Apenas mediodía pasó de un crimen a otro. San Ramón de la Nueva Orán sigue siendo el escenario donde los homicidios se suceden a diario. Una zona caliente de delincuentes en sus más variadas especies, quienes no dan descanso ni se toman vacaciones. El viernes al mediodía un chico de 17 años, identificado por la Policía como Andrés Cuéllar, fue ultimado de un puntazo. En la madrugada de ayer fuentes policiales señalaron que un joven de 21 años tuvo que ser trasladado de urgencia al hospital zonal, donde perdió la vida, se trata de Gustavo Jakinda. Tras el rápido accionar de los uniformados pertenecientes a la Brigada de esa ciudad, los sospechosos de los crímenes fueron capturados y puestos a disposición de la Justicia.
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Apenas mediodía pasó de un crimen a otro. San Ramón de la Nueva Orán sigue siendo el escenario donde los homicidios se suceden a diario. Una zona caliente de delincuentes en sus más variadas especies, quienes no dan descanso ni se toman vacaciones. El viernes al mediodía un chico de 17 años, identificado por la Policía como Andrés Cuéllar, fue ultimado de un puntazo. En la madrugada de ayer fuentes policiales señalaron que un joven de 21 años tuvo que ser trasladado de urgencia al hospital zonal, donde perdió la vida, se trata de Gustavo Jakinda. Tras el rápido accionar de los uniformados pertenecientes a la Brigada de esa ciudad, los sospechosos de los crímenes fueron capturados y puestos a disposición de la Justicia.
A estos dos últimos homicidios se suman una serie de cruentos hechos perpetrados en Orán en las últimas semanas y meses. Una organización del crimen donde al parecer actuaron dos sicarios fueron sindicados como los actores que pergeñaron la muerte del productor Raúl Martínez, y quienes habrían fallado en el intento de homicidio de Ricardo Gerónimo. Las salvajes acciones desatadas en esa ciudad también conmovieron a sus habitantes cuando en la medianoche del miércoles un joven de 16 años intentó abusar sexualmente y ahorcar tras el frustrado intento a una niña de 13 años, la joven pudo seguir viva tras arrastrarse y pedir auxilio. El aberrante hecho ocurrió en las inmediaciones del complejo deportivo municipal de Orán.
Mediodía trágico
Jóvenes corriendo de un lado a otro, gritos y violentos enfrentamientos fueron los indicios que alertaron a lo vecinos cercanos a la intersección del Pasaje Cisterna y calle Esquiú, cerca de las 12. Unos 20 minutos después un llamado al Sistema de Emergencias 911 alertaba a los uniformados sobre un muchacho que agonizaba en la vía pública. Los policías se trasladaron al lugar del hecho y constataron lo sucedido, llamaron a una ambulancia y el joven fue trasladado de urgencia al hospital San Antonio de Paul, donde una hora y media después falleció.
Según pudo saber El Tribuno, lo ocurrido en el crimen de Andrés Cuéllar tiene distintas hipótesis. Los investigadores de Orán sospechan de una venganza, dado que ambos jóvenes adictos, la víctima y victimario, pertenecían a la misma banda. En el ambiente delictivo suponen que se trató del "vuelto de un robo". En el momento de la agresión, Cuéllar se encontraba con uno de los jóvenes que luego fue detenido a causa de varias contradicciones ante los uniformados. Mientras, un tal Chueco, de 21 años, sería el autor del asesinato. Ambos fueron interceptados al cabo de algunas horas de búsqueda a cargo del personal de la Brigada de Orán.
Caminaba con su familia
El segundo crimen consumado en la ciudad de Orán se produjo ayer cerca de la una de la madrugada. Según la concubina del joven asesinado, mientras caminaban junto a su hija de siete años su pareja fue atacado por un grupo de personas, al menos seis hombres, quienes iban a bordo de tres motos. Según la descripción, fue por la calle Arenales en sentido este a oeste, llegando a la calle Rivadavia, allí descendieron de los rodados los agresores para atacar a Gustavo Jakinda.
En sus declaraciones la joven, quien junto a su hija fueron testigos presenciales del crimen de su pareja, aportó que logró reconocer a uno de los atacantes, identificándolo como Carlos Quiroga. Según la joven, fue Carlitos -apodo del sospechoso- quien habría ultimado a Jakinda (21). La misma fuerza que horas antes había capturado a dos presuntos criminales, pasadas las 11 de ayer logró la detención del tal Carlitos, quien en el momento de ser aprehendido habría argumentado que accionó contra la víctima por venganza, dado que Jakinda lo había increpado y lesionado días antes con un machete. El agresor e imputado de homicidio fue reconocido por una cicatriz que tiene en el rostro.
En este último caso los sabuesos oranenses seguirán buscando a los cómplices que acompañaron al presunto criminal en el homicidio del joven Gustavo Jakinda, ocurrido en pleno centro de la ciudad.
Son 13 los homicidios en el departamento
La mayoría de los asesinatos se produjeron con arma blanca.
La droga, el alcohol y la irracionalidad de seres inescrupulosos capaz de cualquier cosa y sin valor por la vida misma son algunos de los factores que están en juego a la hora de desmenuzar el crimen en Orán. Una franja etaria muy baja, entre 15 y 30 años, son víctimas de violentos hechos producto de alguno de estos factores. Según estadísticas que se desprenden del archivo de este matutino, corroboradas por fuentes policiales, en lo que va del año en el Departamenteo Orán son 13 los homicidios.
El primero de los homicidios se registró el domingo 8 de enero en Pichanal, donde Marcos Salazar, de 18 años, murió producto de un balazo, ocurrido en el loteo Retes, de Colonia Santa Rosa. Una semana después Ricardo Coro, de 21 años, quien trabajaba en una empresa de seguridad y tras haber cobrado el suelo apareció sin vida en un canal de riego en inmediaciones del barrio 62 Hectáreas de Hipólito Yrigoyen.
De los 13 crímenes que se registraron hasta el momento en el departamento Orán, tres fueron femicidios, de los cuales dos todavía no fueron confirmados por la Justicia salteña. Se trata del crimen de Betina Isabel Sánchez (26), ultimada el 1 de febrero en el barrio 25 de Mayo; Cintia Betiana Rodríguez (17) fue encontrada sin vida con un golpe en el cuello el sábado 18 de marzo en una finca de Aguas Blancas. Y Camila Rodríguez (15) quien estaba embarazada de seis meses y vivía en el barrio Caballito de Orán, y fue hallada en un cañaveral de la ruta 50 con heridas de arma blanca en el cuello. En los dos últimos hechos se investiga si está presente el agravante de violencia de género.
Cambio de carátula
Además de los hechos que terminan por caratularse como homicidio en sus diferentes grados y agravantes, la ciudad de Orán y sus alrededores también sufre a diario numerosos hechos de violencia. El miércoles a la medianoche un joven de 16 años, quien fue puesto a disposición de la justicia, intentó violar y matar a una adolescente de 13, en un hecho que ocurrió en la zona del polideportivo municipal, la víctima quedó grave y tuvo que ser trasladada a Salta capital. En un principio el hecho había sido caratulado como “lesiones graves” y en las últimas horas pasó a ser “tentativa de homicidio”.