Dos niñas, tía y sobrina, ambas de 13 años, sueñan con tener una familia como todo el mundo y ya no vivir como internas en hogares del Estado. Cursan el séptimo grado, una de ellas en una escuela especial y la otra en una común. La Justicia abrió una convocatoria pública para encontrar padres adoptivos para las dos chicas. En el caso interviene el juez de Primera Instancia en lo Civil de las Personas y Familia de 2ª Nominación, Víctor Soria.
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Dos niñas, tía y sobrina, ambas de 13 años, sueñan con tener una familia como todo el mundo y ya no vivir como internas en hogares del Estado. Cursan el séptimo grado, una de ellas en una escuela especial y la otra en una común. La Justicia abrió una convocatoria pública para encontrar padres adoptivos para las dos chicas. En el caso interviene el juez de Primera Instancia en lo Civil de las Personas y Familia de 2ª Nominación, Víctor Soria.
Matías Palomo, coordinador de equipos de la Secretaría Tutelar de la Corte de Justicia de Salta, en diálogo con el programa Sin filtro de Radio Salta, contó que en lo formal las niñas son "tía y sobrina, las dos tienen 13 años, se reconocen más desde un vínculo fraterno, casi como hermanas. Y las dos tienen un retraso mental moderado".
Se venía buscando un hogar para las dos juntas y como no fue posible ahora el juez decidió avanzar en la búsqueda por separado. "Después, cuando ambas estén insertas en una familia adoptiva, se trabajará un protocolo de vinculación", dijo.
Consultado sobre lo difícil que debe ser concretar adopciones de niñas o niños con alguna discapacidad o patología, aparte de la edad, Palomo señaló: "Compartimos con el resto de las provincias del país el perfil de los que están inscriptos para adoptar, buscan no más allá de la franja de los 3 y 4 años, chicos sin ninguna patología, sin ninguna discapacidad".
Pero los sueños y expectativas van mucho más allá que un diagnóstico. "Las niñas tienen un gran potencial como cualquier criatura, tienen deseos, aspiraciones, lo que necesitan es un ambiente familiar, no institucional", manifestó el psicólogo.
Sin desmerecer el trabajo que realizan las instituciones, donde la gente hace su mejor esfuerzo para contener en el día a día a los chicos, remarcó que "el ámbito de desarrollo normal de una persona es el ámbito familiar. La familia adoptiva se presenta como una especie de puente hacia un mejor proyecto de vida".
Desde la Justicia apelan a la humanidad de las personas interesadas en adoptar. Pidieron primero informarse bien y a partir de ahí tomar la decisión que cada uno crea conveniente.
Para información complementaria y asesoramiento las personas interesadas pueden contactarse con el Registro Único de Aspirantes a Guarda con Fines Adoptivos de Salta al correo regadop1@justiciasalta .gov.ar. Para ello deberán adjuntar la ficha de convocatorias públicas con los datos completos que podrán descargar de la web del Poder Judicial de Salta. También pueden comunicarse telefónicamente al 387- 4258026 o presentarse en la Secretaría Tutelar ubicada en Ciudad Judicial, edificio anexo I, planta baja, de lunes a viernes de 8 a 13.
"La adopción no está para darle hijos a personas que por distintos motivos no han podido tenerlos, sino está pensada para garantizar el derecho de niñas, niños y adolescentes a formar parte de una familia", advirtió Palomo.
Hoy hay 37 chicos declarados en situación de adoptabilidad, ninguno de ellos por debajo de la franja de seis años. "Eso nos tiene que interpelar como sociedad ha repensar los términos de la adopción, nosotros siempre tratamos de dialogar con quienes se acercan al registro sobre la importancia del rango etario. En este momento tenemos 37 chicos que necesitan una familia, pero no están dentro de ese parámetro del bebé. Eso nos interpela a rediscutir los términos de la adopción", planteó el psicólogo Palomo.