¿Quieres recibir notificaciones de alertas?

13°
3 de Mayo,  Salta, Centro, Argentina
PUBLICIDAD

Rodolfo Gallo Cornejo: “El problema es que el salto de la secundaria a la universidad se hace cada vez más grande”

Domingo, 26 de agosto de 2018 21:44

Rodolfo Gallo Cornejo cumplió la primera mitad de su mandato como rector de la Universidad Católica de Salta, donde estudian unos 26 mil alumnos. Se mostró conforme con la tarea realizada hasta ahora, aunque dice que aún faltan cosas por hacer. Su gran desafío en los próximos dos años que le quedan es la renovación tecnológica en la casa de estudios. “Eso ha sido una ventaja competitiva de nuestra universidad y no la queremos perder”, expresó. 

Alcanzaste el límite de notas gratuitas
inicia sesión o regístrate.
Alcanzaste el límite de notas gratuitas
Nota exclusiva debe suscribirse para poder verla

Rodolfo Gallo Cornejo cumplió la primera mitad de su mandato como rector de la Universidad Católica de Salta, donde estudian unos 26 mil alumnos. Se mostró conforme con la tarea realizada hasta ahora, aunque dice que aún faltan cosas por hacer. Su gran desafío en los próximos dos años que le quedan es la renovación tecnológica en la casa de estudios. “Eso ha sido una ventaja competitiva de nuestra universidad y no la queremos perder”, expresó. 

La crisis económica que atraviesa el país, ¿de qué manera repercute en la universidad privada?, ¿en lo que va del año hubo pérdida de matrícula?
Curiosamente no, si bien la crisis tiene una profundidad importante hasta ahora no ha habido una afectación en matrícula. Hay una valoración de lo que implica la educación superior dentro de la familia, como desarrollo personal y en tiempo de crisis cobra mayor importancia el hecho que alguien pueda continuar sus estudios universitarios. 

Uno de los ejes de su gestión era dar el salto a la excelencia académica, en estos dos años y medio se logró subir algunos escalones en la calidad educativa...
Hemos intentando mejorar un montón de estándares y medir la satisfacción de nuestros alumnos en el desempeño áulico, todos esos indicadores han sido positivos. Todavía hay un trabajo importante para hacer en ese campo y a su vez alguna de las devoluciones que hemos tenido de los procesos de acreditación nos da la certeza de que estamos por el buen camino. Tenemos arquitectura y veterinaria acreditadas por seis años, que es el máximo tiempo que puede tener una carrera. Instauramos un lema: “la calidad ha llegado a la universidad para quedarse”, no es una moda la calidad sino que es una forma de trabajar y pensar la universidad. Entendemos que es un proceso que no está agotado y que todavía nos falta varias etapas para la excelencia académica.

La Ucasal había lanzado un Plan Estratégico a 2020. ¿Qué metas se lograron cumplir y cuáles aún siguen pendientes?
Acabamos de hacer una revisión del plan estratégico. Hay algunos puntos fuertes: el proceso de internalización de la universidad, hoy contamos casi con 30 alumnos en el exterior y unos 25 extranjeros estudiando en Ucasal. Nuestro programa de becas para movilidad estudiantil apunta también a profesores, investigadores y personal administrativo. El proceso de despapelización, queremos que todo sea más eficiente, más rápido y hacer una universidad más sustentable. Se va generando una cultura dentro de la universidad en el uso de las tecnologías. Estamos pronto de inaugurar el parque solar que nos va a proveer casi el 35% de la energía eléctrica, seremos la primera universidad del país con parque solar. De hecho estamos creando una carrera que es licenciatura en Gestión de la Energía. Empezamos hace dos semanas con la capacitación del personal y la profesionalización. La renovación tecnológica es otro gran desafío en los próximos dos años. Eso ha sido una ventaja competitiva de nuestra universidad y ese liderazgo no lo queremos perder. 

El gran desafío de las universidades, tanto públicas como privadas, es disminuir la deserción para lograr un aumento de la graduación. ¿Por qué es tan difícil lograr esto?
El ingreso al sistema universitario argentino no tiene, salvo medicina, examen de ingreso. La deserción en las carreras con examen de ingreso es mucho menor que las carreras irrestrictas. A la universidad llega gente con diferente grado de preparación, claramente el secundario no prepara al alumno para dar el salto grande, esto no es novedad, el problema es que el salto se hace cada vez más grande. Estamos trabajando en un programa nexo financiado por Nación para tratar de ayudar a cerrar esta brecha entre secundario y universidad. Tenemos tres cursos gratuitos online para cualquier chico en matemática, comprensión lectora y orientación vocacional. Otra iniciativa es la “mesa de mentores” para distancia con la que se detecta y ayuda al chico durante el primer año, entre otras acciones. 

