La ruta provincial 13, única vía de acceso al extenso departamento de Rivadavia Banda Sur, sigue sumando indignación y reclamos de la gente que debe recorrerla diariamente.
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La ruta provincial 13, única vía de acceso al extenso departamento de Rivadavia Banda Sur, sigue sumando indignación y reclamos de la gente que debe recorrerla diariamente.
Son 50 kilómetros entre La Unión y Rivadavia que se encuentran en un estado calamitoso y que deja prácticamente incomunicados a los pobladores de esos lugares.
Baches, surcos, roturas por doquier y peligrosas diferencias de altura con la banquina, conforman el actual panorama de una de las rutas que figuraba como el segundo proyecto vial más importante del Fondo de Reparación Histórica y que quedó a mitad de camino.
A los problemas cotidianos de transporte de pasajeros, mercadería o el tránsito de ambulancias y vehículos particulares, se sumó en las últimas horas una nota más preocupante todavía y es que al parecer ni siquiera los vehículos 4x4 de la Policía pueden superar esa verdadera carrera de obstáculos.
Así por lo menos lo demuestra la foto que acompaña esta nota, en la que se puede apreciar el vuelco de una camioneta de la Policía, ocurrido en las últimas horas sobre la polémica traza a la altura del paraje Tandil. Al parecer, el conductor del vehículo perdió el control entre la maraña de pozos y roturas de la cinta bituminosa que, lejos de ser una solución provisoria, se transformó en un inevitable peligro.
Si en la temporada de sequía ocurren este tipo de accidentes y con vehículos de tales características, los pobladores no quieren ni imaginarse lo que pasará en los próximos meses cuando comiencen las lluvias y la movilidad de vehículos sanitarios se incremente.
Archivo
Un informe publicado por El Tribuno hace pocas semanas recordó que la constructora a la que se habían adjudicado las obras básicas de pavimentación a fines en 2013 por $63 millones, se retiró en diciembre de 2016, tras ejecutar las bases granulares, alteos y alcantarillados.
La capa asfáltica, que debía completar esos trabajos, quedó en lista de espera y mucho de lo que se hizo quedó arruinado en pocos meses.
Esos trabajos inconclusos, lejos de aportar una mejora al tránsito, se convirtieron en un enorme dolor de cabeza para los conductores.
De este modo, en poco tiempo, la ruta que conecta a Rivadavia Banda Sur con Orán y el resto de la provincia quedó "peor que antes".