Nadia y Cintia Garzón son hermanas que residen en Perico, y junto a su mamá Delia Vilte, ayer en las primeras horas de la mañana, recibieron la bendición en la iglesia de Tilcara antes de iniciar la peregrinación al abra de Punta Corral. "Es una emoción volver a subir, hace varios años que no venía, mi hijo (Santiago) por primera vez ascendió el domingo (con la banda de sikuris "San José" de esa ciudad) y allá nos vamos a reencontrar", comentó Nadia Garzón.
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Nadia y Cintia Garzón son hermanas que residen en Perico, y junto a su mamá Delia Vilte, ayer en las primeras horas de la mañana, recibieron la bendición en la iglesia de Tilcara antes de iniciar la peregrinación al abra de Punta Corral. "Es una emoción volver a subir, hace varios años que no venía, mi hijo (Santiago) por primera vez ascendió el domingo (con la banda de sikuris "San José" de esa ciudad) y allá nos vamos a reencontrar", comentó Nadia Garzón.
"Mi mamá me trajo cuando yo era chiquita, hace cuatro años que no peregrinaba por mis hijos", agregó. Subir al abra "uno lo hace con fe, y no a pedir y si a agradecer por lo que nos da, la salud, el plato diario de comida". Y por la crisis económica nacional "para que nos ayude a seguir adelante".
Cintia, contó que su hermano Emanuel también peregrinó al abra, y recordó que dos años atrás ella subió a Punta Corral en Tumbaya, "pero me costó una barbaridad. A Tilcara la mamá nos trae desde los 8 años y ahora volvimos de nuevo gracias a Dios. Nos dijeron que había que subir temprano por el clima, pero el día (por ayer) está por demás soleado". De acuerdo a sus planes, en horas de la noche iban a estar llegando al santuario para regresar mañana con la Virgen.
Al igual que su hermana, afirmó que se peregrina para agradecer, "por la salud, porque estamos todos juntos y no hay problemas en la familia". A la Semana Santa, la conmemorará "con mucha fe y voluntad de seguir adelante, en esta situación que estamos lo único que nos queda es tener fe y voluntad". (Daniel Salas).