Las fiestas de fin de año reviven en notas, informes y recomendaciones periodísticas sobre lo que hay que comer y lo que no, para no reventar en los atracones. Artículos que cualquier zampatortas o zampabollos los llegan a leer sin el más ánimo de querer entender.
Por otro lado, este año viene más difícil que los anteriores por los que las despedidas para este nefasto 2020 serán con todas las ganas y eso incluye planificaciones anticipadas de cuchipandas obscenas.
“Si sobrevivimos a este año somos inmortales”, dicen los que ya tienen el amplio menú de Navidad y Año Nuevo; y cuentan con todos los argumentos a su favor. Le están ganando por primera vez a la incertidumbre y por eso duplican los festejos, las comidas, las bebidas y la entrega a todo tipo de excesos. Despilfarro de satisfacciones terrenales por las cuales es el cuerpo el que tiene que pagar la cuenta al final.
“No hay dudas que muchos festejarán en exceso la finalización de este 2020. Muchos perdieron a familiares, a un amigo o amiga. Otros perdieron negocios, perdieron planes, proyectos, oportunidades; eso se entiende porque fue un año excepcional. No podemos ir en contra de esa idea. El tema principal es no irse a los extremos. Entendemos que son dos días de excesos, pero lo importante será el día después y cómo comenzamos a cambiar los hábitos de nuestra alimentación”, dijo la licenciada en Nutrición, Soledad Schanz, M.P. 336, del Centro Médico UAM (Unidades de Atención Médica) de Salta.
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Las fiestas de fin de año reviven en notas, informes y recomendaciones periodísticas sobre lo que hay que comer y lo que no, para no reventar en los atracones. Artículos que cualquier zampatortas o zampabollos los llegan a leer sin el más ánimo de querer entender.
Por otro lado, este año viene más difícil que los anteriores por los que las despedidas para este nefasto 2020 serán con todas las ganas y eso incluye planificaciones anticipadas de cuchipandas obscenas.
“Si sobrevivimos a este año somos inmortales”, dicen los que ya tienen el amplio menú de Navidad y Año Nuevo; y cuentan con todos los argumentos a su favor. Le están ganando por primera vez a la incertidumbre y por eso duplican los festejos, las comidas, las bebidas y la entrega a todo tipo de excesos. Despilfarro de satisfacciones terrenales por las cuales es el cuerpo el que tiene que pagar la cuenta al final.
“No hay dudas que muchos festejarán en exceso la finalización de este 2020. Muchos perdieron a familiares, a un amigo o amiga. Otros perdieron negocios, perdieron planes, proyectos, oportunidades; eso se entiende porque fue un año excepcional. No podemos ir en contra de esa idea. El tema principal es no irse a los extremos. Entendemos que son dos días de excesos, pero lo importante será el día después y cómo comenzamos a cambiar los hábitos de nuestra alimentación”, dijo la licenciada en Nutrición, Soledad Schanz, M.P. 336, del Centro Médico UAM (Unidades de Atención Médica) de Salta.
La idea de la nutricionista es que en un año como este no se puede pedir y ser rigurosos con las tradicionales prohibiciones. Como si acaso la única certeza que tenemos para el futuro es que podremos festejar a fin de año. (Y que esto no se convierta en el canto de un pájaro de un mal agüero).
Todo el año trabajó con una “explosión” de consultas de gentes que llegó para ver cómo hacía para mejorar la nutrición en los tiempos de cuarentena.
“En lo particular pude observar como dos características bien marcadas en las actitudes de las personas que llegaron al consultorio en medio de la pandemia. Por un lado están los que por el aislamiento cambiaron todos los hábitos y empeoraron con la alimentación por la desorganización en la comida. Hubo muchos casos de angustias y miedos y eso afectó directamente con lo que comíamos. Por otro lado estuvieron lo que al tener más tiempo en casa pudieron organizarse ante la necesidad de saber la importancia del comer sano para prevenir el virus que nos está atacando”, dijo la licenciada.
En detalle
Quizás lo más grave de la cuarentena fue la suspensión de las actividades físicas. “Hubo una explosión de consultas sobre cómo mejorar la nutrición. Muchas fueron precisamente porque de pronto dejamos de tener actividad física. A pesar de todo lo malo, comenzó la inquietud sobre la importancia de comer sano para enfrentar de mejor manera la pandemia; esto de la importancia de prevenir comenzó a surgir. Y en este punto debemos entender que hay otros factores que complementan la buena alimentación. Uno es la actividad física, el sol, las horas de descanso. Todo eso se tuvo que ordenar en medio de una cuarentena global”, explicó.
Las noticias sobre la alta tasa de muerte en aquellos pacientes obesos también provocó preocupaciones, miedos y angustias.
“Se entienden las tradicionales comilonas y atracones. Fue un año difícil para todos por lo que se pide que no se vaya al extremo y que la fiesta dure mientras duren las fiestas de fin año. Debemos comenzar luego a hacer énfasis en cambiar los hábitos de nuestras comidas, a organizarnos en las compras, las actividades físicas, las horas de sueño y hasta las salidas al aire libre a tomar sol. Esperemos que sea dentro de un mejor año”, concluyó la nutricionista.
Una propuesta salteña para la cena más sana
El Programa de Nutrición 2020 del Hospital Dr. Arturo Oñativia se puso como objetivo acercarle a la población ideas de recetas para brindarle una herramienta más para poder poner en práctica una alimentación saludable.
“Hicimos un recetario con alimentos saludables para las fiestas de fin de año. Es todo parte de un trabajo en conjunto”, dijo la licenciada Virginia Pamparana, Jefa del Programa de Nutrición del Hospital Oñativia.
La iniciativa salió luego de realizar una encuesta de satisfacción en la atención virtual en el consultorio externo de nutrición y de obtener los resultados del trabajo de investigación “Descripción de hábitos alimentarios, cambios de peso corporal y practica de actividad física durante la cuarentena en situación de emergencia COVID 19”.
Recetas Navideñas (4) by El Tribuno on Scribd
Se debe advertir que al recetario de Navidad lo anteceden 3 versiones en diferentes estaciones del año realizado por todo el equipo y plasmo su innovación y diseño la licenciada en Nutrición Adela Fuentes.
El trabajo de investigación citado fue realizado por la licenciada en Nutrición, Florencia Albarracin. El mismo es un estudio descriptivo que tomó como periodo el análisis de los últimos 30 días del confinamiento obligatorio del úlitmo junio. Se obtuvieron 1054 respuestas y el mismo se realizó con la población salteña. El resultado más alarmante fue que aproximadamente la mitad de los encuestados refirió aumento de peso, lo que motivo a todo el equipo a seguir trabajando con estrategias de educación nutricional para continuar promoviendo el desarrollo de nuevos y buenos hábitos alimentarios en la familia.
Los turnos están disponibles llamado al 148. Se trabaja en forma interdisciplinaria con el Programa de Nutrición Clínica, Programa de Nutrición, Salud Mental, Kinesiología para el abordaje de obesidad y sobrepeso.