¿Quieres recibir notificaciones de alertas?

19°
25 de Abril,  Salta, Centro, Argentina
PUBLICIDAD

Una madre desesperada teme por la vida de sus hijas

El fin de semana la menor de sus nenas fue víctima de una feroz golpiza en San Lorenzo.Al término de un cumpleaños, al menos ocho jóvenes la patotearon y la dejaron internada.
Lunes, 18 de septiembre de 2017 00:00

Entre burlas y amenazas de quienes castigaron con brutalidad a su hija menor, una madre pasa los días al borde de la desesperación. El sábado 9 del corriente mes la joven fue al cumpleaños de un compañero del colegio, junto a una de sus mejores amigas y compañera del colegio Juan Manuel de Rosas de San Lorenzo. Cerca de las 5.30 un grupo de al menos nueve jóvenes mujeres ingresó al salón de la Municipalidad directamente a golpear a la menor y su amiga. "Las patearon por la cabeza y el cuerpo, estaban alcoholizadas, mi hija entró en shock y hasta el día de hoy no puede dormir tranquila, está con psicólogo", expresó M.R. madre de una de las víctimas. Según lo expuesto por la mujer, que amplió la denuncia realizada por su hija mayor el domingo 10 de este mes, dado que "fue mi otra hija la que salió en el auto cuando nos avisaron lo que había pasado y radicó la denuncia en San Lorenzo", una de las agresoras es exalumna del colegio Juan Manuel de Rosas de San Lorenzo. A la joven la echaron de la institución por violenta y al parecer desde ese momento tenía preparada la "venganza". La mujer contó que después de la golpiza ambas jóvenes tuvieron que ser internadas. "Mi hija estuvo dos días en la clínica Gemes, la llevé para que me la vieran y quedó internada", contó. "Esa chica -quien fue echada del colegio- tuvo varios problemas incluso con profesores de esa institución, la gota que rebalsó el vaso fue cuando un día le tiró los pelos a mi hija y casi la hace caer del colectivo, ahí tuve que hacer una exposición en la policía. Fue la acumulación de hechos de violencia contra mi hija y otras personas lo que determinó que la sacaran del colegio, de todos modos las agresiones y amenazas siguen a través de redes sociales y compañeros de mi hija", le contó a El Tribuno M.R.

Alcanzaste el límite de notas gratuitas
inicia sesión o regístrate.
Alcanzaste el límite de notas gratuitas
Nota exclusiva debe suscribirse para poder verla

Entre burlas y amenazas de quienes castigaron con brutalidad a su hija menor, una madre pasa los días al borde de la desesperación. El sábado 9 del corriente mes la joven fue al cumpleaños de un compañero del colegio, junto a una de sus mejores amigas y compañera del colegio Juan Manuel de Rosas de San Lorenzo. Cerca de las 5.30 un grupo de al menos nueve jóvenes mujeres ingresó al salón de la Municipalidad directamente a golpear a la menor y su amiga. "Las patearon por la cabeza y el cuerpo, estaban alcoholizadas, mi hija entró en shock y hasta el día de hoy no puede dormir tranquila, está con psicólogo", expresó M.R. madre de una de las víctimas. Según lo expuesto por la mujer, que amplió la denuncia realizada por su hija mayor el domingo 10 de este mes, dado que "fue mi otra hija la que salió en el auto cuando nos avisaron lo que había pasado y radicó la denuncia en San Lorenzo", una de las agresoras es exalumna del colegio Juan Manuel de Rosas de San Lorenzo. A la joven la echaron de la institución por violenta y al parecer desde ese momento tenía preparada la "venganza". La mujer contó que después de la golpiza ambas jóvenes tuvieron que ser internadas. "Mi hija estuvo dos días en la clínica Gemes, la llevé para que me la vieran y quedó internada", contó. "Esa chica -quien fue echada del colegio- tuvo varios problemas incluso con profesores de esa institución, la gota que rebalsó el vaso fue cuando un día le tiró los pelos a mi hija y casi la hace caer del colectivo, ahí tuve que hacer una exposición en la policía. Fue la acumulación de hechos de violencia contra mi hija y otras personas lo que determinó que la sacaran del colegio, de todos modos las agresiones y amenazas siguen a través de redes sociales y compañeros de mi hija", le contó a El Tribuno M.R.

Cegadas de violencia

Una vez en el interior del salón que "pertenece a la Municipalidad de San Lorenzo", donde no había ningún tipo de custodia, la joven agresora junto a un grupo de ocho chicas buscaron directamente a la hija de M.R., quien estaba junto a su compañera y mejor amiga, "y comenzaron a patearlas con una violencia extrema". Ante semejante escenario algunos compañeros de las víctimas intentaron cubrirlas entre varios "pero también terminaron con lesiones, los rasguñaron en la cara y el cuerpo".

Los muchachos lograron llevar a las jóvenes a una cocina del lugar donde las escondieron abajo de una mesada, relató M.R. sollozando. "En se momento contaron que llamaron varias veces a la policía y no pudieron hacerles entender que atravesaban un momento de furia extremo, la policía nunca llegó al lugar", resaltó. La madre de "la compañera de mi hija fue a buscarlas, hasta ese momento la situación era muy grave, las chicas estaban golpeadas". Después de la golpiza radicaron la denuncia en San Lorenzo que con el correr de las horas cada madre se encargó de ampliar.

“Se burlan hasta de la Justicia”

“Mañana -por hoy- voy a hablar con las autoridades del colegio para desvincular a mi hija de ahí, no quiere saber nada con seguir en ese colegio”, contó M.R. en alusión al cambio de institución escolar porque “mi hija quedó muy mal, recién hoy -por ayer- la pude sacar a comer, está con tratamiento y no quiere volver a San Lorenzo”.

En medio de todas las pruebas colectadas por una de las denunciantes, se observan capturas de redes sociales donde el grupo agresor, entre mujeres y hombres, se burla “hasta de la Justicia” y amenaza no solo “a mi hija menor sino también a la mayor”, sostuvo la madre de una de las víctimas.

La preocupación pasa porque al cabo de una semana del hecho “no sabemos si la Policía hizo algo, esa madrugada nunca llegó y cuando fuimos a ampliar la denuncia el que me la tomó me dijo que no podían hacer nada, que esas chicas son muy violentas y hubo casos hasta de apuñalados. Es una locura, me pregunto, ¿qué tenemos que hacer?”.

PUBLICIDAD