El secretario de Gobierno, Sebastián Otero, junto al subsecretario de Medio Ambiente, Carlos Coronel, la directora de Relaciones Institucionales, Ema Juárez, y el encargado de Obras, Alberto Rodríguez, visitaron el barrio Fátima y el barrio 20 de Junio para determinar las condiciones en que se encuentran las calles y planificar dónde se construirá pavimento y cordón cuneta.
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El secretario de Gobierno, Sebastián Otero, junto al subsecretario de Medio Ambiente, Carlos Coronel, la directora de Relaciones Institucionales, Ema Juárez, y el encargado de Obras, Alberto Rodríguez, visitaron el barrio Fátima y el barrio 20 de Junio para determinar las condiciones en que se encuentran las calles y planificar dónde se construirá pavimento y cordón cuneta.
Desde la Municipalidad informaron que se continuará con el pavimento de calle Maipú, al sur, se construirá cordón cuneta en algunas arterias del Barrio 20 de Junio y se hará un badén de cemento en la intersección de calles Vuelta de Obligado y Jujuy, esquina ésta que se mantiene siempre en mal estado por el derrame de aguas que vienen desde el oeste y se depositan allí.
Por eso, la construcción del badén no permitirá el estancamiento en el lugar y dará una mejor transitabilidad por esa zona de la ciudad.
Otero aprovechó también para dialogar con los vecinos sobre las obras que se realizarán en la zona y sobre las necesidades de la misma.
Esta semana se comenzará con la puesta a punto de las arterias que serán pavimentadas.
Un verano lluvioso
En ese marco, cabe recordar, que durante el último verano, a causa de las copiosas lluvias registradas en toda la provincia, fueron muchas las arterias de tierra que resultaron anegadas y quedaron prácticamente inutilizables para los vehículos en el ejido urbano.
Estos problemas se notaron especialmente en los barrios ubicados en las serranías del oeste de la ciudad, donde las calles tiene declives importantes y el escurrimiento de las aguas es muy veloz, por lo que quedan importantes grietas en todo el recorrido.
Otro de los problemas denunciados repetidamente por los vecinos es el derrame de líquidos cloacales en distintos sectores de la ciudad, lo que provoca olores nauseabundos en los barrios periféricos.