El mexicano Saúl “Canelo” Álvarez y el kazajo Gennady Golovkin protagonizarán esta noche en Las Vegas la pelea más esperada en los últimos dos años en el mundo del boxeo, que debe despejar dudas sobre si el azteca es realmente un campeón reconocido por su gente o si el kazajo es la máquina trituradora que barre en los medianos. Los púgiles se enfrentarán en el T-Mobile de Las Vegas; se estima que subirán al ring a las 0 del domingo, pero la transmisión de Space largará a las 21.30.
Canelo es el rostro más rentable del boxeo mexicano pero sus actuaciones habitualmente polarizan la simpatía de los aficionados aztecas, que le exigen un estilo más agresivo. Golovkin es un peleador invicto, entrenado por el mexicano Abel Sánchez, que espera convertirlo en la versión caucásica del ídolo mexicano Julio César Chávez.
Es por eso que la cita entre ambos por el cinturón mediano del Consejo Mundial de Boxeo (CMB) debe clarificar la realidad de ambos peleadores, que luego de dos años de retos y evasiones se pondrán los guantes en una plaza que agotó las entradas en tres días.
Álvarez (49-1-1) solamente tiene una derrota en su carrera frente a Floyd Mayweather mientras que Golovkin (37-0) llega con su récord inmaculado a este pleito, que le entregará la bolsa más grande de su carrera.
“La pelea tardó en realizarse, tanto que ya había perdido la esperanza de pelear con Canelo. Pero él siempre estuvo listo, creo que fue la gente de Golden Boy Promotions la que no quería”, dijo Golovkin. “Pero aquí estamos, listos para darle a la gente la pelea que estuvo esperando por mucho tiempo. Esto debe ser histórico porque el deporte así lo quiere”, agregó.
Canelo viene de una victoria inapelable por decisión unánime sobre su compatriota Julio César Chávez Jr. en mayo y el duelo ante Golovkin le podría servir para despejar dudas sobre su potencial.
“Le tengo una sorpresa a Gennady. Esta pelea ya no es solamente por deporte sino también por orgullo. Mucha gente duda de mis puños pero Golovkin va a caer por nocaut”, señaló el mexicano. “La gente no tendrá dudas de quién es el campeón que representa a los mexicanos y nada mejor que ganar en septiembre, que es una fecha especial para mis paisanos. Esta es mi era”, sostuvo.
Aunque Golovkin ha demostrado su valor como boxeador, sus pobres números en la televisión le han imposibilitado de peleas ante grandes rivales, por lo que este combate puede significarle a sus 35 años su último gran escaparate a las peleas transmitidas en Pago para Ver.
“Esta es una pelea que marcará mi carrera. El ambiente, la sede y la fecha hacen de esta pelea un evento sin precedentes. Va por el boxeo y va por México, porque una de las motivaciones que yo he tenido en mi carrera es Julio César Chávez, quien es el mejor boxeador de la historia”, dijo Golovkin. Pase lo que pase ya hay asegurada una revancha entre Álvarez y Golovkin.
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El mexicano Saúl “Canelo” Álvarez y el kazajo Gennady Golovkin protagonizarán esta noche en Las Vegas la pelea más esperada en los últimos dos años en el mundo del boxeo, que debe despejar dudas sobre si el azteca es realmente un campeón reconocido por su gente o si el kazajo es la máquina trituradora que barre en los medianos. Los púgiles se enfrentarán en el T-Mobile de Las Vegas; se estima que subirán al ring a las 0 del domingo, pero la transmisión de Space largará a las 21.30.
Canelo es el rostro más rentable del boxeo mexicano pero sus actuaciones habitualmente polarizan la simpatía de los aficionados aztecas, que le exigen un estilo más agresivo. Golovkin es un peleador invicto, entrenado por el mexicano Abel Sánchez, que espera convertirlo en la versión caucásica del ídolo mexicano Julio César Chávez.
Es por eso que la cita entre ambos por el cinturón mediano del Consejo Mundial de Boxeo (CMB) debe clarificar la realidad de ambos peleadores, que luego de dos años de retos y evasiones se pondrán los guantes en una plaza que agotó las entradas en tres días.
Álvarez (49-1-1) solamente tiene una derrota en su carrera frente a Floyd Mayweather mientras que Golovkin (37-0) llega con su récord inmaculado a este pleito, que le entregará la bolsa más grande de su carrera.
“La pelea tardó en realizarse, tanto que ya había perdido la esperanza de pelear con Canelo. Pero él siempre estuvo listo, creo que fue la gente de Golden Boy Promotions la que no quería”, dijo Golovkin. “Pero aquí estamos, listos para darle a la gente la pelea que estuvo esperando por mucho tiempo. Esto debe ser histórico porque el deporte así lo quiere”, agregó.
Canelo viene de una victoria inapelable por decisión unánime sobre su compatriota Julio César Chávez Jr. en mayo y el duelo ante Golovkin le podría servir para despejar dudas sobre su potencial.
“Le tengo una sorpresa a Gennady. Esta pelea ya no es solamente por deporte sino también por orgullo. Mucha gente duda de mis puños pero Golovkin va a caer por nocaut”, señaló el mexicano. “La gente no tendrá dudas de quién es el campeón que representa a los mexicanos y nada mejor que ganar en septiembre, que es una fecha especial para mis paisanos. Esta es mi era”, sostuvo.
Aunque Golovkin ha demostrado su valor como boxeador, sus pobres números en la televisión le han imposibilitado de peleas ante grandes rivales, por lo que este combate puede significarle a sus 35 años su último gran escaparate a las peleas transmitidas en Pago para Ver.
“Esta es una pelea que marcará mi carrera. El ambiente, la sede y la fecha hacen de esta pelea un evento sin precedentes. Va por el boxeo y va por México, porque una de las motivaciones que yo he tenido en mi carrera es Julio César Chávez, quien es el mejor boxeador de la historia”, dijo Golovkin. Pase lo que pase ya hay asegurada una revancha entre Álvarez y Golovkin.