La tarifa eléctrica y de gas es tema de conversación desde iniciado el año. Esta vez, es por el nuevo esquema de subsidios que busca aplicar el Gobierno nacional llamado Canasta Básica Energética, una propuesta que define valores máximos para recibir el beneficio según los ingresos, que se aplicará en abril y requerirá llenar un nuevo formulario. También se espera el nuevo cuadro tarifario del gas, que se suma al incremento ya aplicado de la tarifa eléctrica.
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La tarifa eléctrica y de gas es tema de conversación desde iniciado el año. Esta vez, es por el nuevo esquema de subsidios que busca aplicar el Gobierno nacional llamado Canasta Básica Energética, una propuesta que define valores máximos para recibir el beneficio según los ingresos, que se aplicará en abril y requerirá llenar un nuevo formulario. También se espera el nuevo cuadro tarifario del gas, que se suma al incremento ya aplicado de la tarifa eléctrica.
En la actualidad en el país hay más de 15 millones de usuarios de energía eléctrica, 9,4 millones de usuarios de gas natural y 3,7 millones de usuarios de garrafas, según datos de la secretaría de Energía. Es un detalle no menor, ya que desde Nación que será necesario completar un nuevo formulario para acceder al beneficio.
La secretaría de Energía anunció que utilizará como base de datos la información ya presentada tanto para el Plan Hogar (de acceso a las garrafas) como para el Registro de Acceso a los Subsidios a la Energía (RASE). Estos son los beneficios vigentes hasta la fecha para obtener un descuento en el pago de las tarifas, (en el caso del RASE), y en el pago del gas envasado (en el caso del Plan Hogar).
Durante la aplicación del RASE, se llevaron a cabo distintas medidas para asistir a la población en el llenado del nuevo formulario. Entre ellas, se había dispuesto que Anses, Delegaciones Barriales y Centros de Referencia (CDR) distribuidos en todo el país ayudarían en la inscripción. Hace días, el gobierno de Javier Milei anunció el cierre de los CDR, que se definen como espacios locales de gestión ubicados en diferentes puntos del país para acercar y asesorar sobre políticas públicas.
Esta medida estaba destinada a los sectores que tuvieran complicaciones para inscribirse, como adultos mayores o personas que no tienen acceso a internet. Vale señalar que aún no hay un link habilitado para la inscripción.
Como sucedió con el RASE, desde la secretaría de Energía anunciaron que la aplicación de un nuevo esquema será progresivo, pero entrará en vigencia el mes que viene. «El nuevo régimen se implementaría en abril. En mayo vendrán las facturas con el nuevo esquema de subsidios», expresaron.
Durante la Audiencia Pública por el nuevo esquema de subsidios, la secretaría de Energía presentó una diapositiva donde expuso que el rango de costo de las tarifas, una vez aplicada la CBE, estará entre 30.000 y 40.000 pesos en total. Al mes de febrero, representa casi el 20% del Salario Mínimo Vital y Móvil que es de 202.800 pesos.
En abril también se registrará un aumento en las tarifas de gas, pero todavía no está definido de cuánto será. Antes del 16 de marzo, Nación deberá publicar los nuevos cuadros tarifarios. Fuentes del sector aseguraron a este medio que «hay un silencio de radio«, por lo que no hay estimaciones sobre los incrementos que registrará el usuario.
La tarifa de gas tendrá un índice de actualización mensual ligado a «las tarifas del servicio público de transporte de gas natural y del servicio público de distribución de gas por redes». Este debería ser informado a mediados de mayo, según establece la Resolución 52/2024 publicada en el Boletín Oficial.
Para aplicar a la Canasta Básica Energética será necesario responder a distintos criterios, que son los que dirán si el grupo conviviente es incluido o excluido de los subsidios. Entre estos, se enumeran que el solicitante y los miembros del grupo no deberán tener a su nombre una aeronave o alguna embarcación, dos propiedades inmuebles; no ser titular de medicina prepaga, entre otros.
Una vez pasado el detallado filtro, el acceso variará según los ingresos del grupo conviviente. Estos datos se desprenderán del Sistema de Identificación Nacional Tributario y Social (SINTyS), que se cruzará con el monto total del segundo criterio de selección, que es la Canasta Básica Energética. Esta se determinará por las necesidades básicas de consumo eléctrico y de gas, según el mes del año, la zona bioclimática y la cantidad de personas que conforman el grupo conviviente.
«Luego de calcular la CBE, se asegura que esta no representa nunca más de un X% del ingreso del hogar. Cabe mencionar el caso de que si un hogar tiene 0 pesos como ingreso registrado, se le subsidia el 100% del valor de la CBE que le corresponda según tipo de hogar, mes del año y biozona«, explicaron durante la Audiencia Pública por el nuevo esquema de subsidios.
El volumen de consumo que se subsidiará será menor al del esquema vigente. Al haber tantos filtros a pasar, el total de personas sin el beneficio será mayor, por ende el consumo cubierto por el Estado será menor. A la vez, el nuevo esquema implicará un nivel de consumo por debajo del promedio establecido a nivel nacional, según indica el informe de la consultora Economía y Energía.
«Este esquema de subsidios es un nuevo enfoque que contempla la capacidad de pago de las personas, para que el dinero del Estado Nacional llegue a quienes más lo necesitan. Por el contrario, en el mecanismo vigente los recursos se vuelcan en forma indiscriminada y generalizada. Dado que el dinero es escaso, el esquema propuesto no busca excluir, sino focalizar la ayuda en los sectores vulnerables«, expresaron desde la secretaría de Energía.
Durante la audiencia pública por el nuevo esquema de subsidios, el organismo señaló fallas en el actual sistema. Entre ellas, que los segmentos subsidiados (grupo de ingresos medios y de menores ingresos) consumen más energía que el segmento sin subsidio. «Otorgar beneficios sin límite de consumo, deriva en consumos ineficientes y en un mal uso de los recursos, saturaciones del sistema y cortes en los suministros», expresaron.
Esta observación está asociada también a la eficiencia energética y a la capacidad económica de los hogares. Los electrodomésticos que tienen menor consumo eléctrico tienen un costo más elevado, por lo que muchos optan por los más baratos. Esto afecta de forma sensible la necesidad de KWh en un hogar.
Desde la secretaría marcaron que «la eficiencia y el uso racional de la energía son pautas necesarias para el sector energético y al mismo tiempo ayudan a los usuarios a que las facturas de los servicios sean menos onerosas».