El 12 de agosto de 2011 un grupo de personas comenzó a marchar en torno de la plaza 9 de Julio para reclamar justicia por sus hijos, padres y hermanos. Desde entonces, todos los viernes, a las 19, se congregan cada vez más víctimas para exigir al Estado respuestas a su dolor.
inicia sesión o regístrate.
El 12 de agosto de 2011 un grupo de personas comenzó a marchar en torno de la plaza 9 de Julio para reclamar justicia por sus hijos, padres y hermanos. Desde entonces, todos los viernes, a las 19, se congregan cada vez más víctimas para exigir al Estado respuestas a su dolor.
Asesinatos en diversas circunstancias, desapariciones y accidentes por negligencia son algunas de las causas sin resolver por las que reclaman. El número de víctimas crece. Aseguran que peregrinan por más de 200 casos de toda la provincia y que no llegó a resolverse el 10 por ciento de los expedientes por los que pidieron en estos años.
Mañana, a las 10, harán la marcha número 338 en torno de la plaza que los vio caminar y llorar tantas veces durante estos seis años. A partir de las 11, grupos de música locales brindarán un homenaje a las víctimas en un escenario que se ubicará cerca del mástil. Entre ellos estarán Azotes, Aire Salteño y Cristian Alzogaray. El acto cerrará a las 12.30 con un discurso y suelta de globos.
El sábado, a las 15, la Comisión de Familiares contra la Impunidad se encontrará en la avenida Ex Combatientes de Malvinas al 1.370 para volver a pintar la estrella amarilla que recuerda que allí murió Marco Alberto Córdoba, el 12 de agosto de 2007, cuando tenía 10 años.
Ayer se juntaron en el acceso a la Ciudad Judicial para pedir a los jueces que aceleraran la resolución de las causas. "Hay alrededor de 230 casos por los que marchamos y solo entre un 5 y 7 por ciento de ellos han sido resueltos", manifestó a El Tribuno Ana Fernández, madre de una joven asesinada en 2011.
"Han pasado ya seis años y tres meses desde que asesinaron a Cintia y la Justicia todavía no llegó. Voy a seguir denunciando. No me van a callar ni a doblegar", aseguró una vez más.
"Lamentamos que cada vez llegue más gente a la plaza. Nos dicen que la Justicia tiene sus tiempos pero no es el tiempo que nosotros esperamos. La impunidad continúa", dijo a El Tribuno Raúl Córdoba, papá de Marco, el niño que murió en 2007.
Córdoba recordó que las primeras víctimas por las que marcharon fueron, entre otras, Cintia Fernández, Mirta Llanos, Enrique Corregidor, Diego Esper, Marco Córdoba, Maxi Zapana y Cristian Fernando Luna. Entre los últimos casos que se sumaron se encuentran el de Zoe Milagros Rodríguez y Tomás Villanueva. Acotó que muchas de las personas por las que reclaman justicia fueron asesinadas en siniestros viales.
"Hay casos que fueron a juicio y siguen en la Cámara de Casación porque fueron apelados y todavía no están firmes las sentencias. En otros, como el de Marcela Mamaní -cuyo cuerpo nunca apareció- el asesino está libre porque hubo sentencia condenatoria pero la Cámara de Casación le levantó la condena y lo liberó", comentó el referente de los familiares.
La respuesta oficial
El Tribuno se comunicó con el Poder Judicial de Salta para conocer su respuesta a las exigencias de la Comisión de Familiares contra la Impunidad durante estos seis años.
"Cuando Guillermo Catalano llegó a la presidencia de la Corte de Justicia (en diciembre de 2015) se creó la oficina de asistencia a la víctima. Desde allí se hace el seguimiento de todas las causas que están incluidas en su reclamo y se los atiende específicamente. Esta oficina surgió con la idea de actuar de nexo con los familiares", difundieron desde la Justicia.
Además, explicaron que "en el listado original -de 173 causas que presentó la Comisión- había algunas de la Justicia Federal, de otras provincias y otras que ya estaban resueltas". Se señaló que "entre los reclamos, hay hechos que están en recursos de Casación o en distintas instancias".
Violencia y abusos: ayuda a víctimas
Desde el femicidio de su hija, Ana Fernández no solo lucha por encontrar justicia, también ayuda a otras familias que sufrieron femicidio, violencia de género, abuso sexual infantil y maltrato infantil.
El crimen que sufrió su única hija la llevó a crear la Fundación Cintia Fernández, que el próximo 19 de agosto cumplirá un año.
La organización cuenta con un grupo interdisciplinario de profesionales: abogados, licenciados en criminalística, psicólogos y trabajadores sociales que trabajan “ad honorem” para ayudar a los familiares y a las víctimas.
“Tenemos más de 50 casos en la Fundación. Recibimos entre dos y tres personas por día por denuncias de violencia o abuso sexual infantil”, contó Fernández. “A pesar de los avances de la legislación, no hay un defensor oficial para las víctimas. El victimario tiene defensor, pero no la víctima”, dijo.
Para contactarse con la Fundación Cintia Fernández, hay que llamar a los teléfonos 0387-155685077 y 0387-154651842.
A partir de la semana próxima, la atención será en 20 de febrero 380, Salta capital.