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15 de Mayo,  Salta, Centro, Argentina
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Un salteño que vive en Israel dijo que "hay un caos total y es bastante duro"

El testimonio del salteño Fernando Palacios, desde Beerseba, al sur de Israel, donde pasa estas horas con su familia. 
Domingo, 08 de octubre de 2023 19:44

Fernando Palacios (50) es salteño y desde hace tres años vive con su familia en la ciudad de Beerseba, al sur de Israel, ubicada a 40 kilómetros de la Franja de Gaza, donde el sábado último se desató el horror de los bombardeos. Fernando brindó en exclusiva su testimonio a El Tribuno de cómo enfrenta junto a su familia estos momentos de extrema tensión.

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Fernando Palacios (50) es salteño y desde hace tres años vive con su familia en la ciudad de Beerseba, al sur de Israel, ubicada a 40 kilómetros de la Franja de Gaza, donde el sábado último se desató el horror de los bombardeos. Fernando brindó en exclusiva su testimonio a El Tribuno de cómo enfrenta junto a su familia estos momentos de extrema tensión.

En Beerseba, las calles se mantienen desiertas por precaución. Fernando describió el domingo como relativamente calmo, pero recordó con detalle la angustia del día anterior: "Ayer (por el sábado) fue un día bastante complejo, bastante complicado porque nos despertamos a las 6 de la mañana con las sirenas, con bombardeos, y esto, en mi ciudad, fue como hasta las 13, 14 horas, las sirenas sonaban cada 10, 20 minutos y caían los misiles", relató.

La suerte de Fernando radica en un búnker antiaéreo en su propio departamento, donde, cuando suenan las alarmas, refugia a su familia: su esposa y su hijo Benjamín de 14 años. Sin embargo, no todos tienen esa seguridad: "Hay edificios que no tienen una habitación de seguridad y la gente debe bajar a la planta baja o encontrar un búnker afuera". Es el caso de sus suegros (su suegro es el conocido mago Sammy) y su hija mayor Florencia, con su esposo y su bebé que tuvieron que refugiarse en lo de Fernando.

"Se vivieron momentos de tensión, que te suene la alarma cada 10 minutos te vuelve loco. Hay gente que tenía que correr bajando escaleras, hay gente que no llegaba porque tenés a veces un minuto, un minuto y medio, hasta que cae el misil y estar alojado, entonces algunos se quedaban a mitad de las escaleras para protegerse", añadió.

Además, describió: "El ruido de las sirenas es ensordecedor, después que suenan tenés que estar 10 minutos sin salir del búnker porque en ese momento te caen los misiles, y el ruido de los misiles es una cosa de locos, acá se escuchó muchísimo, es durísimo".

La tensión es constante, con momentos críticos que reviven experiencias pasadas: "Yo ya había vivido algo similar al poco tiempo que llegué a Israel. Vivía en otro edificio donde debía bajar dos pisos para llegar al búnker. Era un caos total, te agarraba en cualquier hora de la madrugada, estuve una semana así".

La verdadera amenaza va más allá de los misiles: los terroristas infiltrados generan pánico en las calles y hogares. "Como hay infiltrados, terroristas que entraron por vía aérea, en paracaídas, por mar y túneles, invadieron las casas y las ciudades de Israel; andaban por las calles y mataban al que se le cruzaba. Hay imágenes durísimas, si uno dimensiona el tema es para volverse locos, te querés tomar un avión y volverte a la Argentina o irte donde sea urgente", describió.

"Mataban a civiles, mujeres, niños, ancianos. Era un caos total. Uno se mentaliza, pero es bastante duro", confiesa Fernando. El sistema antiaéreo llamado "Cúpula de Hierro" brinda cierta confianza, pero la realidad es cruda: "Algunos misiles pasan y ciudades enteras están destrozadas. Al día de hoy, se habla de 700 muertos, 2.500 heridos, 200 desaparecidos y secuestrados", dijo el salteño.

En este clima de tensión, Fernando y su familia se aferran a la calma, buscando enfrentar lo inimaginable. "Vivimos hoy tranquilo, pero hay un clima de tensión. Las rutas están colapsadas con soldados y se esperan días complicados. "Vinimos a Israel por un futuro mejor para nuestro hijo, acá tiene más posibilidades y herramientas, y a pesar de todos los problemas seguimos con la idea de quedarnos aquí y no volver a la Argentina, menos en las condiciones económicas que ahora está el país".

Sobre las diversas actividades, comentó que estas empiezan los domingos en Israel. "Es el primer día de la semana pero se suspendieron las clases hasta nuevo aviso, los trabajos solo lo esencial, a partir de mañana se reanudan las actividades laborales parcialmente según la ciudad y la necesidad, veremos qué pasa esta semana, si la situación se calma o se empeora", cerró.

Ubicación de Beerseba

Beerseba, donde vive el salteño con su familia, queda a 40 kilómetros de la Franja de Gaza, donde se desataron los ataques. Es una ciudad ubicada a 108 kilómetros al sur de Tel Aviv. 

 

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