Los cambios que llegan al Ministerio Público Fiscal representan un retroceso en la calidad institucional y apelan a la memoria de los salteños por un caso de tuvo tristemente como protagonista a Gabriela Buabse.
Según se informó oficialmente desde el Ministerio Público Fiscal, el procurador general de la Provincia, Pedro García Castiella, dispuso cambios en la dirección del Cuerpo de Investigaciones Fiscales, “con el objetivo de lograr una nueva coordinación con las demás estructuras del Ministerio Público Fiscal”. En este marco, la controvertida fiscal penal Gabriela Buabse, retorna como titular del Cuerpo de Investigaciones Fiscales (CIF).
inicia sesión o regístrate.
Los cambios que llegan al Ministerio Público Fiscal representan un retroceso en la calidad institucional y apelan a la memoria de los salteños por un caso de tuvo tristemente como protagonista a Gabriela Buabse.
Según se informó oficialmente desde el Ministerio Público Fiscal, el procurador general de la Provincia, Pedro García Castiella, dispuso cambios en la dirección del Cuerpo de Investigaciones Fiscales, “con el objetivo de lograr una nueva coordinación con las demás estructuras del Ministerio Público Fiscal”. En este marco, la controvertida fiscal penal Gabriela Buabse, retorna como titular del Cuerpo de Investigaciones Fiscales (CIF).
Buabse, es tristemente recordada cuando en su carácter de directora del CIF, rubricó un informe polémico sobre una causa en donde dos nenas habían sido abusadas por el mismo hombre a fines de 2011, de acuerdo a la denuncia de sus padres. El CIF intervino en la investigación y concluyó que una de las víctimas, de 9 años, “no se muestra como niña sino que se ubica más bien en un lugar de mujer, mostrando un cuerpo desarrollado que puede llegar a ser objeto de deseo”.
En el mismo documento se aplicaba un sesgo descalificador y de escaso contenido técnico hacia la madre de la niña, al señalar que podía percibirse en ella “mayor interés en el castigo que pueda recibir el acusado, que en las consecuencias que trae dicho suceso a su hija.
Cuando el informe trascendió a la opinión pública, Gabriela Buabse, ya había sido propuesta como fiscal penal ante el Senado y su designación estaba pendiente de los legisladores, que tenían el si, previamente acordado. En su defensa, la aspirante señaló que el polémico informe “fue confeccionado por los técnicos y que ella se limitó solo a firmarlo”, luego se supo que se trató de empleados administrativos y que en el documento no intervino ningún profesional idóneo. Buabse había sido clara: “No quiero que mi honorabilidad se vea afectada con un informe que no realicé, pero que tuve que avalar porque soy la titular del CIF”. Lo que omitió aclarar es si compartía o no, tales apreciaciones. El entonces mandatario en vez de retirar los pliegos, salió a respaldarla, señalando a este medio como el responsable de una operación en contra de la aspirante a fiscal.
Es que el caso tomó trascendencia luego de que fuera publicado por El Tribuno, e inmediatamente fue repudiado por especialistas y medios de Salta y el país.
El mismo Inadi tomó intervención mediante un comunicado, apuntando a que en el informe de Buabse se pone de manifiesto un desconocimiento absoluto de los derechos del niño/a niña y adolescente que, en nuestro país, se encuentran garantizados por la Ley 26.061, de Protección Integral de los Derechos de las Niñas, Niños y Adolescentes y su decreto reglamentario 415/2006, ratificando y haciendo obligatoria, en todo el territorio nacional, la aplicación de la Convención de los Derechos del niño, por la cual los gobiernos nacionales se han comprometido a proteger y asegurar los derechos de la infancia y llevar a cabo todas las medidas y políticas necesarias para proteger el interés superior del niño/a.
El retorno de Buabse a la dirección del CIF, una persona que con su conducta ha traicionado la confianza que la sociedad deposita sobre los funcionarios públicos, deja mas dudas que certezas sobre cual será la nueva política a encarar por parte de ese organismo, sobre todo en tiempos en los que los femicidios y denuncias por violencia de género se han constituido en una pandemia en nuestra provincia y debieran ser la prioridad, así como la protección de nuestros niños, niñas y adolescentes.
El desplazamiento de Rivero
Según se pudo conocer en el día de hoy, quien se venía desempeñando en la dirección del CIF, era el el fiscal penal Pablo Rivero, habría sido desplazado por un incidente producido en el sector de la morgue.
Llamativamente, y en un hecho que no cuenta con antecedentes anteriores, “un descuido” impidió luego del peritaje correspondiente, la preservación del cuerpo del sospechoso del doble homicidio de la avenida Circunvalación Oeste.