Ante la llegada del verano y las vacaciones hay productos que son más demandados que otros. Uno de ellos es el teléfono celular. Durante un relevamiento efectuado por El Tribuno en locales y casas de tecnología del microcentro se detectó que hay escasez de equipos. Los precios, además, están por las nubes. Un equipo muy básico se consigue a 40 mil pesos, lo que representa un 70% de un salario mínimo que hoy es de $57.900.
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Ante la llegada del verano y las vacaciones hay productos que son más demandados que otros. Uno de ellos es el teléfono celular. Durante un relevamiento efectuado por El Tribuno en locales y casas de tecnología del microcentro se detectó que hay escasez de equipos. Los precios, además, están por las nubes. Un equipo muy básico se consigue a 40 mil pesos, lo que representa un 70% de un salario mínimo que hoy es de $57.900.
En la mayoría de los negocios cuentan solamente con dos o tres modelos. "Lo que pasó es que para Navidad y Reyes Magos hubo mucha venta y ahora está complicado reponer stock", contó Marcos, vendedor de un local ubicado en la peatonal Florida.
En su caso solo contaba con dos alternativas, la más sencilla: el Samsung Galaxy A04 con cámara principal de 50 mp, frontal de 5 mp, memoria RAM de 4 GB y memoria interna (ROM) de 32 GB. Cuesta 40 mil pesos. Luego le sigue el Samsung Galaxy A13, también con cámara principal de 50 mp y con otras tres cámaras: ultraancha (5 mp), de profundidad y macro, estas últimas de 2 mp y memoria de 128 GB. El celular tiene un precio de 79 mil pesos.
Con relación a las formas de pago, hay tarjetas que ofrecen planes con cero interés y otras, algunas bancarizadas, que sí conllevan intereses si se financía en cuotas. En este último caso un teléfono celular Samsung Galaxy A04, en 12 cuotas, costará 55.596 pesos, es decir, 15.596 pesos más.
Diferentes precios
En el local de una compañía oficial de telefonía celular, ubicada en la calle Mitre, un celular Samsung Galaxy A04 cuesta $48.999 de contado efectivo, con tarjeta de débito o crédito pero en un pago. Si se opta por pagarlo en 12 cuotas, cada una tendrá un valor de $4.084. En el caso del modelo Samsung A13 el precio de contado efectivo, con débito o crédito en un pago es de $67.999. En 12 cuotas quedaría en $5.667 cada una.
La cámara de fotos es una de las características más valoradas en un celular, aunque también influyen otras como la pantalla, la memoria, procesador y la batería. Mientras más sofisticados sean, más se encarece el precio del teléfono.
De esta forma, en la misma compañia oficial un Samsung Galaxy A23 con memoria interna de 128 GB y cuádruple cámara trasera, la principal de 50 mp, cuesta $84.999. Otro modelo, el A53, con cuádruple cámara, la principal de 64 mp tiene un precio de $140.999. Con relación a las opciones de alta gama, hay modelos Galaxy con procesadores, pantallas, características de última tecnología y una certificación similar a la de un smarthpone. El S21 Fan Edition 5G de 128 GB cuesta $195.999 y el S22 Plus de 256 GB está valuado en $314.999.
En el caso de los teléfonos Motorola, uno de los más accesibles, el Moto G22 con memoria interna de 128 GB y sistema de cuatro cámaras, la principal con 50 mp, cuesta $65.999. En tanto, uno de los últimos modelos de alta gama, el Motorola Edge 30 Pro 5G con características de smartphone tiene un precio de $219.999.
En algunos locales es posible encontrar modelos que si bien no son de los últimos lanzados, pueden resultar un poco más accesibles. En un stand de una galería cercana a la plaza 9 de Julio, un Samsung Galaxy A03 de 32 GB cuesta 43 mil pesos y un Motorola E22 de 32 GB tiene un precio de 45 mil pesos de contado efectivo. Con la mayoría de las tarjetas de crédito se cobra interés, a excepción de una que otorga la posibilidad de un plan de pago.
"A la hora de comprar un celular la gente compara mucho los precios. Lo más importante es pensar en la utilidad que uno le va a dar, lo que hace con el teléfono de forma cotidiana", explicó Matías, un vendedor.
Añadió que la mayoría busca una buena cámara de fotos, aunque algunos clientes le prestan atención al peso y el tamaño por una cuestión de comodidad.