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En el marco del COVID-19 pidieron arresto domiciliario para Reynoso

Tras haber sido absuelto, Raúl Reynoso insiste con la prisión domiciliaria. Por otra parte, el fiscal federal Carlos Amad apelará el fallo del Tribunal Oral Federal 2.
Sabado, 21 de marzo de 2020 00:00

Después de haber sido absuelto en el segundo juicio que se realizó en su contra, el exjuez de Orán, Raúl Reynoso, junto a su abogado Matías Gutiérrez Perea, defensor Público Oficial Federal de Jujuy, solicitaron al Tribunal Oral Federal 1 de esta provincia, un nuevo pedido de arresto domiciliario. Solicitud que se realizó el jueves último en el marco de la pandemia que pone en riesgo a la población mundial y, según el letrado, a personas privadas de su libertad como el exmagistrado.

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Después de haber sido absuelto en el segundo juicio que se realizó en su contra, el exjuez de Orán, Raúl Reynoso, junto a su abogado Matías Gutiérrez Perea, defensor Público Oficial Federal de Jujuy, solicitaron al Tribunal Oral Federal 1 de esta provincia, un nuevo pedido de arresto domiciliario. Solicitud que se realizó el jueves último en el marco de la pandemia que pone en riesgo a la población mundial y, según el letrado, a personas privadas de su libertad como el exmagistrado.

Un día después -jueves pasado- que el Tribunal Oral Federal 2 decidió absolver al exjuez y otras tres personas de manera unánime y a través del beneficio de la duda, el abogado defensor de Reynoso mandaba vía correo electrónico la nueva solicitud para por la prisión domiciliaria. Hay que recordar que el exmagistrado norteño fue condenado el año pasado a cumplir una pena de 13 años por favorecer a narcotraficantes con resoluciones judiciales a cambio de dinero y bienes. Actualmente Reynoso se encuentra detenido en el Complejo Federal Penitenciario III de General Gemes.

"No es la primera vez que pedimos el arresto domiciliario, por la situación de salud de Reynoso desde hace tiempo que se lo viene solicitando pero le deniegan esa posibilidad", dijo en comunicación telefónica el defensor técnico del exjuez, Gutiérrez Perea. "Hicimos un nuevo pedido acá -en Salta- por la salud del doctor y teniendo en cuenta la situación social que atravesamos con el coronavirus", agregó.

El pedido se realizó en el Tribunal Oral Federal 1 de esta provincia en virtud de la situación de salud en que se encuentra Reynoso, según surge del informe remitido por el penal padece: hipertensión arterial y diabetes tipo I y II. A eso se suma el contexto actual que atraviesa el planeta con la amenaza del coronavirus, en ese sentido "ha sido considerado por el mismo penal como paciente con riesgo para su salud, respecto a la actual pandemia declarada por la Organización Mundial de la Salud, la Organización Panamericana de la Salud y a la cual nuestro país adhirió mediante Decreto 260/2020", según señala el texto presentado.

Una vez presentada la solicitud el Tribunal puede desestimarlo, como hizo en alguna otra ocasión, pasa que ahora hay un nuevo argumento por parte del exjuez. Lo que también puede suceder es que el Tribunal corra vista de la solicitud al Ministerio Público Fiscal, donde tendrán tres días para contestar y una vez resuelto la resolución según el Código debería resolver de forma "inmediata". Hay que tener en cuenta también que los pedidos de arresto domiciliario se encuentran en Casación, por lo tanto desde el Tribunal podría desatender el pedido y señalar que lo resuelvan en Casación. Sin embargo, se trata de un nuevo pedido con un argumento distinto a los anteriores.

"Habíamos pedido la absolución lisa y llana pero entendemos que el beneficio de la duda es un recurso que los tribunales suelen usar. Pensamos que el caso tenía serias deficiencias de pruebas, estaba mal calificado" sostuvo Matías Gutiérrez Pera, quien se hizo cargo desde la instancia de casación tras el primer juicio contra Reynoso, en aquella oportunidad el letrado norteño contaba con un defensor particular.

En el juicio Reynoso II, el exmagistrado llegó acusado en 42 hechos o causas, tras la apelación quedaron 7 y en el inicio de las audiencias, el 10 de febrero, la defensa planteo la prescripción de algunas otras y quedaron dos: falsificación de instrumentos públicos de Delfín Castedo, capo narco detenido en Ezeiza desde donde siguió las audiencias, y el segundo hecho por cohecho y concusión por la supuesta autorización del pase de camiones con mercadería de Bolivia para el comerciante Pablo Torres.

Carlos Amad: “El fallo es una vergüenza”

Irá a casación dado que no se podía desconocer lo que pasaba en el Juzgado Federal Orán.

A comienzos del corriente mes el fiscal Carlos Amad solicitó 10 años de prisión para el exjuez Raúl Reynoso por los delitos de cohecho, falsificación de instrumento público y concusión. Además, pidió cuatro años de cárcel para el narcotraficante Delfín Castedo, el abogado Luciano Ciscato y el empleado judicial Miguel Saavedra. El miércoles pasado todos fueron absueltos por el beneficio de la duda. “El fallo es una vergüenza”, apuntó el fiscal federal en diálogo con este medio.

“De lo único que no se podía dudar era de que el señor ese era juez federal de Orán y que poner en duda eso era poner en duda todo lo que hizo”, sostuvo el encargado de acusar y pedir sentencia a los imputados norteños. Al mismo tiempo manifestó que “dudar de que podía desconocer lo que pasaba en un lugar que él conducía con mano de hierro es infantil, es como querer tapar el sol con la mano”. Por último, y sin pelos en la lengua, el fiscal concluyo: “El Tribunal Oral Federal aprovechó este día -por la jornada en que se dictó la sentencia- para consagrar el escándalo”.

El 8 de abril se conocerán los fundamentos que el Tribunal Oral Federal 2 deberá esgrimir para justificar la absolución a Reynoso y el resto de los imputados. Desde ese momento la Fiscalía tendrá 10 días para presentar el recurso de casación contra la sentencia, recurso que será tratado por el máximo Tribunal Penal del país. Los escenarios posibles son: anular el fallo lo que implicaría dictar un nuevo fallo ajustado a derecho y si lo “casa” el fallo podría modificarse, pueden condenar o confirmar la sentencia.

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