Un vuelo organizado por Enrique Piñeyro expuso una vez más la depredación en el Mar Argentino, por parte de barcos chinos, españoles y coreanos.
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Un vuelo organizado por Enrique Piñeyro expuso una vez más la depredación en el Mar Argentino, por parte de barcos chinos, españoles y coreanos.
El cineaste pilotó su propio avión e invitó a importantes medios nacionales para documentar la pesa ilegal a 200 millas de la costa argentina.
Infobae, La Nación y TN, entre otros medios, retractaron la gran cantidad de luces que emanan los barcos y buques pesqueros, como si se tratara de una ciudad en la inmensa oscuridad del mar.
LOS BUQUES SE OBSERVAN CON CLARIDAD DESDE LA CABINA DEL AVIÓN PILOTADO POR PEÑYRO. FOTO: FRANCO FAFASULI - INFOBAE
La lamentable escena ocurre a 200 desde la costa argentina, que marca el límite de la zona exclusiva de explotación (ZEEA). “De un lado, están las aguas internacionales, del otro, un área que según la Convención de las Naciones Unidas sobre el Derecho del Mar es nuestro. Sin embargo, decenas de buques se encuentran del lado en que no deberían, depredando el patrimonio y violando la soberanía nacional”, hace notar en su informe TN.
Y agrega: “La plataforma marítima argentina es una de las más amplias y ricas del mundo. Calamar, merluza, abadejo, anchoíta, caballa, corvina, langostino, sardinas, hay de todo. Y muchos son los que aprovechan su larga extensión para servirse sin respetar las reglas. La mayoría de los barcos viene de China, Corea del Sur, Taiwán y España”.
“Desde la primera vez que hice algún vuelo de Ezeiza a Ushuaia -hace más de 20 años- que ya vi esto. Además fue sin buscarlo, a más de 40 mil pies de altura. Pero con el tiempo fue creciendo la actividad y hoy parece la costa de Nueva York”, dice el propio Piñeyro en una entrevista en Infobae.
Los motivos que lo motivaron a generar este vuelo fueron muchos, pero sobre todo la indignación, esa fuerza poderosa. “Es un tema que no está resuelto. No se patrulla, no se puede vigilar a los barcos, no hay forma de interceptar, de disuadir. Falta logística y hay que darle el peso político que esto tiene. Esto es serio, es una depredación monstruosa”, añade.
LOS BARCOS PESQUEROS, EN EL LÍMITE DE LA ZONA ECONÓMICA EXCLUSIVA. FOTO: Fernando Gutierrez - La Nación
Luego, el piloto y empresario graficó una irónica situación con respecto a la pesa ilegal: “¿Querés langostinos argentinos? No, los pescan todos y se los llevan. Y no hay forma de competirles. Después vas por España o esos lugares y venden con un cartelito que dice ‘langostinos argentinos’, y acá terminamos comprando los ecuatorianos. ¿Entonces? Es un recurso bestial el de nuestro país, tenemos 5 mil kilómetros de costa”.
El avión que realizó este viaje especial es un Boing 787 gigantesco que hasta el año pasado pertenecía a Aeroméxico y ahora es de Enrique Piñeyro, a quien también se lo considera como un activista socioambiental. Lo adquirió justamente para poder hacer vuelos que generen algún tipo de impacto positivo en el planeta.