El Dakar es una fiesta para todos los amantes del deporte motor y aficionados en general. Ayer El Moreno estuvo colmado de espectadores que alentaron a los corredores.
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El Dakar es una fiesta para todos los amantes del deporte motor y aficionados en general. Ayer El Moreno estuvo colmado de espectadores que alentaron a los corredores.
Ni el mal clima pudo con la pasión “fierrera” de los jujeños. De entrada, las constantes lluvias del martes por la noche hicieron crecer los ríos que descienden por Purmamarca y el tránsito se detuvo hasta las 3 de la mañana. El caudal de agua bajó y despacio los automovilistas pudieron llegar a la vieja entrada de El Moreno. Lugar de largada y primera zona de espectadores, sin embargo previo a la bajada de banderas a las 7 de la mañana, una fuerte llovizna cayó sobre los pilotos y sus seguidores. Pero el “Tata” Dios se apiadó, al frío y el agua, lo reemplazó un radiante sol que sirvió para templar a los presentes. Como dato no menor, por el frío de la Puna jujeña, Paulo Gonçalves, ganador de la etapa en motos, aceleraba su máquina y posaba sus manos para poder darles calor.
Pero después, todo fue una fiesta. Porque la gente no esperó demasiado para presenciar la carrera. Sin dudas que los más aplaudidos fueron los argentinos, pero por mayoría, especialmente Kevin Benavides, el piloto de Salta que en Jujuy tiene muchos amigos, compañeros de enduro y dijeron presente para alentarlo. Además con las últimas noticias, cobró mayor fama. Otro agasajado fue Robby Gordon, el estadounidense fiel a su estilo, saludó a los fanáticos que ansiosos aguardaron divisar la partida del Gordini anaranjado.
Los Patronelli también tuvieron su “platea femenina”. Marcos y Alejandro, antes de largar y después de la prueba, se sacaron fotos con las señoritas que estuvieron presentes en la zona de El Colorado.
Pero el jujeño le dio su calor a todos los competidores. Porque mientras recorrían la etapa, en los distintos puntos de nuestra geografía los gritos y aplausos fueron para todos.
La gente dijo presente desde la vieja entrada a El Moreno, Cerro Bayo, Laguna Colorada y Ojo de Agua, a lo largo de los primeros kilómetros de la prueba de ayer.
A la vera de la ruta
Si bien se corrió en la zona de la Puna, el público jujeño se abocó al costado de la ruta nacional 9 en Purmamarca, Volcán, Tumbaya, Yala, Villa Jardín de Reyes, para ver pasar a los pilotos.
Si bien el cansancio se siente después de la competencia y se hace mucho más complicado en el tramo de enlace de regreso al vivac, los competidores tuvieron el gesto de saludarlos a todos. Ya sea con la mano o bien haciendo sonar la bocina de su vehículo.
Por eso la fiesta del Dakar en Jujuy fue completa y todos pudieron disfrutar de la competencia más importante que tiene el rally mundial.
Fuerte apoyo a los pilotos de Bolivia
Muchos espectadores llegaron desde Bolivia para acompañar a los corredores de su país en el paso del rally por Jujuy. Algo que Juan Carlos Salvatierra reconoció. “Agradecerles el apoyo que me brindan día a día pero no solamente a mí sino, a todos los corredores de Bolivia que estamos en competencia”, manifestó el corredor de motos.
El “Chavo” Salvatierra le contó a El Tribuno de Jujuy las sensaciones de este rally “estoy muy bien, todo tranquilo, disfrutando, con muchas ganas”, y agregó “fue una especial rápida, algunas partes técnicas, ya un poco más de elementos de Dakar”, puntualizó al hacer referencia a la etapa corrida en Jujuy.
Arriba de su KTM, el boliviano comenzó a palpitar la carrera en sus tierras “hay mucha gente, muy lindo, ya estamos cerca de entrar a la etapa de Bolivia, muy lindo la gente, uno sabe que siempre de local es más emocionante, más especial”, opinó.
El piloto buscará lucirse “no sabemos el recorrido concretamente pero será otra etapa maratón complicada donde debemos buscar los primeros lugares”.
El piloto boliviano reconoció que en su país ya se respira el rally. “Todos esperan ansiosos la llegada de la carrera, es una fiesta nacional ya”, culminó Juan Carlos Salvatierra.