Durante el primer tiempo del partido que terminó en empate sin goles en Tucumán entre River y Atlético en la noche del miércoles, la tensión se intensificó cuando, cerca del primer tiempo, el mediocampista Esequiel Barco desaprovechó dos penales (volvió a ejecutarlo por invasión de zona), desobedeciendo las indicaciones de su entrenador Martín Demichelis, quien en medio del partido le insistía enérgicamente que no los pateara.
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Durante el primer tiempo del partido que terminó en empate sin goles en Tucumán entre River y Atlético en la noche del miércoles, la tensión se intensificó cuando, cerca del primer tiempo, el mediocampista Esequiel Barco desaprovechó dos penales (volvió a ejecutarlo por invasión de zona), desobedeciendo las indicaciones de su entrenador Martín Demichelis, quien en medio del partido le insistía enérgicamente que no los pateara.
El arquero decano, José Devecchi, logró detener el primer disparo, pero debido a que el VAR observó que un jugador local se adelantó y participó activamente del rebote, despejando la pelota, se ordenó repetir el penal. El DT decidió que Borja sería el ejecutante, aunque Barco, optó por desobedecer la orden y volvió a marrar su tiro, elevándose el balón por encima del travesaño.
La polémica continuó en el segundo tiempo, cuando Barco no regresó al campo y fue reemplazado por el juvenil Franco Mastantuono. Este episodio generó debate y fue el tema principal tras el partido.
¿Hubo riña?
Varios periodistas se hicieron eco de una supuesta pelea a golpes de puño en el vestuario entre el técnico y el jugador, rumores alimentados por fotos de las marcas en el rostro y en la muñeca de Barco, y por otra captura que circuló, donde se aprecia una marca en el rostro de Demichelis.
El escándalo se expandió a tal punto que el mismo Demichelis tuvo que salir a explicar que la marca en su rostro era a causa de hongos en la piel que ya tenía antes del partido. Ante las especulaciones, la esposa del DT millonario, Evangelina Anderson, también salió a aclarar el origen de las marcas respaldando a su marido.