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Un musical de títeres mecánicos gigantes, una buena opción en la Usina Cultural 

Se trata de la obra “Idomeneo, la furia de Neptuno”, basada en una ópera de Mozart. Habrá funciones sábado y domingo, a las 16 y 18.
Jueves, 13 de julio de 2023 11:08

El próximo sábado y domingo, a las 16 y a las 18, se presentará en la Usina Cultural de calle España 1-98, ciudad de Salta, el espectáculo teatral y de música en vivo titulado “Idomeneo, la furia de Neptuno”. 

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El próximo sábado y domingo, a las 16 y a las 18, se presentará en la Usina Cultural de calle España 1-98, ciudad de Salta, el espectáculo teatral y de música en vivo titulado “Idomeneo, la furia de Neptuno”. 

Se trata de una propuesta de la compañía de teatro “La Faranda”, basada en una ópera de Wolfgang Amadeus Mozart. Es recomendada para niños mayores de 5 años y para compartir en familia.  


La Faranda está integrada por Claudia Peña y Fernando Arancibia, quienes en esta oportunidad son acompañados por los jóvenes músicos suizo-argentinos Simón, Celina y Santiago Seghezzo, encargados ponerle melodía a la historia con sus violines, clarinetes, fagot y piano. Simón es responsable de la adaptación y los arreglos musicales. 

Vale la pena poner de relieve que, se trata de los hijos del oboista salteño David Seghezzo, formado en la Escuela de Música de la Provincia y radicado en Europa desde hace mucho años, donde integra la Sinfonieorchester Basel (Orquesta Sinfónica de Basilea), orquesta sinfónica con sede en Basilea, Suiza.


“Ideomeneo, la furia de Neptuno”


Claudia Peña, en diálogo con El Tribuno contó: “Se trata de una puesta en escena de títeres mecánicos gigantes y de manipulación directa, en el marco de una imponente escenografía que incluye la utilización de técnicas audiovisuales y de teatro de sombras”.

En cuanto a la trama de la historia, Peña relató: “Se desarrolla en un universo fantástico. Cuenta el regreso del rey Idomeneo después de 10 años de guerra en Troya. Cuando están cerca de Creta se desata una feroz tormenta. Idomeneo, desesperado, le hace una promesa a Neptuno para salvar a sus guerreros. Entonces, de repente, todo queda en calma y consiguen llegar a destino. Sin embargo, la promesa del rey es imposible de realizar, entonces Neptuno se torna implacable. Idomeneo deberá cumplir o cumplir, si no quiere ver a Creta destruida”. 


Los títeres mecánicos alcanzan los 4 metros de altura. Junto a Idomeo y Neptuno, participan personajes como el de una esclava troyana, un monstruo marino, entre otros. “La trama es muy entretenida y atractiva, y traslada al público a un mundo fantástico”.

 

La Faranda cumple este año 26 años de trabajo continuo, con obras como “Paraná Porá (2021)”, “Una aventura fantástica (2019)”, “Pedro y el Dragón (2018)”, “Quijote a la Cabeza (2016)”, “Una noche de aventuras (2016)”, “Mosquitas Muertas (2016)”, “Línea Materna (2014)”, “Pedrito (2013)”, “Nao (2012)”, “Cuestión de Ingenio (2010)”, “Una de amor y una de aventuras (2007)”, “De Fierro (2006)”, por nombrar solo algunas.

Todas ellas se caracterizan por escenografías de primer nivel, en que se entremezclan materiales nobles y tradicionales con técnicas vanguardistas, historias nuevas y modernas, fantasía y mitología, y por sobre toda las cosas dejan expresan el talento y la profesionalidad de sus creadores.

  
“Idomeneo, rey de Creta”, de Mozart

“Idomeneo, rey de Creta”, es el nombre de la ópera de Mozart que inspira la obra infantil de La Faranda. Consta de tres actos, con libreto de Giambattista Varesco. Se representó por primera vez en Munich el 29 de enero de 1781. Pese a ser la decimocuarta ópera de Mozart, Idomeneo es la primera que, según los críticos de arte, merece destacarse. Su invención musical y su estilo anuncian sus posteriores obras maestras, como “El rapto del serrallo” y “Las bodas de Fígaro”.

Los especialistas señalan: “Idomeneo sigue las reglas de la ‘ópera seria‘ italiana; la música apenas subraya el carácter dramático o lírico del libreto; puro divertimiento, participa de la acción en contadas ocasiones, sobre todo en el quatuor del segundo acto, en el que se perciben las reformas que Mozart introducirá luego en el teatro cantado: los personajes descubren su carácter, sus emociones y sus sueños, a través de canciones les son confiadas. Es el inicio de una auténtica revolución”.
 

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