Un adolescente de 17 años murió de un balazo en la ingle disparado por un policía que aparentemente pretendía identificarlo en un procedimiento en el barrio Parque San Martín, del partido de Merlo, y por el crimen fue detenido el efectivo ante la sospecha de que se trató de un caso de gatillo fácil.
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Un adolescente de 17 años murió de un balazo en la ingle disparado por un policía que aparentemente pretendía identificarlo en un procedimiento en el barrio Parque San Martín, del partido de Merlo, y por el crimen fue detenido el efectivo ante la sospecha de que se trató de un caso de gatillo fácil.
Lucas Décima (17) recibió un balazo en la ingle que le provocó la muerte de manera casi instantánea.
Fuentes policiales y judiciales aseguraron que el policía involucrado fue identificado como el sargento Mariano Alberto Ballarino (40), quien prestaba servicios en el Comando de Patrullas de Merlo y ya desafectado de la fuerza por el Ministerio de Seguridad bonaerense.
En tanto, el joven fallecido fue identificado como Lucas Décima (17), quien recibió un balazo en la ingle que le provocó la muerte de manera casi instantánea.
El hecho ocurrió cerca de las cinco de la madrugada del pasado jueves en la esquina de las calles Ezeiza y Eduardo Costa, de Parque San Martín de Merlo, al oeste bonaerense, ante un llamado de emergencia al 911 por parte de un vecino que denunció un supuesto robo en la zona.
El sargento Ballarino y otro compañero se dirigieron al lugar y, al llegar se encontraron con Décima, a quien aparentemente quisieron identificar.
De acuerdo al relato del policía, en ese momento quiso bajar del patrullero empuñando su arma reglamentaria calibre 9 milímetros y tropezó con la puerta del vehículo y, accidentalmente, se accionó su pistola, versión que ahora la justicia deberá probar.
El balazo impactó en el cuerpo de Décima, quien cayó al piso malherido, dijeron las fuentes policiales y judiciales consultadas.
Inmediatamente, Décima fue trasladado al Hospital Héroes de Malvinas, de Merlo, donde murió cuando era asistido unos minutos más tarde
La fiscal del caso, Valeria Courtade, titular de la Unidad Funcional de Instrucción 4 de Morón, determinó que el joven fallecido no estaba armado al momento del hecho y obtuvo el testimonio de distintos vecinos del barrio, que dijeron que no se resistió a la identificación.
Además, ordenó inmediatamente el secuestro de la pistola calibre 9 milímetros del policía y la aprehensión del policía involucrado.
Fuentes judiciales dijeron que el policía quedó formalmente detenido, acusado del delito de “homicidio calificado por el uso de armas”, y fue trasladado a una comisaría de Ituzaingó.
En tanto, la fiscal del caso solicitó que los peritajes al arma del policía sean realizados por peritos de Gendarmería Nacional.
Por otro lado, la Auditoria General de Asuntos Internos del Ministerio de Seguridad de la Provincia de Buenos Aires desafecto al sargento de su puesto mientras se realiza la investigación del crimen.