Luego de que El Tribuno publicara una nota en la que los proteccionistas cuestionaban quién controlaba a los caballos que quedaron en manos de los carreros que adhirieron al plan de reconversión, la Municipalidad informó ayer que comenzarán a realizar visitas a los hogares de los carreros para conocer el impacto que tuvo el fin de la tracción a sangre, tanto en el seno familiar como en los animales.
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Luego de que El Tribuno publicara una nota en la que los proteccionistas cuestionaban quién controlaba a los caballos que quedaron en manos de los carreros que adhirieron al plan de reconversión, la Municipalidad informó ayer que comenzarán a realizar visitas a los hogares de los carreros para conocer el impacto que tuvo el fin de la tracción a sangre, tanto en el seno familiar como en los animales.
De acuerdo a lo que informó el municipio, personal de la Secretaría de Desarrollo Social y Ambiente llegará a los distintos domicilios y, mientras las asistentes sociales dialogan con los miembros de las familias, los veterinarios realizarán el seguimiento de la salud de los caballos.
"A casi 20 días de la puesta en marcha del Plan Integral de Reconversión, los profesionales esperan que los animales estén en mejor estado de salud, dado que ya no realizan trabajos forzosos", señala el comunicado.
Y agregó que si se detectara alguna anomalía en la salud de los caballos, la comuna dará intervención -siempre respetando el derecho a la propiedad privada y velando por el bienestar del animal- a los organismos correspondientes por infracción a Ley Nacional 14.346 de maltrato animal y a las ordenanzas de la ciudad de Salta en el mismo sentido.
La comuna recordó que en mayo pasado la Facultad de Ciencias Agrarias y Veterinarias de la Ucasal finalizó el censo sobre la situación en que se encontraban los animales. Ese informe arrojó que 194 caballos fueron censados, siendo 111 machos y 83 hembras. Del total, 12 se encontraban en excelente estado, 157 en buen estado, 20 en regular estado y solo 5 en mal estado. Respecto a las lesiones, se habían registrado 57 casos positivos y 137 negativos, destacándose que no eran lesiones de gravedad pero sí a tener en cuenta.
Las dudas
Elba Moreira, titular de la Fundación San Roque, teme por el futuro de los caballos de los carreros que se reconvirtieron. "Hay un grupo mínimo que siempre tuvo su caballo como una herramienta de trabajo, le da buena comida y van seguido al veterinario", afirmó la mujer. Al tiempo que señaló que siempre hubo animales maltratados, lo que nada hace pensar que ahora no seguirán en esas condiciones.
Moreira contó que luego de la nota publicada por este medio, fue visitada por Gustavo Sáenz. "El intendente tuvo un gesto de humildad, lo que me muestra que quiere solucionar el tema. Entiende lo que significa rescatar a los caballos", dijo.
Además, informó que el jefe comunal le dijo que va a formar un equipo de trabajo para llevar adelante la verificación del estado de salud de los caballos. "Trabajaremos con la Ucasal, el municipio, instituciones y otras proteccionistas para buscar distintas salidas para el caballo", señaló.
En las visitas que se realizará a las casas de los carreros se tratará de que asuman el compromiso de no venderlos en los municipios cercanos, y que los caballos estén en buenas condiciones.
Ayer el secretario de Gobierno del municipio, Luis María García Salado, aclaró que desde el municipio no pueden exigirles a los carreros que entreguen los caballos, ya que son de su propiedad.
"Lo que hay que tener en cuenta es que desde el 4 de agosto no circulan más carros tirados por caballo en la ciudad", dijo el funcionario a Radio Salta. García Salado aseguró que si los carreros entregaban su carro cubrían el 70% del costo de las motocargas y si entregaban el caballo, otro 15%, quedando una parte para saldarla prestando servicio a la comuna.
El funcionario político del municipio aseguró que "no tenemos la facultad de expropiar los caballos ni mucho menos podemos obligarlos a entregarlos. Muchos lo toman como parte de su familia".
Por otro lado, afirmó que serían 400 caballos los que están en las casas de los carreros, porque cada familia posee dos. Al tiempo que contó que dos fortines recibirían caballos y que apenas 12 personas quieren entregarlos.