¿Cuál es el nivel de deserción?
Por encima del 30 por ciento y esos son indicadores de los cuales no estamos contentos. Un problema es el ingreso masivo, esas cifras bajan a menos del 7 por ciento en carreras con examen. 
Sobre la graduación universitaria usted había dicho que la tesis muchas veces es una barrera a la hora de recibirse. En estos dos años y medio, cuántos estudiantes se lograron recuperar y se graduaron o están por finalizar...
Depende de cada carrera, en algunos casos se han puesto tutorías especiales para hacer el seguimiento de los alumnos que terminaron de cursar y tenían pendiente la tesis. Un tutor que esté encima y los ayude metodológicamente para que puedan terminar. Sí, nos empezamos a preguntar cuál era el valor de la tesis y si no era imprescindible cuando se haga un nuevo plan de estudios no contemplarla y generar las competencias de investigación a través de otras vías. De cada 100 alumnos que egresan probablemente uno, y no se si exagero, se dedicará a la investigación. 

¿Cuál es el promedio de graduación anual?
El 20%, no es alta en estándares internacionales, pero sí en Argentina. 

Hay carreras con mucha demanda pero poca salida laboral, como por ejemplo Higiene y Seguridad, ¿cómo maneja este tema?
Una encuesta el año pasado sobre todos nuestros graduados nos dio un índice de empleabilidad del 95%. Altísimo. Que los egresados de Higiene y Seguridad no tengan trabajo me llama fuertemente la atención porque es una exigencia que en todos los lugares haya un responsable, nosotros tenemos, todos tienen uno. Nuestros graduados de Higiene y Seguridad sí tienen trabajo, tendríamos que hacer un rechequeo sobre ese grupo. 

Un tema que generó polémica es el recorte de incumbencias...
Fue un tema de interpretación. Hicimos reuniones con los colegios de Arquitectos y de Ingenieros para aclarar. Nos pareció que no hubo un manejo adecuado de la información. Lo que sacó el Ministerio son las actividades reservadas que no tiene que ver con la incumbencia profesional. Las profesiones y las carreras empiezan a tomar diferentes caminos que yo creo que enriquecen, no me parece una reducción de la profesión sino al contrario, abre el horizonte de los profesionales que ya no tienen que limitarse solamente a un pequeño campo disciplinar.

¿Cuántas becas se dieron este año?
Destinamos el 10 por ciento de nuestro presupuesto a becas y reducciones arancelarias, hacemos un esfuerzo enorme porque entendemos que dar oportunidades es una obligación como universidad católica. No recibimos ningún tipo de subsidio en eso, sí tenemos ayuda del Banco Macro y otras instituciones que han apostado más. Nosotros hacemos un seguimiento y acompañamiento de tal manera que su trayectoria sea exitosa. 

La UCA advirtió que la pobreza va a seguir creciendo y que afecta principalmente a los niños...
El deterioro de los indicadores que implica personas que entran a la pobreza o a la indigencia son un flagelo, son números de vergüenza en nuestra sociedad y el trabajo más importante que tenemos. No hay otro desafío más importante que disminuir drásticamente la pobreza. En los indicadores, Salta siempre está entre las provincias más pobres y ¿qué estamos haciendo para superar eso? Las dos universidades salteñas tenemos la obligación de aportar soluciones para el desarrollo real de la provincia, para que esos indicadores empiecen a bajar porque pasan los años, y más allá de la buena intención, los indicadores no mejoran. En la Ucasal financiamos 25 proyectos de extensión en zonas complejas.

La Iglesia inició tratativas con el Gobierno por los subsidios...
Como universidad católica no tenemos ningún tipo de subsidio. La decisión de la Conferencia Episcopal de bajar los aportes no tengo una opinión. Si los obispos deciden bajarlo vamos a apoyar y los católicos tenemos que sostener nuestro culto, yo no tengo ningún problema en eso y de hecho se están proponiendo iniciativas de países europeos de que una parte de los impuestos pueda ir voluntariamente a una ONG o al sostenimiento del culto. 
.
.

 

PUBLICIDAD