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"Mi nieto me contó que su mamá le pegaba mucho"

Los abuelos paternos de Austin Emir (4) y Alma Zoe Vilte Galán (1) pidieron celeridad en la investigación judicial. La joven un mes antes había intentado quitarse la vida y era muy agresiva con sus hijos, dijeron sus suegros.
Sabado, 26 de mayo de 2018 00:00

Hace pocos días se cumplió el primer aniversario del crimen de los hermanitos Austin Emir (4) y Alma Zoe Vilte Galán (1), hecho ocurrido en la localidad de Huacalera, por el que están detenidos desde ese entonces sus padres Antonio Vilte (28) y Silvia Galán (23) y los abuelos paternos de los niños piden celeridad en la causa.

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Hace pocos días se cumplió el primer aniversario del crimen de los hermanitos Austin Emir (4) y Alma Zoe Vilte Galán (1), hecho ocurrido en la localidad de Huacalera, por el que están detenidos desde ese entonces sus padres Antonio Vilte (28) y Silvia Galán (23) y los abuelos paternos de los niños piden celeridad en la causa.

Silvia Galán y Antonio Vilte están detenidos acusados de ser los responsables del asesinato de sus dos hijos de 4 y de 1 año.

Lino Vilte y Nicolasa Cruz, padres de Antonio Vilte, rompieron el silencio y hablaron con El Tribuno de Jujuy y contaron detalles que comprometen seriamente a Silvia Galán, madre de las criaturas.

La familia Vilte vive en el barrio Concepción de María de la localidad de Huacalera, una casa amplia y modesta, con las paredes de adobe y el techo bajo, para protegerse de la crudeza del frío de la zona.

El comedor está pintado de un tenue verde y adornado con líneas y curvas y caritas sonrientes rojas y azules, dibujadas con lápices de colores a escasos centímetros del piso.

"Todos estos dibujos me dejaron mis nietos, todas estas cositas dibujaron Emir y Zoe. Vivieron acá y eran felices. Todo lo que pasó es tan doloroso, que me duele el pecho cuando me acuerdo de ellos. Yo todavía sigo esperando a mis nietos, pienso que ya van a volver, sueño que mis chiquitos abran la puerta y entren corriendo y gritando", dijo entre lágrimas Nicolasa Cruz.

Es que Silvia Galán y Antonio Vilte convivieron casi siempre en casa de los padres de Vilte, menos cuando viajaban a trabajar a la provincia de Mendoza. "Tenían una pieza adelante, pero almorzábamos juntos y los chicos pasaban prácticamente todo el día acá. En este comedor aprendieron a caminar, acá jugaban", dijo Nicolasa Cruz.

"Mi nieto algo presentía"

Un mes antes del crimen de los hermanitos Vilte Mamaní, la relación entre sus padres había llegado a su fin. Antonio Vilte había preparado un viaje para volver a trabajar a Mendoza, pero Galán seguía viviendo en casa de sus suegros.

"Un domingo a la tarde Silvia (Galán) le mandó un mensaje a mi hermana mayor, que no vive en la provincia, era con la que mejor se llevaba, porque sus hermanos nunca se preocuparon por ella. Le mandó un mensaje de despedida, pidiendo que cuiden de sus hijos. Había salido desde mi casa y se fue a Villa El Trabajo donde sus padres le dejaron una piecita. Cuando nosotros nos enteramos de eso, salimos corriendo para allá y la encontramos tirada en el suelo. Tenía una sábana atada al cuello y otro pedazo de la misma sábana en un tirante. Lloraba, se hacía la desmayada. Vino la Policía y el Same y la llevaron internada al hospital de Tilcara", contó Belén Vilte, hermana del joven detenido.

"Silvia estuvo internado casi tres semanas y sus hermanos decidieron que ella viviera en Villa El Trabajo, (distante a unos 600 metros de la casa de la familia Vilte), mi nieto que estuvo todo ese tiempo con nosotros no se quería ir con su mamá, algo presentía, estaba muy triste".

Durante la recuperación de Galán y un tratamiento que le habían recomendado los médicos (sufre de epilepsia), los niños pasaban más tiempo con sus abuelos, pero a la noche debían llevarlos a casa de Galán. "Emir lloraba cuando tenía que irse y me decía que su mamá le pegaba mucho, a él y su hermanita", contó Nicolasa Cruz.

Respecto de la detención de Antonio Vilte, sus padres dejaron en claro que lo que quieren es justicia. "Hay suficientes pruebas que determinan que mi hijo no estuvo en ese lugar donde fueron asesinados mis nietos, es por eso que no entendemos cuál es el motivo de que la causa siga estancada y no se analicen estas pruebas para llegar a la verdad de esto", dijo Lino Vilte, padre del joven.

José Luis Manzur es el abogado defensor de Vilte, mientras que Galán es representada por el defensor oficial Martín Meriles.

Galán se negó a declarar en todas las oportunidades, lo único que dijo es que no se acuerda de nada. Mientras que el representante legal de Vilte presentó un cúmulo de elementos probatorios para desvincularse del hecho y hasta propuso un careo entre ellos, donde el propio Vilte le pedía a su exmujer que "cuente la verdad", ante la indiferencia de la mujer, hoy detenida en Alto Comedero.

Piden por el nieto

Silvia Galán fue detenida acusada de asesinar a sus dos hijos el 16 de mayo del año pasado, gestaba casi el quinto mes de embarazo. Estando en prisión dio a luz a Camilo Ángel, que hoy tiene ocho meses.

“Ya hablamos con el abogado y queremos recuperar al bebé que nació en prisión. Me carcome la cabeza pensar que le pueda pasar algo en manos de Silvia. Es una chica muy inestable, si no toma la medicación se pone muy furiosa”, dijo entre lágrimas Lino Vilte.

“Esperamos que en el corto plazo se analice la situación procesal de mi hijo y le otorguen el cese de detención, para que él pueda reclamar por su hijo”, relató el padre.

La causa está de momento demorada, porque a inicios del corriente año fue derivada desde la Fiscalía de Investigación Penal Nº 7 a cargo de Darío Osinaga a la especializada en Delitos Complejos, a cargo del fiscal Diego Cussel.