rodado. Uno de los jóvenes tenía un cuchillo, los menores se pusieron adelante del auto y el conductor debió bajar la velocidad. En ese momento los pequeños delincuentes le exigieron la entrega de dinero.
El conductor les dijo que no tenía plata para darles y los menores decidieron escapar. Con las características aportadas por la víctima la Policía logró la captura de ambos, quienes estaban borrachos. Sus padres fueron notificados de lo ocurrido y deberán presentarse para una audiencia ante la Justicia, el hecho fue caratulado como "tentativa de robo".
En Tartagal, también el martes por la noche, el propietario de un local de venta de ropa observó que dos niños de 11 años intentaban robar en un "perchero solidario". El señor alertó la situación tras escuchar fuertes golpes, eran los menores quienes habían violentado partes de las maderas del ropero. Logró demorar a los chicos hasta que llegó la Policía, tras requisarlos uno de ellos tenía en la cintura un cuchillo.
Fueron trasladados a la dependencia policial, luego entregados a sus padres quienes deberán comparecer en una audiencia. La indignación de las víctimas y la gente en general es porque dado la edad de los pequeños ladrones son liberados y vuelven a delinquir.