La policía de Santiago del Estero detuvo a cuatro salteños que se habían dirigido hacia esa provincia para proveer de cocaína a diversos dealers que la distribuyen al menudeo.
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La policía de Santiago del Estero detuvo a cuatro salteños que se habían dirigido hacia esa provincia para proveer de cocaína a diversos dealers que la distribuyen al menudeo.
Se trata de una joven pareja de salteños que se hallaban junto a su hijo de 3 años, a los que al ser requisados les hallaron una mochila con 2,5 kg de cocaína y un aplicación para ubicar a un dealer en una localidad rural de la vecina provincia.
El importante trabajo de investigación policial permitió el día viernes desbaratar una operación de narcotráfico en la localidad de San Ramón, en el departamento Pellegrini, donde se logró el secuestro de 2,459 kilogramos de cocaína y la captura de una banda de salteños que aparentemente se encargaba de distribuir la droga en suelo santiagueño.
La sustancia fue encontrada en un campo ubicado a la vera de la ruta 176, en una mochila, luego de que personal de la Dirección General de Drogas Peligrosas interceptara un automóvil Renault Clio en el que se movilizaba una pareja y su hija de 3 años, todos domiciliados en la provincia de Salta. Los adultos fueron identificados como Jorge Agustín Guevara y Lorena Ester Campos.
La localización de la droga fue posible al comprobar que en el teléfono móvil de la mujer se encontraba abierta la aplicación Google Maps con un punto marcado hacia donde se dirigían estas personas, en la localidad de San Ramón, ubicada a pocos kilómetros del lugar donde fueron interceptados.
En base a los indicios, personal policial hizo un rastrillaje por la zona, donde se encontró una mochila tipo militar en un pastizal frente de una finca, a la vera de la ruta 176.
En paralelo, fueron detenidos en el paraje El Sauce otros dos salteños identificados como Ismael Enrique Arrieta Quiroga y Agustín Arnaldo Pereyra, cuya presencia había sido advertida como sospechosa por los investigadores cuando se encontraban en la ciudad de Nueva Esperanza, tras mantener contacto con otros sujetos que se habían alojado en un hotel, que dijeron ser de la localidad santiagueña de El Mojón.
Las presunciones de los investigadores dieron frutos cuando pudieron revisar el teléfono móvil de Agustín Pereyra, en el que se encontró un mensaje de WhatsApp en el que le informaba a su pareja que ya hizo la entrega del paquete que se le había encargado, en clara alusión a la sustancia detectada.