La Selección argentina de básquet derrotó a Brasil 86 a 74, mantuvo su invicto y se quedó con el Súper 4 en el estadio Delmi. Lo más importante del saldo que arrojaron las victorias del fin de semana largo es la confianza, de cara a la AmeriCup.
La media de gente que había asistido los días anteriores del Súper 4 en Salta ya se había superado en el duelo inicial de la tercera y última jornada, por eso se intuía que el marco en el clásico sudamericano iba a ser increíble. Y así fue: alrededor de 7.000 personas dijeron presente para despedir a El Alma.
Sin Luis Scola, el más ovacionado fue Facundo Campazzo en la presentación oficial. Sergio Hernández mandó a la cancha a Facundo Campazzo, Nicolás Brussino, Marcos Delía, Gabriel Deck y Javier Saiz.
En los primeros minutos hubo muchas improlijidades en ambos equipos, pero bastó que la agarre Brussino, tire de tres y explote el polideportivo salteño. Otra vez el jugador de Atlanta Hawks anotó y estiró la ventaja. Sin embargo, los brasileños lastimaron de la mano de Bruno Cabo clo y se quedaron con el primer cuarto por 19 a 17.
Argentina reaccionó en el final del primer tiempo: Lucio Redivo la clavó de tres y Deck no perdonó dos veces seguidas para dar vuelta el marcador. Joao Paulo Batista y otra vez Caboclo dejaron a Brasil siempre a tiro y por eso los albicelestes se fueron al entretiempo con la diferencia de 41 a 36.
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La Selección argentina de básquet derrotó a Brasil 86 a 74, mantuvo su invicto y se quedó con el Súper 4 en el estadio Delmi. Lo más importante del saldo que arrojaron las victorias del fin de semana largo es la confianza, de cara a la AmeriCup.
La media de gente que había asistido los días anteriores del Súper 4 en Salta ya se había superado en el duelo inicial de la tercera y última jornada, por eso se intuía que el marco en el clásico sudamericano iba a ser increíble. Y así fue: alrededor de 7.000 personas dijeron presente para despedir a El Alma.
Sin Luis Scola, el más ovacionado fue Facundo Campazzo en la presentación oficial. Sergio Hernández mandó a la cancha a Facundo Campazzo, Nicolás Brussino, Marcos Delía, Gabriel Deck y Javier Saiz.
En los primeros minutos hubo muchas improlijidades en ambos equipos, pero bastó que la agarre Brussino, tire de tres y explote el polideportivo salteño. Otra vez el jugador de Atlanta Hawks anotó y estiró la ventaja. Sin embargo, los brasileños lastimaron de la mano de Bruno Cabo clo y se quedaron con el primer cuarto por 19 a 17.
Argentina reaccionó en el final del primer tiempo: Lucio Redivo la clavó de tres y Deck no perdonó dos veces seguidas para dar vuelta el marcador. Joao Paulo Batista y otra vez Caboclo dejaron a Brasil siempre a tiro y por eso los albicelestes se fueron al entretiempo con la diferencia de 41 a 36.
Después del descanso, Argentina y Brasil regresaron a la cancha para completar los dos cuartos finales. Hernández continuó con el recambio, como lo hizo en todos los encuentros e ingresaron Luca Vildoza y Roberto Acuña. El “Tortuga” Deck reapareció robando un balón y se trasladó por toda la cancha para escabullirse pese a sus 1,97 y penetrar, para el delirio del público salteño. El conjunto nacional comenzó a alejarse en el marcador, a través de la mejor dupla del torneo, Campazzo-Deck. Por el lado de los verdeamarelos, Caboclo fue de mayor a menor, para terminar apagándose. Redivo nuevamente acertó de tres, seguidamente de dos para convertirse en un hombre clave en el penúltimo tramo. El tablero indicó 61 a 52 para esperar con mayor tranquilidad el último cuarto. Luego, el equipo siguió en sintonía para llevarse el tercer y último partido, como así también la copa del Súper 4.
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